Actions

Work Header

¿Podria yo?.

Summary:

Este va a ser un libro exclusivo para Shaka y Mu. Advertencia contiene lemon yaoi. No apta para menores de 18. Es muy importante que lean la introducción.

Chapter 1: Introducción.

Chapter Text

3sTe1.png

Buenas tardes,noches jóvenes caballeros. Paso a contarles en esta intro el contenido que tendrá este fanfic,como siempre aunque un poco por arriba pero para que estén orientados.

 

Bueno este fic va a ser dedicado a Mu y Shaka,que los amo. Acá va a haber lemon y claro,está pareja me puede así que acá no se aceptan menores de 18 . Porque muchos capítulos van a ser muy explícitos y a los que no les guste el yaoi (sexo entre dos hombres) o el lemon ( sexo explícito) no se los recomiendo. Igual también van a haber capítulos de como siento yo que empezaría su relación .

 

Van a haber cositas de la historia original de Saint Seiya o frases de los caballeros pero la mayoría van a ser a mí conveniencia jaja.

 

También van a estar otros caballeros pero como secundarios ,los principales van a ser Shaka y el borreguito ♥️.

 

Las aclaraciones necesarias para no tener que ponerlas en cada capítulo.

 

Aclaración 1: Los personajes de Saint Seiya no me pertenecen sino a Masami Kurumada.

 

Aclaración 2: Este es un texto creado para fines de entretenimiento sin fines lucrativos.

 

Ahora si les mando un beso y abrazo por el cosmo cybernético y espero disfruten está bella historia.

 

Seiyaaaaa (see yeah).

 

Lele.

Chapter 2: Ven aquí.

Chapter Text

Capítulo 1: ven aquí.

 

—¡Cristal wall!— escuchó Shaka a medida que veía como una pared de cristal se formaba entre él y su enemigo.

 

El rubio estaba parado ,una herida sangraba en su brazo izquierdo, pequeña pero al parecer superficial aunque sangraba mucho. Una luz de cosmo salió de su mano para aplicarlo contra el muro rompiéndolo ,y de paso impacto contra el enemigo a quien dejó fuera de juego.

 

Un simple —¡OM!— había bastado para acabar con todos los que los rodeaban

 

—Shaka...—dijo por lo bajo el caballero dorado de aries acercándose — yo...—sus mechones lilas cubrían parte de su rostro aunque dejaba ver sus tikis fruncidos en ese momento.

 

—No necesitaba tu ayuda— dijo cortante el Virginiano dirigiéndose a él. Sus ojos estaban cerrados y aunque sonaba tranquilo el ariano pudo sentir algo extraño en su cosmo. La energía en tonos lilas se enfrentaba a los anaranjados.

 

El peli lila se puso frente a él, cerró los ojos y sonrió —lo sé, solo quería terminar rápido con esto. Lo siento si te incomode.

 

—No , no lo hiciste— movió su rostro a un lado cerrando sus labios_ sólo que podía con esto como ves.

 

—Pero estás sangrando, deja que te ayude...

 

—No gracias , puedo arreglármelas.

 

—Déjame protegerte Shaka-pensó para si mismo Mu— tendré que anotarlo para la próxima — se sonrió y lo miró apacible esperando que lo dicho calmara los ánimos del rubio.

 

—¿Todavía tienes que aprender lo que puedo hacer a pesar de todo lo que pasamos ?— le sonrió sin dientes el virginiano —¿Mu...?.

 

La forma en que hablo le hizo pasar electricidad por todo su cuerpo al lemuriano, aquellas simples palabras le habían hecho entender todo lo que se conocían este último tiempo, a pesar de haber estado juntos desde el principio como con Aldebarán ,el santo de virgo resultaba un poco más difícil de descifrar. Shaka era un misterio incluso después de muchos años de conocerse.

 

—Shaka ,incluso ahora viéndote resultas un enigma, aunque muestres un poco de tu personalidad se que no es ni una parte de lo que eres...¿Quién eres en realidad Shaka?.

 

—Si resuelves el enigma eres inteligente pero si lo haces tarde resulta que eres un idiota pero con un enigma resuelto.

 

El lemuriano los teletransporto a la casa de virgo rápidamente, normal para él, no le era difícil ir a dónde quisiera aún si eso significaba llevar a una o dos personas más. El rubio se movió hacia un lado para sacarse la armadura, sus cabellos estaban algo alborotados aunque no lo suficiente para verse desaliñado aún después de una ardua batalla podía verse así de bien.

 

Las ropas de Shaka estaban con una gran mancha escarlata ,el hindú se quedó allí parado por unos segundos ,más luego se sentó y junto las palmas de sus manos en su pecho denotando que no estaba predispuesto a hablar.

 

—¿Esperas que me vaya ?— se sonrió para si mismo el ariano— no lo haré, en vez de eso te ayudaré...porque no puedo ver herido a un compañero pudiendo hacer algo.

 

Mu se acercó al hindú, los tacones de la bota hacían un chillido en el suelo de la casa de la virgen, Shaka seguía inmóvil como esperando que el ariano se fuera tal vez, al sentir que el peli lila se acercaba miro hacia la puerta.

 

—Déjame Shaka, por favor..— la capa blanca se enredo con sus cabellos lilas al agacharse ,y los cuernos dorados de la armadura de aries encerraban al rubio entre ellos. Mu curo la herida del caballero de virgo, podría haberlo hecho antes si solo se lo hubiera permitido pero había podido llegar a esta cercanía en este momento.

 

—Deja que te cuide al menos una vez, después de todo tu lo haces todo el tiempo ,pero cuando quiero agradecerte de algún modo no me lo permites...¿Por qué?.

 

—Porque no lo necesito, te lo dije— contestó casi por inercia, como si su cuerpo estuviera allí más su mente en algún otro lugar.

 

—¿En qué piensas tanto, Shaka?— lo miró a los ojos que se mantenían cerrados. Su flequillo estaba partido al medio dejando ver su bindi en la frente, también unas gotas de sudor se habían juntado en su cuello.

 

—No estoy pensando —sus rodillas estaban enfrentadas una a otra y sus manos unidas ahora hacían a ambos lados de su cuerpo.

 

—¿Por qué me mientes?. Sé que estás pensando en algo, lo noto—insistió el ariano —¿ Por qué me mientes Shaka de virgo?.

 

—¿Crees que sea necesario para mí mentirle a alguien?—se sonrió.

 

—Shaka....—insistió el pelilila abriendo sus labios levemente.

 

—No te preocupes , son sólo dudas, cosas que podría tener cualquiera— volvió a unir sus manos y aunque para otros esto era una señal que el virginiano había dejado de escuchar al santo de aries le era muy fácil distinguir.

 

—Pero tú no eres cualquiera, eres el hombre más cercano a un Dios,por ende, tus dudas no son cualquier duda.

 

—¿Crees que por ser quién soy no tengo dudas normales ,caballero de aries?.

 

—¿Por qué me alejas así?. Cada vez que pienso que puedo conocerte ....simplemente me doy cuenta cuan lejos estoy de ti— se encogió de hombros el lemuriano.

 

—No te alejo — dijo cortante— hay muchas cosas que desconocemos de la gente, podría decir lo mismo de ti pero si te deja más tranquilo últimamente hay preguntas que no puedo responderme.

 

—Todos tenemos derecho a dudar , imaginaría que alguien cercano a un dios no tan seguido ya que no comete errores aunque ...hubiera jurado que Buda disiparía tus dudas con facilidad— sus ojos esmeralda estaban clavados en los párpados de Shaka— y si no es así permíteme escucharlas para tratar de solucionarlas.

 

—No todas pero igual no te preocupes siempre termino por responderlas ,no creo sea necesario que seamos dos los de las incógnitas que me acogen —suspiró.

 

El ariano no podía dejar de mirarlo, por alguna razón deseaba abrazarlo, sentía que de algún modo estaba triste y él quería ser quién lo consolara.

 

—Sabes qué puedes contar conmigo...—. Soltó con las mejillas rojizas , la sangre había subido hasta allí al hablarle de un modo tan intimo . Porque el contar con él no eran solo palabras dichas porqué sí.

 

—¿Puedo contar contigo, Mu? — se acercó a su rostro como queriendo contarle un secreto —¿Puedo realmente?.

 

Las pieles de los caballeros desprendían calor, un calor que al unirse parecía arder en el aire.

 

Las mejillas de Mu se coloraron aún más pero permaneció allí frente al hindú .—. Claro, sabes que si — observó el rostro del virginiano detenidamente notando cada detalle; de sus abultadas pestañas sobre los párpados, parte del flequillo rubio sobre su nariz y sus labios tan finos apenas abiertos .

 

La cercanía del caballero de virgo le hacía sentir extraño al guerrero de jamir,y no podía evitar mirar sus labios con tentación de poseerlo.

 

Shaka podía notar el calor que desprendía el rostro de Mu ,sus mejillas también se volvieron rojas al momento, ambos respiraban con dificultad. Los labios del rubio casi rozaban los del peli lila, aunque por un momento se alejó.

 

El ariano suspiró aunque quería que volviera a acercarse, deseaba que no se alejara así que volvió a acortar la distancia de sus labios con los del hindú, y ambos se enrojecieron más.

 

Aunque debajo de la vergüenza había algo. El peli lila estiró sus brazos ,y tomó con suavidad al virginiano que sintió la dureza de la armadura de aries sobre su pecho. Sus labios volvieron a estar a milímetros de distancia.

 

El hindú se sentía cómodo en sus brazos ,aunque no lo admitiera su consuelo era algo que le gustaba, y necesitaba.

 

El caballero de aries quería cuidar al virginiano, más que nada y deseaba que dejara que lo cuidara.

 

Los labios de Mu se posaron sobre los de Shaka para sorpresa de ambos, dejándolos congelados por unos segundos hasta que abrieron sus labios para dejar paso a sus lenguas que se envolvían suavemente ,las ansias del gesto eran obvias sin embargo lo hicieron lento ,suave , tomando el tiempo adecuado para las caricias dentro de su bocas.

 

Sus mejillas hirvieron en demasía en parte por contener los pequeños jadeos que salian de sus gargantas. Las manos firmes del ariano atraían al virginiano que un poco detenia el roce de sus cuerpos con una mano sobre el peto de la armadura de aries. El rubio se separó,dejando sentir la respiración entre cortada de ambos en el pequeño espacio creado por el mismo.

 

De repente Mu se encontró mirándolo fijamente, ya que Shaka había abierto sus ojos. Los ojos del caballero de virgo; azules,muy profundos que hacían aflorar sentimientos en el ariano. Lo observaban como él no pensaba que deseaba.

 

—Shaka...—dijo casi sin aire el lemuriano

 

—¿Por qué me ayudaste en realidad Mu? —le preguntó respirándole en el rostro.

 

—Porque...—aun no podía respirar bien—¿Qué haría si algo te sucediera?.Shaka...¿qué haría si...mueres? —dijo casi como una confesión que no vio venir.

 

—La muerte en realidad es solo el comienzo— le dijo sonriendo sin dientes.

Mu le sonrió —Tu sonrisa junto a tu mirada... son hipnotizantes Shaka de virgo,y por alguna razón no quisiera dejar de verlas por el resto de mí vida— dijo el ariano aunque más bien sonó en la mente del virginiano .

 

— Pero yo ....—. Mu no podía hablar bien en voz alta así que se escuchó a él mismo hablando con dificultad por primera vez ya que estaba confuso aunque respiro profundo para calmarse— yo no podría permitir eso...

 

Shaka achicó los ojos dulcemente. —. Ven aquí ...—lo atrajo contra si mismo aunque hubiera preferido sentir la piel del caballero en vez de la armadura, estaba bien por el momento. Acarició su cabello,y apoyó el rostro del lemuriano en su pecho. Mu pudo escuchar el corazón agitado de shaka por primera vez.

 

El lemuriano sintió la melodía del corazón de shaka, muy parecida a la suya en ese momento,¿Podría ser que sus corazones estaban al unísono?.

 

El ariano se acurrucó en el pecho del rubio mientras se dejaba acariciar .—. No me iré a ningún lado sin estar contigo — tomó su rostro y lo hizo mirarlo. Los ojos azules de Shaka se unieron a los esmeraldas del peli lila— Mu....no te dejare —confesó.

 

El caballero de aries se sonrojó tanto o más que el santo de virgo sin embargo le sonrio y volvió a apoyar sus labios en los del hindú como si hubieran sellado alguna especie de pacto con ello. Cómo si ese simple beso fuera algo más .

—Shaka,¿Tus palabras son sinceras?— pensó mientras disfrutaba el beso del hindú.

 

.... Continuará...

Chapter 3: Gracias.

Chapter Text

Capítulo 2: Gracias.

 

Shaka abrió los ojos, en la casa de virgo por la mañana, aunque parecía diferente a todos los días en realidad era la misma, pero él no y por eso la sentía diferente.

 

No, no era eso, había algo allí que lo hacia sentirla así. La tela de su ropa estaba algo desarreglada ,seguro en la noche había tenido algún sueño que perturbó su descanso.

 

Se sentó en medio de la habitación con sus manos unidas en la flor de loto para meditar como parte de su día a día . Su encuentro con Buda, con él mismo. Su cosmo crecía a su alrededor y sentía el calor de su propia energía dorada envolviéndolo todo.

 

—Shaka, ¿Puedo pasar? — sonó la voz conocida del lemuriano a lo lejos.

 

—Sabes que si...Mu— eso era lo diferente, había sentido aquel cosmo que extrañaba acercarse.

 

El hindú observo al guerrero de Jamir que ahora no llevaba armadura, su piel blanca contrastaba con la tela arena de su ropaje resaltando la toga roja entre sus cabellos lilas . Sus esmeraldas lo miraban expectantes, creyó que iba a hablar pero no podía esperar.

 

—Mu— dijo con suavidad, algo nuevo en él.

 

—Si, Shaka..— dijo distraído el ariano

 

—Dime, ¿Qué buscas aquí exactamente?— ahora sus ojos estaban cerrados como ensimismandose en sus pestañas tupidas.

 

—No lo sé...—confesó dudoso aunque lo que si sabía era que quería estar allí con él.

 

—¿No lo sabes?— inquirió con inquietud.

 

—No—admitió una vez más el lemuriano— sólo sé que por alguna razón necesitaba verte , digo, quiero verte .

 

—¿Y hasta ahora te das cuenta de ello, Mu? — hizo una mueca el rubio.

 

—Al menos te lo hago saber, ¿No es cierto? no quiero que estemos solos— dijo un poco enojado por la pregunta innecesaria.

 

—Pero estoy acostumbrado a estar sólo. ¿A caso tú no?.
—No quiero que estés solo Shaka como tampoco quiero estarlo yo mismo ahora que..

 

—Y yo no quiero un capricho de soledad ,Mu— sentenció, de repente el ariano sintió que lo que había pasado no volvería a pasar — estar solo no es un problema para mí.

 

—¿Y si pudiéramos estar solos pero juntos?,¿Qué dirías?—aventuró el lemuriano tratando de exponer aquellos sentimientos que lo embargaban.

 

—¿Es por mí...o por ti?— inquirió el hindú.

 

—Por ambos, sé que estás bien sólo ,pero,¿Me crees si te digo que necesito estar a tu lado ?,que...¿Te necesito?— Mu se acercó al virginiano, miró sus párpados cubiertos por aquellas extensas pestañas que los cubrían perfectamente ,su flequillo cubriendo parte de su rostro con un mechón rubio escapando hacia su nariz, la piel blanca del caballero de virgo rozando las telas arena pegadas un poco a su cuerpo.

 

Se sonrió y acarició su brazo descubierto hasta llegar con sus falanges a su rostro con suavidad.

 

Shaka se acarició con la palma de la mano del ariano con ternura sintiéndolo— Mu...tienes una piel muy suave.

 

Las mejillas del ariano se cubrieron de color rojizo — Shaka, no creí poderme sentir así contigo ,me das mucha ansiedad ,pareciera que mí corazón podría explotar en cualquier momento — confesó con vergüenza.

 

...Mucha información ,mucha información ...—pensó para si mismo —...espero no asustarte Shaka.

 

—Los sentimientos egoístas no caben en un caballero dorado ,Mu.

 

—¿Egoísta dices?— se rió sin ganas— el amor no es egoísta Shaka.

 

—¿Es amor lo que te hago sentir?—lo miró con los ojos cerrados y se sonrojó al pensar en el guerrero de Jamir de ese modo.

 

Las mejillas del lemuriano se coloraron más si podían y sus palpitaciones se elevaron como en batalla.—. Algo parecido al amor ,imagino— cuanto más pensaba en eso más le costaba respirar y parar el aceleramiento de él mismo.

 

Shaka tocó el pecho del ariano a través de las suaves telas sintiendo como se aceleraba el ritmo del corazón de Mu al mismo momento que el suyo, dé la misma manera, ¿Podría ser que sus corazones de algún modo se comunicaran al juntarse?.

 

—Mu...la palabra amor conlleva muchas cosas que sólo podría imaginar — Shaka acarició el rostro del ariano y corrió sus mechones lilas para descubrir sus esmeraldas temblando.

 

Está vez le sonrió mostrando sus dientes, y lentamente abrió sus ojos para mostrar el reflejo de Mu en ellos.

 

—No hagas eso — el lemuriano hablaba aunque más bien se perdía en la mirada del hindú— cuando me miras no puedo controlarme.

 

Sus esmeraldas se semi cerraron bajo sus tikis observando sus zafiros por debajo de sus cabellos rubios, se acercó casi por inercia y sus manos se unieron con las de Shaka. Cada dedo se entrelazó suavemente sobre el otro, con cada roce tomaba un dedo

 

El puño del ariano quedó atrapado con la palma del virginiano y el cosmo del mismo abrazado por el del rubio.

 

—Bésame ,Shaka — le susurró —sólo hazlo...

 

El deseo del lemuriano se notaba en todo su cuerpo tensionado al igual que el hindú que andaba lento pero seguro de lo que quería aunque no le salió más que suspirar profundamente.

 

—No necesitas imaginar— y al no ver una respuesta lo beso él mismo ,sus labios suaves pasaron por la parte inferior y superior del caballero de virgo.

 

Sus lenguas se movían suavemente sobre la otra como si fueran una ,la mano de Shaka se aventuró a acariciar el rostro de Mu haciendo que suspirara en sus labios .

 

—Shaka, ¿Podrías amarme?— le dijo apoyando su mejilla en el dorso de la mano del rubio.

 

—¿Si podría amarte, dices ? — tomó su barbilla haciéndolo mirar hacia arriba, para besar su cuello suavemente hasta llegar nuevamente a sus labios. Está vez las esmeraldas se juntaron con los zafiros reflejándose mutuamente.

 

—Si, porque yo no podría no amarte Shaka —se separó más luego volvió a besarlo más profundo, esta vez sus pechos se juntaron rozando sus pieles calientes.

 

Pasó sus manos por su pecho, acarició su cuello hasta casi hacerlo caer al suelo, Shaka se había tensado, casi como oponiéndose a la caída pero a la vez atrayéndolo hacia él, acariciándolo dulcemente. Sus respiraciones se chocaban en el aire y sus energías se hacían una sola.

 

El cosmo de virgo ardía sobre el cosmo de aries,los labios del hindú se apoyaron sobre los del lemuriano con deseo, saboreando la piel del ariano, entremezclando con sus lenguas la saliva que creaban.

 

Mu tomó la muñeca izquierda de Shaka con firmeza sintiendo como cerraba su mano ,la apoyo a un lado, luego la otra que se dirigía a su cuello, un poco lo inmovilizó adrede porque no quería que escapara . Shaka hablo en sus labios.

 

—. Espera, Mu.

 

Pero el ariano volvió a besarlo ,sus manos sostenidas por el lemuriano demostraban lo fuerte que era como guerrero de Jamir .

 

— ¿Qué es lo que quieres de mí? Me está....

 

—Sólo cállate Shaka,cállate de una vez....—dijo en la mente del rubio — te quiero a ti...—respondió entre jadeos el lemuriano.

 

El caballero de virgo al fin cedió, las palabras estaban de más ,aunque Mu no podía aún distinguir mucho entre sus propios pensamientos y los de Shaka siguió besándolo. Recibiendo también las caricias y besos del hindú.

 

...te deseo...te deseo...te deseo...

 

Sus mejillas ardían, sus pechos subían y bajaban rozándose. Sus cosmos ardían en uno solo. Mu se poso sobre Shaka ansiosamente, acaricio cada músculo del caballero de virgo abriendo la parte superior de su ropa, al mismo tiempo algo tembloroso el hindú tocaba el firme cuerpo del lemuriano que se destensaba bajo sus manos, sus labios se juntaban para guardar sus lenguas que se abrazaban y entremezclaban.

 

Los ojos de Shaka permanecían cerrados ahora mientras las esmeraldas de Mu recorrían su rostro como queriendo saber que deseaba aunque su cuerpo lo dejaba claro.

 

—Quiero que me dejes descubrirte e incluso que me descubras, Shaka.

 

Los torsos desnudos se rozaban sintiendo el calor del otro ,sus corazones latían con fuerza mezclando sus melodías; tack Tack...tack Tack...el corazón de shaka...tack,tack....tack,tack,el corazón de Mu .

 

Sus manos rozaban el pecho del rubio que era suave ,subía y bajaba mientras la mano del lemuriano lo acompañaba. Shaka besaba la mejilla rosada del caballero de aries, respirando en su rostro moviendo los cabellos lilas levemente.

 

El hindú acariciaba los abdominales del guerrero de jamir haciéndolo jadear por el contacto .

 

El lemuriano pensaba en cuan deseable era de repente el hindú y el caballero de virgo pensaba en como no había sentido esto antes .

 

El ariano volvió a mirar al santo de virgo que había abierto sus ojos nuevamente posándolos en él, extrañamente permitía que los viera,por alguna razón .

 

—¿Por qué no puedo apartarme de ti?— repetía Mu en las pieles del virginiano mientras se perdía en la mirada de Shaka que lo invitaba a explorar su parte más humana.

 

Se sonrojaron más al sentir como su sangre fluía con fuerza por todo su cuerpo extendiendo su energía. Ahora sus cosmos eran una gran bola de energía que los protegía ,que los encerraba. El carnero sobre la virgen, la virgen sobre el carnero .

 

Pero de repente aquel que había ido subiendo a medida que sus cuerpos se encontraron se detuvo de prisa como si una pared se interpusiera entre Shaka y Mu.

 

El lemuriano fue expulsado por una energía invisible que provino del hindú sin entender porqué lo alejaba así.

 

Quedaron tendidos en ambos extremos de la casa. Con la respiración entrecortada, mu acariciaba sus labios por dónde habían estados los de Shaka hacia unos momentos y quería preguntar aunque al sentir otro cosmo llegar entendió porque lo había hecho.

 

Subieron sus ropas de nuevo aunque los cabellos del pelilila seguían alborotados.

 

—¡MU!— exclamó la voz ronca de Milo.

 

...pero ¿Cómo sabe que estoy aquí?...¿A caso .. tú? — le informó en la mente al hindú pero no hubo respuesta.

 

Miró a Shaka desde el otro lado quién había vuelto a su postura de flor de loto, cómo meditando aunque el ariano sabía que en realidad estaba pensado. Podía diferenciar eso en el virginiano.

 

...shaka de virgo...tu...haz... de nuevo ...— seguía insistente en la mente de virgo sin encontrar respuesta.

 

La punta del escorpión apareció frente a los ojos de Mu que continuaba tirado en el suelo —¿ Por qué demonios no respondes?— le dijo enfadado clavando sus ojos en él más luego observo a Shaka— oh...lo siento , creí que no había nadie Shaka.

 

El rubio no respondía, se mantenía inmóvil —Caballero de escorpio...¿Que te trae por aquí?, ¿Necesitas algo de mí ?.

 

—No..—se sonrió — si, en realidad venía por Mu pero ..veo que tienen sus propios problemas .

 

—Ningún problema — dijo apaciblemente Shaka sin mover su rostro.

 

—Solo quería ...

 

—¿Ah, no? — Milo miró a Mu con aire de superioridad .—. Es decir que,¿Sólo a mí me molestas con el paradero de pegaso?.

 

— ¿Qué te molesto dices?— unió sus tikis — sólo te hice una pregunta ,no creí que te molestará —recordó a Seika,y todo lo que llevaba ocultando le peso profundamente como si una piedra estuviera atada a él.

 

—¿No creíste , dices? —se río con fuerza Milo.—. Pues claro que me molesta, además de interrumpir con lo que hacemos no entiendo la razón por la que lo buscas ,incluso tengo que aguantarme a Shaina tratando de es..

 

—Milo...Mu..—. Shaka se levantó moviéndose hacia ellos— les agradecería , que si no tienen nada que hacer aquí peleen en otro lado de sus asuntos.

 

... Shaka...

 

—Con gusto, Shaka de virgo, después de todo no necesitamos nada de aquí ,por otro lado—el heleno lo agarró del brazo con firmeza al ariano— Mu, debemos hablar .

 

—¿De Seiya? — se levantó el ariano yendo hacia la salida de la casa de virgo casi impulsado por el escorpión .—. Gracias Shaka — dijo al aire porque el caballero de virgo ya no estaba

 

.... Continuará....

Chapter 4: Redundantemente redundante.

Chapter Text

Capítulo 3: Redundantemente redundante.

 

Estoy sentado, si, sólo sentado. Mis rodillas están opuestas entre sí como creando mí propia base, mis manos están unidas traspasando la energía de todo el universo hacia mí. Mantengo mis ojos cerrados, está vez no para juntar mí cosmo sino simplemente para que aparezca tu imagen ante ni caprichosamente. ¿Cómo es que sabes cuándo estoy pensando?.

 

"No puedes engañarme", me dijiste, aunque esa nunca fue ni intención.

 

—¿Mis sentimientos?.

 

Me pones entre la espada y la pared con esa pregunta porque nunca me había preguntado eso, Mu. Es que en mí alma no existía más que Buda, no podía imaginar otra cosa que no fuera ser el caballero de virgo pero apareciste tú y yo, no dejo de pensar en ser solo Shaka cuando te veo.

 

—¿Si podría amarte?.

 

Pero,¿Cómo te atreves a preguntarme eso, Mu? De sólo pensar en el intento de una respuesta me gira el universo. Aún así continuas apareciendo sin permiso alguno en mí mente, eres un atrevido, ¿sabes?, sin embargo lo cual, eres la primer persona que me hace frente de tal modo. Tu piel contra la mía me resultó hasta casi doloroso en aquellos roces azarosos ,en tus ojos mirándome me decían más de lo que hubiera querido escuchar, y tus suaves cabellos me llevaban a un lugar donde no había ido nunca. Allí sólo estábamos tu y yo mientras nos adueñábamos de tus latidos que se volvían míos .

 

—Mu.

 

Hasta tu nombre me resulta provocador sin Buda. Todo tú en realidad. Una vez más tu voz en mí mente me dice. ¿Será tu recuerdo o serás tú entrando por las grietas del tiempo qué me siguen hasta esta habitación dónde me escondo de Buda? Y este sería un recuerdo que no quisiera escribir en un pétalo.

 

—"¿Podrías amarme?".

 

Y yo por primera vez en mí vida temo , sé que es una palabra muy grande pero el amor lo es más presupongo.

El sol pega suavemente en la casa de virgo ,y hasta parece que tu imagen en mí mente se empapa con él.

 

—Mu, eres... amarte... ¿Podría amarte?.

 

Shaka se movió levemente hasta la armadura de la virgen, y la tocó, casi que la acaricio y se fue a si mismo como lo que no podía dejar de ser ,el caballero de virgo y recordó a Mu, curando sus heridas que no necesitaban ser curadas, como el caballero de aries.

 

—Soy el caballero de virgo, lo más sagrado del cielo al infierno, y viceversa .

 

También soy Shaka, sólo Shaka.

 

Soy el más cercano a Buda.

 

Soy virgo.

 

Soy.

 

Otra vez me pregunto pero con una voz extra corporal.

 

—¿Podría amarte?.

 

Tú eres el caballero de Aries, el primer protector del santuario, eres quien arregla las

,imagino cuánto te habrá llevado llegar a ese punto. Pero también eres Mu, debajo de todo aquello y yo solo soy Shaka. El problema es que no puedo dejar de ver el hombre que eres, no podría hacer caso omiso a lo que mí piel siente cuando la tocas...sin embargo;

 

—¿Podrías amarme?.

 

Estoy sentado, si, sólo sentado. mis rodillas están opuestas como creando mí propia base, mis manos están unidas traspasando la energía de todo el universo hacia mí. Mantengo mis ojos cerrados, está vez no para juntar mí cosmo sino simplemente para que aparezca tu imagen ante mi caprichosamente.

 

¿Cómo es que sabes cuándo estoy pensando?.

 

—"No puedes engañarme" ¿Me dijiste, o, simplemente me lo confesó tu mente?, debería saberlo pero esa nunca fue mi intención.

 

*Pequeño Shaka, pequeño Shaka, ¿Por qué te preguntas tantas cosas? En esta imagen estabas triste y sin estar triste serías sólo Shaka. Abre tus ojos pequeño Shaka*.

 

¿Mis sentimientos?.

 

Me pones entre la espada y la pared con esa simple pregunta que a la vez encierra mucho porque la realidad es nunca me había preguntado eso.

 

—¿Alguna vez me pregunté algo?.

 

En toda mi vida sólo existió Buda, y yo no pensé jamás más que en ser lo que no puedo dejar de ser; el caballero de virgo. Sin embargo cuando te veo no puedo evitar tan sólo ser Shaka, tal vez era por eso que nos preguntamos.

 

*—¿Podría amarte?*.

 

—¿Debería amarte?.

 

Aunque el universo se abra en dos continuas apareciendo sin permiso alguno en mí mente, y crees que no sé que eres tu, pero a pesar de todo sigues siendo un becerro dorado de Apis ,eres la primer, y segunda persona que me hace frente de tal modo y nunca me sentí intimidado .

 

—¿Me besaste.. .o te besé? Si lo pienso no lo sé realmente.

 

Tus palabras fueron pocas pero contundentes y tus ojos me dijeron más de lo que hubiera querido escuchar. Tu piel suave contra la mía hasta parecía arder, el aroma de tus cabellos que me llevo hacia un lugar donde jamás había ido. Un lugar que sólo te pertenece a ti, si hasta me dejaste adueñarme de algunos latidos de tu corazón y yo te entregué algunos míos un poco avergonzado.

 

—"El hombre más cercano a dios no tiene dudas ni errores", me dijiste como si fuera algo obvio ,pero aunque mí vida esté completamente destinada y con orgullo a Buda ,sigo siendo Shaka, el niño que alguna vez se preguntó porqué la vida era tan angustiante. Sobre todo cuando te veo, cuando te veo las dudas me invaden y siento que puedo cometer errores irreparables y...no quisiera lastimarte.

 

Amarte.

 

¡Amarte!.

 

¿Amarte?.

 

Podría.

 

¡Podría!.

 

¿Podría?.

 

Es una pregunta que cavila por mí alma ahora dubitativa .

 

—Tú, ¿Podrías. Amarme? ¿Podrías realmente?... Podría yo...podría...

 

Siento unas ganas irrefrenables de volver a tirarme en aquella cama y despertar, más bien que despertemos. Juntos. Las emociones y sentimientos no son lo mío, perdoname por ser un neófito en lo que se refiere a sentir. Nadie me enseñó tal cosa, todo lo demás lo conseguí con perseverancia a lo largo de mí vida. Puedo hablar de mil batallas, y ganarlas a todas aunque la que no podría lidiar tiene que ver contigo.

 

—Mu, la pregunta real es una certeza que ahora está en mí mente, ¿Cómo no podría amarte?.

 

Una vez más tu voz en mí mente me dice;

 

"¿Podrías amarme?".

 

Y ya siento el sístole que para en un momento.

 

Casi que estiro mi brazo para tocarte esta vez, y casi que te alcanzo.

 

¿ Podría amarte?.

 

Diástole.

 

......Continuará....

Chapter 5: Hablar.

Chapter Text

Capítulo 4:Hablar.

 

Mu de aries debía volver a Jamir para arreglar su propia armadura y algunas más ,aunque pospuso el momento ya que uno más temido había llegado: hablar con Shaka.

 

...Hablar...

 

Conllevaba tantas cosas luego de la charla con Milo que casi le da un vuelco al estómago de los abrumadores pensamientos que lo abordaban uno sobre otro al divisar aquel encuentro . De repente su estómago se achico, la garganta se le secó haciéndolo toser con fuerza. Buscó agua para poder quitarse ese nudo sin embargo no pudo evitar devolver una flema transparente de su glotis. El aire se le había cortado por un breve momento cuando carraspeo cerrando el agua.

 

—¿Desde cuándo dudo tanto de todo lo que pienso? — se preguntó con un escalofrío en su piel.

 

Se preparó un té para sacar la sensación de picor en su garganta , y podía escucharse él mismo en su mente girar sobre el mismo asunto una y otra vez.

 

—Tienes que decirle a Shaka lo de Seika, pero toda la verdad.

 

Yo soy el caballero de aries, el protector de la primer casa del santuario y también soy Mu.

 

Aries y Mu comparten la tranquilidad y controlan los impulsos.

 

Sin embargo Shaka al pensar en tí; me queman aquellas acciones que mi cuerpo desea, te desea a ti y con mucha pasión. Es ahí cuando soy el fuego de las cenizas de aquel que revive de ellas.

 

Mi cuerpo ha sucumbido a los deseos carnales sin embargo crei que la desaparición de Seika fue un castigo de los Dioses por haber sido tan débil, es por ello, que sin miedo afirme jamás volver a hacerlo. Diría mil veces que no antes de doblegarme pero contigo....sería capaz de encender todos los demonios del infierno por un roce de tus labios.

 

DUDO. Dudo de todo lo que hice al ver esos ojos que miran hasta lo más profundo de mi ser, y tu, me miras sabiendo todo lo que ocasionas en mi. Te sonríes como feliz de ser el causante de las reacciones de mi cuerpo ante tu presencia.

 

—¿Los dioses pueden sentir?— me pregunta un Mu lejano al que soy hoy en día, aquel que encerré tras un muro de cristal en el fondo de mi alma sin embargo aún puedo observarlo a través de él. Me mira ansioso , y curioso.

 

No sé, por primera vez en mi vida no sé bien que contestarle. Sólo me salió algo que escuché alguna vez en el santuario.

 

Las relaciones sentimentales, pueden ser un problema: dudas y contradicciones que un caballero no puede permitirse. Y de hecho al probar mi primer intento de relación descubrí que aquello no dista tanto de la realidad.

 

Aunque probablemente no escogí el mejor ejemplo, no quisiera que mis malas decisiones dañen mi honor como caballero de aries.

 

Te veo aquí aunque no estás conmigo pensando que jamás te has ido en realidad y aries me regala una vibración en mi piel al verte Shaka.

 

El agua hirvió despertándolo de su ensoñación . Se tomó el pecho del sobre salto mientras el caballero de Virgo desaparecía en la lejanía

 

—¿ Qué es lo qué me está pasando? — soltó como si alguien invisible fuera a contestarle, achico sus tikis y se miró a si mismo en el reflejo del té que acababa de hacer.

 

Sus ojos esmeralda se clavaron en el otro Mu con ojos color canela que le hizo sentir una mezcla de dolor y ternura .

 

Aries brillaba con todo su esplendor dorado dentro de su corazón hirviendo su alma rebosante de sentimientos

 

—¿Qué te sucede, Mu?,¿Qué es lo que.... qué ... qué es lo que te aqueja así?— las lágrimas se acumularon en sus ojos pero no cayeron .

 

— Seika.

 

Sus cuerpos enredados en las sábanas de la casa que perteneció a la hermana de Seiya por unos días aparecieron ante él. El lugar donde debía protegerla pero terminó por entregarse a ella, en parte por culpa de esa distracción había olvidado su primer misión que era cuidarla.

 

Su corazón estaba enredado en melancolía, una angustia recorría su pecho aprisionándolo pero el suspiró había ocupado el espacio de un grito ahogado.

 

—Seika....escapó— le decía la caballero del águila— volvemos a cero— le había dicho con claras lágrimas que ocultaba su máscara.

 

Se odió él mismo por ser un completo imbécil.

 

Evidentemente necesitaba descargar esa ansiedad qué lo consumía, porqué en cierto punto se sentía sucio por un simple acto que aunque en el momento se había sentido correcto luego de los acontecimientos había descubierto que quizás se había apresurado. Y en parte lo advirtió solo que tarde .

 

Aquel recuerdo borroso se evaporaba y de nuevo el hindú invadía su mente.

 

Su blanca piel rozando la suya haciéndole hervir la sangre, sus labios apresurados por apoyarse en los suyos y sus latidos acompañados por los de virgo.

 

—¿Será qué mí corazón está queriendo decirme algo?— se preguntaba con el vapor golpeando sus labios al tiempo que el corazón se le aceleraba al recordar.

Y me encuentro dudando una vez más . Por alguna razón dudo de mi mismo,no como caballero sino como hombre. Por primera vez Mu sobrepasó a Aries.

 

El lemuriano tomó la taza con el té y miro la caja de la armadura de Aries con ternura,ella de alguna manera lo reconfortaba. Sentía su calor invadiendo su cuerpo como si fueran uno para consolarlo.

 

—Lo siento si te hago daño de algún modo...Aries no quisiera...— la miraba con sus tikis unidos y sus esmeraldas viendo borroso.

 

Se sentó en la mesa porque de repente su cuerpo pesaba demasiado aunque estuviera con sus ropas de telas livianas.

 

Mu había podido sacar esos sentimientos encontrados por mentirle a Milo e incluve sus dudas se disciparon al encontrarse con Marin para hablar de la muchacha ,sabía que no había sido su culpa. Seika tenía sus propios sentimientos y había sido su desición irse aunque a él le hubiera gustado estar en otra posición con respecto a la situación todo había derivado a la nada de nuevo. Seika sin Seiya,Seiya sin Seika pero Mu... él podía ahora ser el de siempre,sin esas contradicciones de por medio.

 

Juntó sus manos en la mesa y apoyo su frente cerrando los ojos con fuerza.

 

Apareció como si nada la imagen de Shaka. Respiro profundamente y miro por encima de su antebrazo.

 

—Sha..ka—dijo haciendo énfasis en cada sílaba.

 

...Una vez más puedo verte ante mi caballero de virgo...

 

Sus grandes pestañas cubrían aquellos zafiros azules que guardaba celosamente entre sus párpados,aunque le había regalado un momento de ellos que pareció eterno .

 

—¿Por qué no puedo dejar de pensar en ti ,Shaka ?,ni aunque mí corazón este angustiado dejas de aparecerte, será que en realidad en cierto punto quiero que sólo tú lo consueles?.

 

Pero porqué siento que con Seika cometí un error, sin embargo contigo siento todo lo contrario? Es que cuando quiero correr descubro que mi meta eres tú.

 

—¿Que puedo hacer , Shaka? Con esta angustia qué invade mí mente ,¿Con este sentimiento que me quema la piel y hace hervir la sangre? dime, tú eres el hombre más cercano a Dios, tú,comprendes más que cualquier caballero,¿Tendrías mí respuesta? Porqué siento que TÚ eres la calma a mí apenada alma.

 

—¿Podría yo ?...no —se entristeció tomando el té —¿ Podrías abrazarme de nuevo ? Es que cuando lo hiciste al estar en tus brazos sentir tu corazón ,pude conectar el mío apasiguar esto que me acoje ... sólo tú pudiste .

 

—En realidad siempre fuiste sólo tú.

 

—Shaka , sé con certeza qué eres la respuesta a todas mis preguntas.

 

Acalló sus pensamientos pues de nuevo pensaba en el pelirubio,si lo conocía hacía tanto,¿Por qué ahora? ,¿Por qué sólo lo necesitaba a él incluso cuando dudaba de sí mismo?.

 

La imagen del hindú apoyando sus labios en los suyos volvió a su mente,y se los rozó inconscientemente.

 

—Si pudiera decirte que aquello no fue un simple capricho,si pudiera explicarte todo lo que pasó y cuan diferente es contigo,decirte que Mu,y el caballero de Aries te pertenecen por completo aunque no entiendo cómo no fui capaz de decírtelo antes.

 

—Shaka tú,¿Serás consciente de eso?....¿de lo que provocas en mí?...

 

¿Podrás perdonar...?.

 

No.

 

¿Podrás entender mi pasado?.

 

¿Sabrás qué eres mi presente?.

 

Es qué ,puede este hombre dudar de todo pero...

 

No de ti.

 

No de nosotros.

 

Shaka, no dudo que te amo.

 

¿Podrías perdonar a este alma oscurecida en las aguas del pasado?.

 

Si no puedes ...no sé qué haría realmente.

 

.....Continuará...

Chapter 6: Seika.

Chapter Text

Capítulo 5:Seika

 

El caballero de aries abrió los ojos cuando un rayo de luz pegó en una de sus esmeraldas, abrió y cerró los ojos con fuerza para descubrir una madera debajo de su mejilla. Se había quedado dormido en la mesa de la cocina y aún restaba un poco de té viejo en la taza. Suspiró con pesadez. No era normal que se durmiera en cualquier lado sin embargo seguramente sus pensamientos lo habían dejado allí, se levantó para ir al baño y lavarse la cara con agua fresca.

 

De nuevo volvían aquellos ojos azules en el espejo reemplazando los suyos, se formó sobre su propia carne en su reflejo la persona responsable de su falta de sueño y cambio de personalidad : Shaka.

 

Arrugó sus tikis recordando la charla y semi combate que habia tenido recientemente con Milo.

 

—Tienes que decírselo — se decía ahora a sí mismo para recordarse que Shaka no sabía nada de Seika. Bueno, a este punto solo sabría aquello que le había confesado al escorpiano pero había algo más. Algo que le carcomía la mente ; él había llegado a cierta intimidad con la hermana de Seiya,y dadas las sensaciones que el hindú provocaba en él debía hablar antes que se sintiera un completo traídor.

 

—Si no hago esto tendrás razón en llamarme traidor, Milo de escorpio— se mordió el labio inferior al recordar su encuentro con el escorpión.

 

Tampoco sabía cómo se sentía el virginiano para con él. Hasta creyó por un momento que aquel beso que se dieron había sido su imaginación por el deseo irrefrenable que sentía cuando lo veía. Pero no,no podía haber sido su mente jugando con su corazón. El recuerdo de su piel suave sobre la suya y sus labios humedecidos por su lengua le hacían erizar lugares que no creía que existían en su cuerpo.

 

Tal vez lo había sorprendido,un beso robado sabe mejor que uno pedido ,pensó, ya qué nunca había preguntado si podía hacerlo. Prácticamente llevó todo a esa situación aunque el santo de la virgen no se había negado, tampoco era típico del rubio aceptar algo porque sí. Conocía muy bien como era su personalidad: dura e increbrantable. Nadie podía perforar su coraza y por alguna razón la abrió para él.

 

Sin embargo se sentía sucio,no por aquellos roces anhelados sino por lo que escondía,y ese secreto empezaba a pesar demasiado en sus hombros al menos cuando pensaba en Shaka. Tenía,debía y sentía que con él había un pacto de sinceridad implícito. Su corazón no podía ser libre si no le decía lo que le pasaba menos si se enteraba por otros,los demás ya no le importaban tanto pero Shaka por otra parte....prefería que se enterara de sus propios labios aunque esa sinceridad le doliera al contarla.

 

Caminó por su casa,hasta la de virgo,aquel camino le pareció extremadamente largo y pesado.

 

La casa de virgo le pareció muy grande aunque en realidad era que él mismo se sentía pequeño en su propio cuerpo, su corazón se aceleró ,sus mejillas se cubrieron de color rojo y la piel quería escaparsele en pequeños toques eléctricos. Enfrentarse a Shaka no era tan fácil,en una batalla se hubiese sentido más cómodo que en la charla que debía abordar.

 

—Hola...buenos días—aclaró su garganta —tardes— se corrigió sonrojandose más —Necesito hablar contigo , Shaka ,¿puedo?— dijo ingresando al templo de virgo.

 

Shaka estaba sentado en la posición habitual de la meditación ,la flor de loto. No llevaba su armadura, e instantáneamente Mu observo su cuerpo para darse cuenta que tampoco la portaba. Probablemente entre todo lo que estaba pensando no calculo bien que iba a venir en este momento después de todo ya debería estar en Jamir a estas horas. El hindú no abrió sus ojos,y por un momento el lemuriano se creyó inoportuno .

 

—Shaka....— dijo más fuerte de lo que hubiera deseado escuchando su propio eco aunque probablemente su cosmo vibrante ya había avisado su llegada.

 

El Virginiano asintió con la cabeza y apoyo sus manos a un lado aunque sin cambiar la posición ,en el fondo sabía porque el ariano estaba allí, no solo por la invitación que le había llegado recientemente sino porque supuso los últimos acontecimientos lo tenían como a él. Y a pesar que antes había pasado el caballero de leo para contarle algunos sucesos entre la caballero del águila,la cobra,Seika, Seiya, y el propio Aioria.

 

El hindú había dedicado a expandir su Khaan por el santuario y ya estaba enterado de los cambios de cosmos alrededor,incluso Athena se había encargado personalmente de contarle ciertas cosas ya que había tomado una confianza especial con él desde la última vez que hablaron.

 

Pero las acciones del ariano le indicaban que algo le incomodaba.

 

Por empezar apenas había entrado se quedó parado observandolo para luego hablar tímidamente cuando nunca lo había hecho, al contrario él siempre le hablaba con seguridad ,lo segundo que noto fue su brazo apretando al otro nerviosamente como abrazándose señal que estaba contrariado por algo y lo tercero sus mejillas coloradas y mirada esquiva le hacían saber que tenía que ver con él.

 

—Sabes que si...Mu— le dijo seriamente.

 

El guerrero de jamir ya no dudaba,más bien quería aclarar todo de una vez pero cuando vio que el hindú abrió sus ojos por un segundo ,su corazón se apretó al pensar en lo que estaba por decir,auque al momento sus pestañas volvían a cubrir sus párpados. ¿Lo habría imaginado? No importaba porque algo más le sucedía ,una electricidad paso por su cuerpo erizado,y podía catalogar esa sensación con exactitud:miedo....¿miedo? Mu tenía miedo si, pero de perderlo aunque en realidad no podía perder algo qué no era suyo.

 

—Shaka —el ariano trago saliva ruidosamente a medida que se acercaba al hindú— quiero decirte ,confesarte más bien ,algo qué ...

 

El rubio no contestó así que el ariano prosiguió aunque sus tikis se unieron y tuvo que contener unas lágrimas que aparecieron en sus ojos.

 

Shaka sintió un nudo en el corazón y contuvo unas ganas irrefrenables de rodearlo con sus brazos contra si mismo.

 

—¿Son lágrimas contenidas lo que está en los ojos de Mu? ,¿Por qué razón ? ,¿Qué hace poner así de triste a mi dulce Mu?, ¿Dije dulce y mí? Bueno, si, dulce eres...—pensó conteniendo una sonrisa.

 

—Es algo sobre mí, cómo hombre —agregó— no cómo caballero...y no sé si te va a gustar —dijo por lo bajo.

 

Shaka permanecía callado aunque el caballero de aries sabía que lo estaba escuchando, esa posición apoyando su cuerpo al cielo denotaba que estaba pensando , nuevamente ,pensaría en que?,imposible saberlo o imaginar en qué podía divagar está vez sus ideas se entren mezclaban demasiado.

 

—Quisiera saber qué ronda por tu mente...— pensó el ariano para si mismo con miedo a qué el rubio oyera sus propios pensamientos.

—Shaka , supongo sabrás — unió sus falanges acariciandolos— de la reunión qué se avecina y porqué— dejó sus labios semi abiertos para seguir su idea.

 

—Claro . Sé que Athena le prometió a pegaso encontrar a su hermana—afirmó el rubio— también que,Marin de águila ,Aioria y tú la protegían aquí en el santuario.

 

Las palabras de Shaka parecían un puñal en el pecho del ariano aunque era más por lo que había sucedido que por lo dicho.—. Y desapareció —se apenó.

 

—Si el destino lo quiere así Mu. No tienes porqué — iba a decir entristecerte pero cambio la palabra al momento de intentar decirla aunque tardó más de lo necesario en reemplazarla— preocuparte. Después de todo tanto Aioria como tu cumplían con su deber.

 

—Si— contestó seco sin poder continuar con lo que realmente importaba confesarle.

 

Shaka sintió el cosmo del ariano vibrar haciéndole llamar a atención. Pero,¿ a qué se debía tanto escándalo? Por algo que ya sabía de ante mano .

 

—Me acosté con Seika — soltó de una manera que sonó más brusca de lo que se imaginaba.

 

—No es así como lo pensé decir —se dijo en su mente .—. Y siento qué en cierto punto estoy traicionando a Athena.

...y a ti...a ti te traiciono ,y si lo hago me traicionó a mismo..— quiso agregar pero no le salió.

 

Shaka se sonrió ,aunque no esperaba una confesión así ,en parte la sinceridad del lemuriano le lleno de calidez el corazón ,— Mu...—su nombre en sus labios sonaban distintos a otros pero a la vez le parecía tan neutro que se sonrojó del enojo.

 

.... Continuará....

Chapter 7: Soy lo que necesites que sea.

Chapter Text

Capítulo 6:Soy lo qué necesites que sea.

 

— Somos santos ,aunque también somos humanos . Tenemos una parte que puede llegar a tener otros sentimientos, ¿Sabes?—ladeó su rostro el hindú— cuando te dije que yo podría tener dudas cómo cualquiera en parte quise decirte eso, aunque mí vida fue diferente también tengo momentos que aplacan mí alma aunque jamás dude de Athena ni de mi devoción a ella.

 

Mu tragó saliva, los párpados de shaka estaban cerrados, su piel blanca reflejaba en la luna y sus manos ahora estaban en sus piernas descansando ajenas a el momento que acontecía.

 

—¿Crees qué nosotros no podemos tener o pensar en algo más qué esto?— preguntó el ariano intentando entrar en la mente del virginiano —¿ Crees que sólo estamos destinados a pelear?.

 

—Yo jamás dudé de ser el caballero de virgo —dijo el hindú y pensó que por primera vez en su vida el ariano lo hacía dudar pero como hombre de todo aquello que era.—. Las estrellas marcan el destino de las personas, cómo el nuestro las constelaciones que nos empapan sin embargo también hay quienes aventuran a otras cosas además de pelear, formar una familia, amor....— suspiró — pero mí vida no fue regida por lo último.

 

—¿Crees qué no podemos sentir algo por el otro e incluso acostarnos con alguien Shaka? —lo miró con sus tikis unidos extrañado, más bien se sentía un poco juzgado por las palabras del rubio.

 

—Creo que si podemos — dijo al fin — quizás no cómo lo expresas, no sexo casual pero el acostarse con alguien también implica, confiar en el otro y comunicarse. Ser dos cuerpos en uno.

 

—¿No estaría mal entonces qué como caballero tengamos esos sentimientos carnales?— lo miró tratando de inspeccionar aquello que callaba encontrándose con un muro que él no había creado.

 

—Todos tenemos necesidades caballero de aries —dijo serio— incluso podría alguien como yo, sólo que como te dije nunca tuve tal opción como viable.

Con amor no tendría nada de malo, Shaka. Te sorprenderías cuántos caballeros han amado y formado su familia— lo miró y luego apartó la mirada con un leve rubor en la mejilla— tú...¿Nunca has deseado acostarte con alguien?.

 

—Ignoro la cantidad pero sé qué existen, aunque el amor es más egoísta que sólo tener sexo por diversión por lo que estoy deduciendo. De todos modos sé lo que significa el placer Mu. Podría tener sexo si es lo que quieres preguntarme —se sonrojó porque nunca había hablado de eso con nadie, de hecho ni siquiera con él mismo.

 

—El amor no es egoísta —se aclaró la garganta porque no quiso profundizar más sobre las relaciones carnales junto a Shaka ya que lo hacía poner ansioso.

 

—Si, lo es Mu— dijo serio.

 

—¿Cómo puede serlo?—le sonrió sin ganas.

 

—Cuando hay amor... sólo quierés que aquel que amas esté bien, independientemente del sexo, claro, hay muchos tipos de amor. Pero solo importa esa persona, el resto no existe y eso no se lo puede permitir un caballero de Athena.

 

—Entonces te contradices —intentó mirarlo a los ojos pero apartó la mirada nuevamente porque imágenes non santas pasaban por su mente,y lo incluía a ellos dos.

 

—No me contradigo, parejas hay entre caballeros pero no es tan simple porque debes cuidar a tu familia pero también tienen que tener en claro quienes son...que hacen... nuestra absoluta devoción a Athena puede no ser comprendida por todos .

 

—No entiendo shaka —hizo un mohín algo triste porque de repente estaba confundido.

 

—Claro. Tienes un futuro con esa persona que entiende tu deber con athena, ¿Comprendes ? El amor si es de verdad puede llegar a ser igual que tu fé.

 

—Entiendo— el proveniente de Jamir trato de asimilar aquellas palabras que estaba escuchando—¿Entonces tú podrías sentir amor Shaka?.

 

Esquivó la pregunta porque imaginó que estaba hablando de Seika y, qué aquel beso que tuvieron sólo había sido un error por un segundo de distracción — supongo— se encogió de hombros ,de repente se sentía un poco tonto—no imagine tener una pareja Mu . Te lo dije, soy el caballero de virgo, y nunca pensé en nada más que eso.

 

—Los caballeros somos personas también.

 

—Cierto pero no todos están dispuestos a amar y eso los lleva a equivocarse.

 

—Entonces no podrías...—el caballero de aries cortó sus propias palabras, porque creyó imprudente después de a charla decirle lo que sentía, qué aquello que sentía por él era aún más fuerte que su propia fé .—. Parece qué últimamente me equivoco mucho — suspiró.

 

—A veces no dejamos de equivocarnos —dijo el hindú esquivo más que nada como si tuviera una charla con él mismo.

 

El guerrero de Jamir tomó aquello como una afirmación que aquel beso que tuvieron fue solo eso y aunque lo entristeció comprendió que así debía ser.

 

...Quiero abrazarte Shaka....— deseó el guerrero de Jamir que lo envolviera con su cálida piel.

 

—¿Y cuáles son los sentimientos tuyos shaka de virgo?— dijo con la voz temblando.

 

El virginiano no movió su rostro pero evadió la pregunta.—. Lo que me cuentas de Seika no es algo anormal, el placer forma parte de la experiencia humana por ello no podemos negarlo— se sonrió .—. Me parece más bien que tienes todo claro y sólo necesitabas escucharte en voz alta Mu. No veo algo más que pueda decirte. Al menos no más de lo que ya sabes.

 

....pues no digas nada, tómame en tus brazos de nuevo, es lo único qué quiero ...

 

—Ire a hacer mí trabajo a Jamir, Shaka— le sonrió ampliamente porque si no lo hacía probablemente se iba a sentir más tonto de lo que ya se sentía por no atreverse a decirle todo lo que tenía en la garganta.

 

Bajó su rostro ocultando sus pesares . Debía decirle lo qué sentía pero era un riesgo, una incógnita que no estaba preparado para afrontar,a menos por hoy . Subió la mirada nuevamente sólo para encontrarse con el rostro de Shaka,besó su mejilla ruidosamente y sonrió— gracias ...Shaka— susurró dandole escalofrios al hindú.

 

—Gracias....gracias por existir en realidad ...—pensó el ariano a la par que se marchaba de la casa de virgo.

 

Shaka no poda creer que lo estuviera dejando ir . Sin embargo aunque quería moverse su cuerpo permanecía inmóvil como si estuviera pegado al suelo de la casa de la virgen. El aroma del ariano invadia sus fosas nasales,las ganas de abrazarlo ,de tocarlo,de decirle que no se fuera se agolpaban adentro suyo pero sintió que aquello que habia sucedido era solo un desliz. Un momento ,y Shaka era su amigo, su amigo de verdad y no iba a fallarle a su amigo. Así que fue lo que necesito Mu que fuera, su confidente.

 

... Continuará....

Chapter 8: Jamir.

Chapter Text

Capítulo 7: Jamir .

 

Jamir es un lugar dónde combates diariamente por vivir pero para Mu era conocido , ya que provenía de ese lugar así que no era extraño que anduviera en esos lares, sin embargo cualquier otra persona tal vez no se atrevería a ir.

 

Pero Shaka no era cualquier persona, es por ello que el rubio se había dirigido allí al saber que el ariano se encontraba en las montañas.

 

La niebla comenzó a cubrir los pasos del caballero dorado, y entre esta unos esqueletos que yacían en el suelo, huesos mas bien, se levantaron delante del virginiano, observo sus armaduras dañadas que parecían un poco gruñir al semi armarse ante el caballero dorado de virgo, estos cadáveres andantes intentaron añadirlo, en vano claro porque no le sugirió mayor esfuerzo atravesar aquel cementerio, quizás para otros podía ser un problema pero aún din su armadura pasó con facilidad al otro lado.

 

Esquivó cada golpe y "carne putrida " que se interponia ante el dandole su interminable descanso que volvería a ser interrumpido por el próximo caballero.

 

Al momento ninguno estaba en pie y al fin el camino al lugar donde se encontraba el caballero de aries se abría paso.

 

—El Palacio de Mu....— pensaba el hindú al ver la Torre de seis pisos que se erguía ante él .—. Así que aquí es dónde repara las

...— se quedó observando aquella imponente pero simple estructura sobre la punta de una montaña.

 

Quizás no debía estar ahí, no, en realidad su lugar era el templo de la Virgen pero dados los últimos acontecimientos le pareció preciso venir, no sabía bien porque y aunque Shaka no era una persona de impulsos se había atrevido a llegar hasta aquí.

 

—Mu...—suspiró mientras una brisa movía sus cabellos librement— qué cosas hago por ti— se sonrió.

 

Un niño pequeño con cabellos rojizos y alborotados, lo observaba a la distancia. Sus tikis estaban unidos haciéndolos casi uno y aunque su cosmo era pequeño pudo notar la fuerza que poseía en su interior.

 

Shaka sintió como se elevaban pequeñas rocas a su alrededor intentando tocarlo inútilmente.—. Telequinesis....— se sonrió hacia aquel niño.—. Disculpa, no me presenté. Soy Shaka de virgo , vengo para encontrarme con Mu de aries, pero veo que no eres él, así que tú...¿Serias? — sus pestañas negras cubrían sus párpados en una expresión de tranquilidad.

 

—Yo...soy Kiki, alumno de Mu de aries — se sonrió orgulloso de eso, al parecer ser el alumno del ariano le producía tales sentimientos.

 

El hindú por poco se sonrió aunque evitó aquello para parecer más serio ante el niño— ya veo, bien, necesito hablar con tu maestro por favor, si pudieras....

 

Mu estaba reparando unas armaduras cuando shaka había aparecido— ...¿qué es ese cosmo que siento?...

 

El lemuriano puso sus herramientas ordenadas adecuadamente cada una en su lugar.

 

...¿Será que eres tú... Shaka?....

 

En la puerta vió algo que no creyó ver allí ,una sombra aunque lo reconocía—....eres tú— dijo para si mismo saliendo a su encuentro.

 

—Shaka de virgo...— el lemuriano atravesaba el camino que los distanciaba, dos mechones lilas atravesaban su frente y sus ojos esmeralda parecían serenos—¿A qué se debe el honor de tu presencia ante mí ?.

 

Era llamativo verlo con las ropas típicas del lugar, ya que el hindú estaba acostumbrado a verlo con la armadura de aries,sus cabellos estaban levemente desacomodados unidos en forma de coleta improvisada, el tampoco la llevaba aunque ni se había dado cuenta que había venido con sus ropas hindús,sin embargo era mejor ya que de ese modo parecía más bien un encuentro entre amigos mas que entre dos caballeros de Athena. El virginiano no pudo evitar sonreír de lado.

 

—¿Aquí es dónde te escondes , caballero de Aries? —los ojos de Shaka permanecían cerrados aunque su flequillo estaba un poco abierto dejando ver su bindi en medio.

 

—¿Esconderme, dices?— se sonrió— no, aquí es donde hago mi trabajo, aunque supongo lo sabes— ladeó su rostro dandole un bolso a Kiki—¿Crees poder traerlo todo para hoy?.

 

—Si, maestro Mu...—se río con todos los dientes — ¿Necesita algo mas de mi? —dijo distraído poniendo ambas palmas sosteniendo su nuca aunque la pregunta era más bien por la visita.

 

—No, está bien , conozco al caballero de virgo y creo saber porque está aquí. No te preocupes— acarició su cabeza desacomodando sus rojos cabellos un poco— vete, qué luego debemos seguir con el entrenamiento.

 

La sonrisa del ariano le daba paz a su discípulo mientras que Shaka trataba de no envolverse en los sentimientos contrariado que la misma le provocaban, aunque ya estaba allí en ese momento dudo un poco de su propio raciocinio.

 

—Tal vez no debería haber venido, creo que por está vez no he estado muy inteligente— pensó Shaka.

 

—Pero...—el cosmo del niño se había arremolinado ya qué recordaba que el santo de virgo había estado en desacuerdo con su maestro en un pasado pero lo apaciguo, si bien al principio no sabía quién era aquel nombre le daba un poco de miedo .

 

—Kiki...—lo miró seriamente el guerrero de Hamir— como te dije, vete a buscar lo que te pedí. Shaka es un viejo amigo. Nuestros problemas iniciales no lo son en este momento. Hazme caso —se paró un poco mas cerca del hindú observandolo —¿Verdad Shaka?.

 

—No hubiera permitido que escaparas si así fuera — se sonrió algo soberbio.

 

—Recuerdo haberte ayudado cuando lo pediste, así que si hubiera diferencias supongo eso saldaria las deudas— frunció sus tikis.

 

Por un momento las esmeraldas del ariano se enfrentaron a los párpados del hindú, parecían observarse con seriedad aunque al momento ambos se relajaron encendiendo sus cosmos con fervor .

 

...... Continuará.....

Chapter 9: No se puede evitar.

Chapter Text

Capítulo 8:No se puede evitar.

 

Ambos cosmos se enfrentaban aunque amistosamente pero Kiki pudo sentir el choque fuerte entre ambos empujandolo. El pequeño tomo el bolso, apoyo sus manos detrás de su cabeza y se marchó.

 

—Tu alumno se preocupa por ti —soltó el rubio.

 

El lemuriano se encogió de hombros — soy lo único que tiene, casi que lo crié. Los sentimientos son mutuos aunque le falta aprender es una persona muy fuerte.

 

—Puedo notar la nobleza en su cosmo, de hecho estás haciendo un buen trabajo al parecer— dijo distraido rozando su rosario.

 

—Eso espero aunque el que más aprende de él soy yo...Shaka — lo miró serio— recuerda, él será alguien muy importante en un futuro.

 

—Confiaré en ti , aunque , dadas las circunstancias no sé si lo llegaré a ver— el hindú camino un poco hacia delante.

 

—¿Que dices Shaka?— unió sus tikis preocupado —¿Sucede algo? Has venido porque ...

 

—No...—se sonrió el virginiano— está todo bien, sólo digo, somos caballeros de Athena y nuestra vida depende del destino así que no sabemos que puede pasarnos.

 

—¿Shaka de virgo pesimista? —se sorprendió el guerrero de Jamir—¿Desde cuándo?.

 

—No—se sonrió el hindú— creo que tú entiendes mejor que nadie que nuestras vidas no están atadas a lo terrenal, siempre estamos un paso adelante de lo invisible pero sin embargo mientras estamos aquí luchamos , ¿no es cierto?—movió su cabeza hacia el ariano.
—Cierto, la muerte está tan segura de su victoria que tenemos toda la vida de ventaja aunque con la determinación y poder que tenemos seguramente podemos hacer cualquier milagro— el lemuriano acarició sus brazos distraido.

 

—La verdad del universo Mu, es que nada es seguro, comparado a todo lo que sucede en el infinito la vida humana es sólo un parpadeo.

 

Mu cerró sus ojos —¿ Sabes? Aunque me gusta la charla que tenemos, me gustaría saber ...¿Has venido a hablar de la vida y la muerte conmigo Shaka de virgo?.

 

Shaka se sonrió —¿Intentaste hacer un chiste Mu o lo dices enserio?.

 

—Lo digo enserio — acarició sus brazos dónde se encontraban unas vendas para luego ponerlos uno sobre el otro.

 

El rubio tocaba las cuencas de su rosario una por una mientras el Santo de aries lo observaba con detenimiento — ¿Sabes Mu? Desde que te vi siempre me pregunté porqué estabas tan determinado en conocerme.

 

Los ojos del ariano se abrieron sorprendido—¿ Determinado dices?.

 

—Si, desde que era pequeño estoy acostumbrado a la soledad. Siempre fue así, y no es algo de lo que me queje. De hecho no necesitaba mas que la meditación y Buda para entender el mundo que me rodeaba, pero tú— se acercó un poco hacia el ariano-... tú ...quisiste siempre algo más de mi.

 

Las mejillas del ariano se ruborizaron— al principio me costó mucho hablarte sinceramente— se sonrió recordando cuando eran pequeños— no es algo que suela sucederme pero tenías.. .bueno tienes algo que no me permite del todo pensar bien.

 

Shaka hizo una mueca.

 

— Sin embargo si, quise conocerte aunque no me permitas nunca entrar del todo en tu ...mente — el lemuriano dudó en la elección de sus palabras.

 

—No es eso...—tragó saliva— de hecho eres el único al que le permito realmente ver mi mente, si quisieras podrías ...—dió un paso adelante hacía él pero se arrepintió volviendo hacia atrás — no, no quisiera qué veas mis pensamientos sobre ti.

 

—¿Por qué no?— preguntó con intriga.

 

—Porque no sería algo bueno, tengo pensamientos no muy correctos contigo Mu.

 

—¿Y te asusta eso?.

 

—Un poco— se sincero el hindú — es qué no entiendo en realidad —lo miró a los ojos pero sin abrirlos—¿Qué me sucede contigo Mu ...?.

 

El Santo de aries se sonrojó ,aunque tomó el valor para hablar —¿No te diste cuenta que siempre me llamaste la atención de una manera particular?. Al inicio no podía dejar de pensar en ti.

 

El hindú se sonrojo y apartó el rostro—¿Qué estás diciendo Mu? —sus labios se volvieron casi un guión.

 

El lemuriano tomo las manos del rubio — qué me cansé de ocultar esto que siento , ¿A caso tú no...?.

 

Shaka enseguida se soltó del ariano y avanzó hacia la torre— dime, este lugar, ¿Es dónde reparas las

, verdad ?— trató de disimular lo qué sentía en esos momentos.

 

—Si pero...no sólo las reparo, también tengo una conexión con ellas. Piénsalo de este modo,ellas tienen sentimientos y cuando están tristes busco la forma de apaciguarlas. Las ayudo y ellas confían en mí para eso.

 

De repente un sentimiento de enojo pasó por el ariano, y sin comprender mucho contrajo todo su poder en su mano . Shaka estaba rígido los ojos esmeraldas enfrentando sus párpados cubiertos por sus largas pestañas, sonrió al ver pasar un golpe que golpeó la pared a su lado tan fuerte que hizo un agujero.

 

—No voy a dejar de hablar de lo que siento por ti y tú me dirás al fin lo que te sucede conmigo — los labios de Shaka estaban tan cerca qué no podía dejar de mirarlos ni aunque se esforzara, respiró sobre el rostro del rubio moviendo levemente su flequillo— y no voy a dejar que te escapes así tenga que luchar contigo. ¿Oiste Shaka de virgo? Me vas a escuchar y luego si quieres puedes irte o no hablarme nunca más pero yo....no puedo estar así.

 

Shaka lo vió por primera vez serio entendiendo que con esa fuerza ejercida demostraba que era un guerrero de Jamir, era la primera vez que veía a aries exaltado con él, aunque le gustó verlo así y un poco se ruborizó al estar tan cerca de los labios del lemuriano, sentir su respiración chocando con la suya le provocaba escalofrios y aunque dudó haber ido ahora si le parecía buena idea estar ahí.

 

—Tú viniste aquí y no pienso desaprovechar la oportunidad una vez mas. Tanto tiempo que pude haber hecho tanto pero no me animé y ahora...¿Ahora quieres escaparte?.

 

—¿Escaparme dices? — tragó saliva y se aclaró la garganta—¿Quién se está escapando Mu?.

 

— Tú...— apretó el puño en la pared exparciendo las rocas a su alrededor— aunque no voy a permitirlo esta vez. Que lo sepas .

 

—¿El caballero de aries quiere enfrentarme a caso?— se rió con ganas el Virginiano.

 

—No. Sólo Mu es quién está frente a ti Shaka y es sobre quienes hablaré. Tú y yo. Aunque te repito que no voy a dejarte escapar— se acercó más a él acortando la distancia de sus agitados pechos.

 

—Mu ..—por alguna razón el hindú abrió sus ojos, dejándole verlos al ariano.

Los zafios sobre las esmeraldas aunque los primeros ganaba a los segundos, la debilidad del ariano eran los ojos del hindú.

 

—Shaka...no hagas eso— le advirtió con su respiración entre coartada que bañaba el rostro de Shaka erizando su piel.

 

El virginiano sonrió, el nerviosismo del santo de aries parecia habersele pegado a él tambien como algo simbiotico y su cosmo reververo en rojos al igual que el de Mu en tonos magenta,aunque vibraban como si no fueran más que simples humanos. Lo que no dudaban como caballeros de Athena lo hacían ahora uno frente al otro.

 

—¿Qué no haga qué ? — sus iris enfrentados, sus colores mezclados, sus cosmos acariciandose cómo ellos no se animaban a hacerlo.

 

—Cuando me miras no puedo ...contenerme— sus ojos temblaban y brillaban mirando su reflejo en los ojos del virginiano.

 

—Entonces voy a seguir haciéndolo— lo miraba a los ojos porque aquella apertura al alma del ariano y viceversa le gustaba, deseaba hacerlo.

 

De repente Shaka apoyó sus labios en los suyos. Un pequeño y simple beso que permitió sentir la sangre recorriendo por ambos labios como si fluyera de uno hacia el otro.

 

La respiración de Mu estaba entre cortada— quiero esto siempre, te quiero a ti Shaka, ¿Está mal? Quiero amarte, quiero cuidarte, quiero que me abraces y me cuides, quiero oirte, quiero acompañarte, besarte, acariciarte, pensarte quiero ....te quiero a ti. ¿Entiendes? — acarició su mejilla con dulzura.

 

—No podemos Mu— se acarició la mejilla con la mano del ariano.

 

—¿Por qué?— unió sus tikis algo triste—¿ No quieres... ?— de repente se sintió demasiado expuesto ante el hindú.

 

Los labios de Shaka temblaron un poco— si ,quiero.

 

—¿Entonces?.

 

—¿Y si no fuera lo correcto?—arrugó sus rubias cejas.

 

—¿Por qué somos caballeros? ¿Por lo que te conté de Seika? —suspiró pesadamente— Sé que quizás seas demasiado...

 

—No es nada de eso— tapó sus labios con un roce de sus dedos sintiendo sus labios calientes— ¿Qué tal si esto es algo prohibido?.

 

—No me interesa, es lo que quiero y si tú quieres pagaré el precio que sea necesario cuando muera—le sonrió.

 

— O tal vez sea en está vida.

 

— Parece qué te importa más a ti que a mi —el lemuriano se alejó aunque le costó hacerlo habiéndolo tenido tan cerca— Es lógico, eres casi un Dios y yo....no quiero ensuciar esa imagen. Si sientes eso...te prometo no insistir pero por favor no me marees. Sólo dime lo qué quieres en verdad Shaka.

 

—Hay cosas que suceden sin poder evitarlas , esto ...no puedo evitar sentir esto...— lo agarró de la muñeca y lo atrajo con su otra mano de la nuca entrelazando sus cabellos.—. No , Mu. No soy ningún Dios y si así fuera no podría evitar amarte. ¿Quieres saber lo qué siento?.

 

Se miraron a los ojos aunque más bien pareció como si vieran sus corazones, las imágenes de ellos juntos pasaron por la mente de Mu casi como si Shaka le mostrará aquello.

 

—Shaka....— se sonrojó en demasía el ariano.

 

El virginiano besó vehementemente al guerrero de Jamir en los labios,sus lenguas se acariciaron entre si por unos instantes frenéticamente , acarició su pecho con ternura, pasó su boca por su clavícula para llegar a su cuello con un camino de pequeños roces de sus labios , haciendo que las respiraciones de ambos se entrecortaran a medida que sus pieles se unían.

 

—Quiero tenerte siempre así Mu—le susurró al oído amorosamente.

 

—Y yo a ti Shaka.

 

Ambas bocas se acercaron nuevamente como si fueran un imán ,sus lenguas comenzaron a acariciarse con ansias de no separarse.

 

.... Continuará....

Chapter 10: Deseo.

Notes:

Hola jóvenes caballeros aparezco para avisarles que ahora sí tenemos un lemon aunque no tan fuerte pero lemon al fin entre Shaka y Mu. Estoy emocionada jaja es que son unas de mis shipp favoritas, siempre los hago muy dulces así que no es puro sex0, en fin los dejo con el capítulo abrazo por el cosmo cibernético.

 

Seiyaaaaa (see yeah).

 

Lele.

Chapter Text

Capítulo 9:Deseo.

 

Shaka se encontraba acomodado en las piernas de Mu. Después de todo el alborto que había causado el virginiano en los presentes al llegar a Jamir necesitaban un momento de descanso. Los tés de canela descansaban a un lado esperando que los caballeros apoyen sus labios en la porcelana para beberlos.

 

Los cabellos dorados se expandían entre las piernas opuestas del lemuriano, y en parte recaían sobre el suelo ajeno a ese momento. Las manos del ariano recorrieron el rostro del hindú, grabando cada rasgo en sus yemas: poco a poco pasaron por sus mejillas que se colorearon lentamente,luego se dirigieron a su nariz dónde la yema de su pulgar dió un pequeño golpecito que arrugó el gesto del virginiano entre sonrisas. Mu le devolvió el gesto como si fuera un adolescente,descubriendo que su corazón galopaba nervioso con el contacto de su piel, ahora las tupidas pestañas recubrian los párpados cerrados del hindú sin ningún esfuerzo, cuidando aquellos zafiros que el lemuriano anhelaba.

Shaka se abstrajo por unos segundos en aquel momento entendiendo que el lemuriano era el único ser en esta tierra que lograba lo que nadie,sobrepasar la barrera que tenia con el mundo y lograr que tenga sentimientos muy profundos por él.

 

De repente Mu bajó su rostro para romper ese pequeño pensamiento y apoyó con dulzura su boca en aquellos labios que no podría dejar de besar. Sus alientos se entremezclaron y el ariano se separó solo unos milímetros para volver a los labios del hindú dirigiendo ahora su fuerza en los labios inferiores y luego a los superiores humedeciendolos levemente. Seguidamente la lengua del virginiano subió hasta ingresar en la boca del ariano uniendo sus salivas que cubrían aquellas lenguas que intentaban escapar de los labios del otro solo un segundo para volver a explorar aquella conocida cavidad que deseaban con intensidad.

Una acumulación innata de líquido salino se produjo entre sus labios, mo cual los hizo jadear y elevar su cosmo. El ariano se apartó levemente para quitarla de en medio pero este movimiento creo un hilo de baba que inevitablemente cayó en los labios del hindú formando una espesa gota en medio.

 

El lemuriano se sonrojó — lo siento — susurró a la par que acercaba sus dedos para limpiarlo aunque creyó era un desperdicio ya que se veía sumamente sensual de esa forma.

 

El hindú tomó la muñeca de peli lila con suavidad para detenerlo y absorbió el líquido acumulado sorprendiendo al lemuriano que se sonrojó —'Demasiada sensualidad junta'— pensó .

 

El santo de virgo relamió sus labios y le sonrió con picardía .—. Sabes muy bien Mu.

 

El lemuriano se rió sonrojandose hasta sus orejas

—. Teóricamente también estaría tu sabor allí — hincó sus dientes en sus labios conteniendose.

 

El rubio lo tomó de las mejillas atrayendolo hacia su rostro nuevamente.—. Bueno entonces sabemos muy bien juntos — lo besó con vehemencia,y aunque estaba al revés pudo sentir toda la extensión de la lengua del lemuriano dentro de su boca jugando con su sanidad.

 

Las manos del hindú descendieron desde su cuello hasta el pecho ahora un poco al descubierto del guerrero de jamir haciéndolo jadear en sus labios. Abrió sus ojos para descubrirse rozando su nariz sobre la barbilla del ariano, y aunque le costó continuó descendiendo por su pecho abriéndose paso con sus dedos por su ropa hasta su pecho firme.

 

A la vez sentía sobre sus pectorales las pequeñas bocanadas de aire del lemuriano sobre su piel provocándole a él mismo jadeos al sentir sus labios apoyados una y otra vez. Así creaban un camino de besos húmedos en sus cuerpos, y como si fuera una coreografía en simultáneo llegaban a sus abdominales para descubrir la suavidad en ellos,cada espacio recubierto en parte por sus labios y su lengua que de vez en cuando escapaba para sumarse a la explosión de sensaciones que los caballeros estaban experimentando.

 

El aliento de ariano en sus pieles era algo que lo hacía erizar, y encorvarse levemente para acercarse a él. Explorarlo lentamente le hacía descubrir las reacciones de ambos cuerpos al tener contacto y no hacía más que fascinarlo. Nunca había visto ni sentido una cosa igual, ni siquiera meditando.

 

Las manos del hindú se movían por si solas por la silueta del peli lila llegando hasta el sacro y luego al bajo vientre del caballero. Pasó sus falanges por entre su pantalón sintiendo la suavidad que tenía, aún más que el resto de su cuerpo hasta toparse con algunos vellos lilas sobresaliendo,se sonrojó aunque cuando toco ese espacio íntimo hizo salir un gemido ahogado de la boca del guerrero de jamir,esto le hizo gimotear y deseó volverlo a escuchar de ese modo que no había hecho antes.

 

Las manos del lemuriano hacian lo suyo en su cuerpo y él se dejaba. Las nuevas sensaciones invadian su mente,su cuerpo y lo hacian sentir extraño. Todo su cuerpo se comportaba de maneras que ni él mismo conocía, su piel temblaba cuando los dedos se escurrían en lugares donde nadie lo había tocado y ardía desde su pecho hasta sus entrañas.

 

—Shaka...—advirtió el ariano y se separó agitado con el aliento caliente.

 

El virginiano se dió la vuelta con facilidad quedando frente a él y besó nuevamente al ariano con vehemencia. Empujó su rostro con el suyo tirándolo lentamente hacia abajo. Nuevamente sus labios envolvían con pasión al lemuriano que caía en ellos acariciando con su lengua la punta y la extensión de la del hindú. El roce de sus cuerpos hizo que las tazas cayeran al suelo mojando la camisa del lemuriano.

 

— Shaka...me mojaste— dijo con voz ronca.

 

El rubio le sonrió de lado y miró las esmeraldas brillosas de Mu con fulgor. Sus manos acariciaban su cuerpo con ternura más no pasaban el límite que le marcaba el santo.

 

— Lo siento,¿Quieres qué te ayude a quítartela para que no te enfermes?— dijo de manera traviesa.

 

El proveniente de Jamir se sonrojó y mordió su labio inferior — pero si tú también estás mojado. Tendremos que quitarlas para no enfermar,no hay remedio— bromeó coqueto, una nueva expresión para sumar a las muchas que al virginiano le gustaban del lemuriano.

 

Las manos del joven pasaron lentamente por la ropa del hindú quitandola con delicadeza a la vez que él hacía lo propio con él, ahora sus pechos desnudos chocaban uno contra el otro acariciándose por las ansiedad y el deseo.

 

Mu tomó el cuello de Shaka, para volver a besar sus deliciosos labios, mientras que el otro respondía ante sus estímulos con las mejillas rojizas en señal del juego excitante que están teniendo, descubriendo en el proceso que aquel cuerpo le provocaba una exitacion inminente.

 

El lemuriano por su parte disfrutaba de las miradas llenas de pasión del hindú hacia él sacando sonidos impuros e incontrolables de sus labios. Shaka miro el rostro del ariano sorprendido,extasiado por aquella expresión lasciva gracias a sus caricias y siguió besando ahora su cuello a la par que dejaba una marca de su saliva en él.

 

—Increible— le susurraba en su cuello a la vez que sus labios se entre mezclaban con algunos cabellos lilas—¿Puedes a caso ser más tentador ?—volvió a mirarlo a los ojos y se dedicaron una sonrisa mutua,esa cargada de pasión que sólo le pertenece a los amantes . Acarició su barbilla y deposito un beso húmedo en sus labios terminando con un sonido lascivo.

 

—Te deseo tanto Shaka—el lemuriano se mordió un labio al alejarse de la boca del rubio —eres sumamente excitante,y yo necesito frenar o no voy a parar hasta cubrirte de besos — se sonrojó a más no poder al confesar sus más profundos deseos.

 

—Mu, ¿Quién te ha dicho que quiero que pares?— le corrió dulcemente un mechón de pelo y se acercó para besar la comisura de sus labios y luego volver a acariciar su húmeda lengua con la suya.

 

—N..Na..die—hablaba con dificultad entre los labios del hindú creando un pequeño ruido al final de la unión entre ambos labios.

 

.... Continuará....

Chapter 11: Intensamente.

Chapter Text

Capítulo 10: Intensamente.

 

El lemuriano acariciaba el pecho del hindú con un dedo hasta sus abdominales que tomaba con la fuerza justa, besó su barbilla,su cuello haciendo que escapen pequeños gemidos desconocidos pero que lo encendían ,lo miró a los ojos y la expresión fogosa en un rostro tan puro como el de shaka le hizo arder en colores magenta envolviendolos. Apoyó su lengua en la piel del hindú notandola dulce y creó un hilo de saliva desde su clavícula hasta su oreja hundiendola en su lengua.

 

El sonido de la humedad en su oído pareció avivar aquella parte inospita en el hindú,tomó al lemuriano de la nuca enredando sus falanges en sus cabellos para atraerlo más a él,se encorvo y jadeo fuertemente por el sonido que le llegaba a cada nervio de su cuerpo. Su pecho subía y bajaba. Sus abdominales ardían por dentro,sus caderas se pegaban a las del ariano y sus piernas ahora estaban en medio de las del santo de aries que lo envolvían. Su piel se erizó como si estuviera expuesto a bajas temperaturas pese a que su cuerpo ardía por completo. Sus músculos se tensaban y las manos del ariano en su espalda lo obligaban a apoyarse sobre él.

 

Escuchaba su nombre entre gemidos en la boca susurrando en su oído y le obligaba a echar su cabeza hacia atrás aguantando el placer que ese simple acto le provocaba. Ahora sus pieles niveas estaban cubiertas por gotas de sudor mezclada con aquel líquido espeso y salino que caía sin cuidado sobre sus cabellos dorados.

 

La mirada azulada se cubrió de obsenidad sobre el cuerpo semi desnudo de aquel caballero que lograba sacar sus jadeos más ocultos, bajó con lentitud su mano hacia su bajo vientre encontrando la suavidad de los vellos lilas que asomban casi vergonzosos pidiéndole que se adentrara en ellos.

 

Sus labios se humedecieron y se atrevió a incursionar dentro del pantalón descubriendo el miembro viril del ariano ahora latiendo en la punta de sus dedos .

 

Los cabellos dorados esparcidos por el piso del lugar dónde antes había estado trabajando junto al sudor en el cuerpo del hindú se le hizo extremadamente sensual al lemuriano que notó cómo su piel hervía en deseo por él. De repente una mirada azulada cubrió su rostro ahora apuntando a sus labios en una pregunta implícita de si debía seguir. La respuesta fue clara ante un sonoro gemido de aquellos labios que tanto deseaba el caballero de virgo,a la vez que también se aventuraba a tocar el sexo del cuerpo del santo que más anhela el peli lila sacándole jadeos ardientes. Unos sonidos que sólo le hacían querer tener más atención de aquel cuerpo.

 

El ariano se encorvó desacomodando sus cabellos, pegoteandolos y sus músculos se tensaron al tacto de la suavidad del virginiano en su virilidad .

 

A su vez el lemuriano le sacaba espasmos al hindú con sus roces desde la base de su miembro viril hasta la punta,y aunque nunca lo había hecho con otro hombre el virginiano sintió que no podía hacerlo mejor respondiendo jadeante al tomar sus labios atrevidamente; lamiendo,mordiendo y succionando, emitiendo un sonido ardiente que se contrarrestaba con la voz jadeante e inocente de Mu.

 

Sus respiraciones parecían estar perdiendo la carrera con sus pulmones para poder respirar,lo cual les hizo encenderse más y aumentar el movimiento vertical en sus penes erguidos ahora fuera de sus ropajes.

 

Ambos falos se encontraban enfrentados entre las manos de los caballeros ,posesivos de aquellos organos descubiertos recientemente. El deseo abundaba en su mirada, sus pieles se erizaban,sus cuerpos se encorvaban y sus gemidos inundaban aquel lugar.

 

—Eres extremadamente sensual y me haces perder la poca cordura que me resta — las palabras del rubio eran entrecortadas mientras la mano libre acercaba las caderas del ariano, se le tensaron hasta los dedos de sus pies y enredó con ganas una pierna sobre la del contrario.

 

Su respiración se volvió pesada, su miembro estaba tan duro e hinchado que parecía iba a soltar toda aquella livinidad sobre el lemuriano en cualquier momento. Los gemidos de aquel caballero que tanto deseaba ,sus mejillas ardiendo tanto como las suyas y sus alientos exudando sexualidad eran un combo que le complicaba retener lo que llevaba dentro suyo.

 

El cuerpo del ariano respondía ante sus movimientos, y le dejaba hacer lo que le viniera en gana con él. De sus labios escapaba el nombre del hindú con voz ronca dándole la pauta del placer provocado, el virginiano sonreía complaciente de los cambios en el peli lila y mordió su barbilla con delicadeza sacando la poca coherencia que le restaba al lemuriano. Precisamente lo que buscaba ,ver ese rostro inocente en total obsenidad y su voz soltandos en su totalidad relagandole el preludio de lo que sabía que iba a ser un orgasmo.

 

—Shaka ....— murmuró el peli lila en su labios — no aguanto más —confesó con voz ronca entre sus húmedos labios cubiertos de sus fluidos.

 

Pero el hindú no podía hablar , estaba perdido en las sensaciones que le provocaba el ariano. Sus cosmos ardientes los abrazaron, chocaron como sus pechos, y se envolvieron cómo el sudor ahora bien marcado en sus pieles . Los gemidos aumentaron porque el virginiano también había soltado sus instintos más humanos, los lascivos sonidos de ambas manos sobre sus miembros era embriagadora, la saliva se escurria entre sus labios. De repente el ardiente jadeo de sus nombres escapaba de sus labios.

 

Las manos se movían con frenesí y ambos cuerpos se contrajeron,dejando escapar un profundo gimoteo que liberó aquel líquido blanco acumulado en todo este tiempo. Cayó entre ambos miembros cubriendolos lentamente pudiendo sentir la calidez de uno sobre el otro. Las respiraciones agitadas se fueron calmando a la vez que apoyaban sus frentes empapadas depositando un pequeño beso entre sonrisas.

 

Los ojos azules se fijaron en aquellas esmeraldas brillosas, ambos caballeros eran una mezcla de cabellos dorados sobre lilas, sudor y marcas rojizas en sus pieles blanquecinas que probablemente desaparecerían en poco.

 

Se quedaron uno frente al otro admirandose ya que aquella imagen incluso después de tal escena les parecía alucinante sin ahora ningún atisbo de vergüenza . Mu arregló algunos mechones del rostro de Shaka ,y el segundo acarició su rostro rojizo con dulzura.

 

—¿Estas bien , Mu?— preguntó dulcemente una vez pudo recuperar el aliento.

 

—Perfecto — le sonrió con ternura— aunque seguro que pronto regresara Kiki, así que deberíamos ordenarnos un poco.

 

El hindú le sonrió — Bueno podemos juntar las tazas y hacer más té.

 

Mu se apoyo sobre él y besó aquellos labios que nunca podría cansarse de besar.—. Igual no te vas a escapar tan fácil de mí Shaka de Virgo. Pretendo tenerte mucho tiempo conmigo.

 

—Me alegra oír eso — le dijo en sus labios— no quisiera tener que obligarte a quedarte así que...—tomó su barbilla y lo obligó a mirar sus ojos — por tu bien te aconsejo no separarte por mucho tiempo de mí.

 

.... Continuará....

Chapter 12: Método socratico.

Chapter Text

Capítulo 11: Método socrático.

 

Unos brazos lo rodeaban por su cintura, los observó y se sonrió. El hombre detrás suyo hizo sus cabellos a un lado para besar con dulzura su nuca, su cuello y su hombro. Le oyó suspirar. Apoyó sus manos en ambos hombros y comenzó a moverlas proporcionandole placer al roce de sus falanges por debajo de su camisa. Descendió hacia sus omóplatos para continuar por su columna vertebral delicadamente y volver a enroscarse en su cintura.

 

—¿Cómo te encuentras Shaka?—le susurró a sus espaldas.

 

—Ahora que estás aquí mucho mejor— aseguró el hindú que se giró para encontrarse con las esmeraldas que tanto le gustaban.

 

Los zafiros observaban al caballero con un leve destello a la vez que le sonreía dulcemente. Y es que últimamente no podía reaccionar de otro modo con Mu.

 

—Te extrañé —confesó muy cerca de sus labios el ariano.

 

El hindú lo acercó desde su cintura para envolverlo con todo su cuerpo — No creo que me hayas extrañado más que yo a ti.

 

El rubio acercó sus labios, depositando un pequeño beso en los del peli lila que aceptó con cariño. El lemuriano abrió levemente su boca para dejar que el virginiano ingresará su lengua lentamente para acariciar la suya, como tantas veces lo había hecho aunque no podría cansarse jamás de aquel contacto. Las mejillas del ariano se coloraron a la vez que sus labios crearon un pequeño ruido húmedo al finalizar aquel beso.

—¿Qué sucede Mu?— le preguntó acomodando un mechón lila que escapaba hacia su frente.

 

El contacto del virginiano era algo que siempre hacia erizar al lemuriano,su piel suave sobre la suya le hacía no querer que terminara nunca esa cercanía —¿ Por qué crees que me sucede algo?.

 

Shaka se sonrió y beso nuevamente los labios del ariano— Diré que es porqué te conozco aunque más bien es algo que siento, ¿Tienes algo que decirme?.

 

La seguridad en las palabras de Shaka muchas veces podían confundirse con frialdad ya que su tono era fuerte y serio sin embargo era una de las cosas que más le gustaban a Mu. Pero también sabía por su mirada que tenía información y la iba a usar si era necesario. Muchas veces le había sucedido que quizás pensará en algo, y el virginiano como si fuera un vidente natural ya sabía hace rato lo que quería decirle;así que por un segundo dudó porque claro que algo le sucedía, solo estaba siendo esquivó para disfrutar el encuentro con él luego de dos semanas sin verse.

 

— Que te extrañe y que te amo Shaka— las mejillas del ariano se coloraron aún más.

 

Si bien ya había confesado sus sentimientos siempre le provocaba eso ante la mirada penetrante de su amado que parecía desconocer el gran efecto que su mirada y su voz provocaban en él.

 

—Mu...—insistió el hindú que ahora clavaba sus iris en los del lemuriano — Vamos, dime lo que tengas que decir.

 

El lemuriano enredó sus brazos en el cuello del hindú y beso su barbilla—- No sabría cómo decirlo sin que suene a reproche, pero te juro que no lo es .

 

El hindú sólo se limito a observarlo.

 

—¿Tú no tienes nada para decirme?—elevó uno de sus tikis.

 

—Más bien tengo cosas para hacerte pero primero quisiera eliminar cualquier duda que te acoja —se separó un poco.

 

El hindú tomó la mano del lemuriano,y lo invitó a adentrarse más en la casa de virgo. Al principio era extraño estar acompañado en su casa pero con el pasar del tiempo la casa de la virgen se sentía demasiado grande sin él. El aroma a incienso invadió al proveniente de Jamir que seguía los pasos del virginiano hacia un pasillo.

 

El caballero de la primer casa inhaló y exhaló con tranquilidad—. Lo diré rápido, ¿Por qué no me dijiste que Sa...Athena y tú? — . Quiso seguir con su concepto aunque aquellas palabras en voz alta le daban más vergüenza que en su propia mente así que miro hacia el lado opuesto del hindú.

 

Shaka unió sus cejas hacia su bindi y se sonrió —no entiendo lo que dices— le dijo burlón ya que sabía perfectamente a qué se refería pero la inocencia del lemuriano eran una de las cosas que le parecían irresistibles.

 

—No me hagas decirlo por favor —-. El lemuriano se apoyo en la pared y parecía estar encerrado en sus pensamientos.

 

—Creí que ya habíamos terminado ese capítulo hace muchos días atrás cuando me hablaste de Seika— el tono del virginiano era amable pero duro, tanto que podría sonar a un enojo escondido—¿A caso te afecta lo que sucedió? Porque creo haber dejado claro que a mí no me importa lo que hiciste.

 

—No es que me afecte —al final el guardián de la primer casa se animó a mirarlo, aunque los ojos del hindú se encontraban cerrados—. Sólo pensé que me lo dirías aunque entiendo, el hombre más cercano a un Dios con una Diosa ....suena lógico.

 

—¿Logico dices?—se semi rió— claro que no. Sucede que no pretendía tal acto con Athena— se aclaró la garganta —¿Necesitabas que te lo contara?, ¿Por qué? — se encogió de hombros — no me parece relevante aunque si insistes podemos volver a tener la misma conversación que tuvimos aquella vez sólo que conmigo en tu lugar.

 

—¿No te parece importante decirme que tuviste algún acercamiento con Athena?— el lemuriano apretó sus labios y arrugó su nariz— . Olvidalo , has como si no te hubiera dicho nada.

 

El lemuriano se separó de la pared e intentó caminar hacia un lado pero la mano del hindú lo detuvo obligandolo a mirarlo.

 

—No —dijo seriamente el hindú— ahora vamos a hablar. Me incómoda hablar de esto, y no voy a negarlo pero por algo quieres hacerlo.

 

—¿Sabes?— los ojos del lemuriano se achicaron— hablas como si lo que sucedió no fuera relevante, ¿Crees que para mí fue cómodo contarte lo de Seika?— suspiró con pesadez —. Claro que no, y además si no lo hacía me sentía un traidor.

 

—¿Me estás llamando traídor, Mu?— ahora los zafiros brillantes se enfrentaban a las esmeraldas— lo de Seika no importa....entonces, ¿Por qué lo que hice yo si?.

 

—No dije que eres un traidor sino que yo me hubiera sentido así de no decirtelo — se apresuró a decir el tibetano —Seika ...es una simple chica,no digo que no lo haya hecho con deseo sino que no me pasó lo que contigo si pero en tu caso...Es Athena —se sonrojó.

 

—Deja de decir eso— las mejillas del hindú se coloraron y bajó su mirada—. Sé que suena extraño pero para serte sincero no sé ni cómo sucedió o porqué. Fue tan rápido que no pude reaccionar.

 

El lemuriano tomó la muñeca del hindú y lo acercó a él. Apoyó sus labios en los suyos y lo besó intensamente mientras agarraba su mano entrelazandola con la suya. Se separó un poco y lo miró a los ojos, necesitaba aquel contacto.

 

—¿La amas?—susurró.

 

—¿Qué dices Mu?— arrugó su frente —. Soy leal a ella, es nuestra Diosa y claro como caballero de virgo voy a protegerla con mí vida si es necesario pero entiendo la intencionalidad de tu pregunta — hizo un mohín —. Fue sólo un encuentro sexual. Sólo uno.

 

—¿Y conmigo?, ¿Es sólo ..sexo también ?—ladeó su rostro acariciando la mejilla del virginiano.

 

—No —negó con su cabeza — contigo nada es tan simple Mu— dijo con un tono que a cualquiera le parecería arrogante salvo al lemuriano que sabía significaba que tenía nervios —no es sólo sexo, principalmente porque no lo tuvimos...aún —lo besó rapidamente—. La cuestión es que no es sólo pasión lo que siento por ti. También te amo, y no esperaba jamás sentir una cosa igual.

 

—Me pasó con Seika, es decir sentir la pasión, por eso te dije que no me molestaba lo que hiciste sino que no me lo hubieras contado porque supuse que no lo hacias porque la amas — confesó y se ocultó en el cuello del hindú entre sus cabellos dorados.

 

—No fue pasión, si lo pienso bien, fue un momento de compañía entre ambos ....de comprensión, pero sólo un momento— las manos del rubio acariciaban la espalda del lemuriano con todo el cariño en sus poros. El virginiano tomó delicadamente la nuca del ariano y lo tiró hacia atrás enérgicamente para mirarlo a los ojos—espero que no me digas todo esto porqué estás enamorado de Seika porque te juro..

 

El lemuriano se rió inconteniblemente, ver a Shaka celoso era algo nuevo pero también le hacía sentir un poco de miedo. Es que el hindú podía ser terriblemente posesivo si se lo proponía aunque aquello también era lo que le cautivaba de él—Shaka, no me importa en lo absoluto Seika y quizás suena poco cortes pero es la verdad.

 

Los ojos azulados se achicaron, tomó al lemuriano de la cintura acorralandolo contra la pared y acercó sus labios a su rostro. Pasó su mirada por toda la extensión del Tibetano y besó con dulzura su mentón provocandole escalofríos.

 

— No me interesa que seas descortés con alguien pero no te atrevas a mentirme — lo miró profundamente y apoyó su frente sobre la del ariano apretandola contra la suya energícamente — te lo advierto caballero de Aries.

 

—No sería capaz de hacerlo—el lemuriano rozó la nariz del hindú con la suya—- Cuando me hablas de esa manera...un poco de miedo me da.

 

—¿Me temes?— el tono del rubio era de sorpresa.

 

—No a ti —le sonrió casi en sus labios— a perderte .

 

—No podrías, ahora tienes un problema —lo besó dulcemente — no puedes alejarme de ti.

 

El silencio creado por unos segundos era agradable, aunque comenzaron a jugar con la telepatía, un juego íntimamente de ambos, dónde Shaka se encontraba contestando preguntas que no se atrevería a hablar ni con el espejo ni con Buda. Aquello lo hacía perderse más en el lemuriano, ¿Cómo podía doblegarlo de esa manera?.

 

.... Continuará...

Chapter 13: Dulce tentación.

Chapter Text

Capítulo 12:Dulce tentación.

 

—Igual no quisiera que veas a Seika si vuelve— al fin la voz sonó en el lugar con seriedad.

 

—¿A caso estás celoso?— el lemuriano abrió sus esmeraldas de par en par.

 

—¿Estaria mal si fuera así?—interrogó Shaka atrevidamente.

 

Mu se rió abrazándolo—. No, hasta me resultaría interesante pero no deberías.

 

—No estoy celoso—respondió resoplando—pero sólo si no pienso en lo que te provocaría un encuentro con Seika.

 

—Shaka de virgo celoso, ¿Quién lo diría?—soltó con una sonrisa irónica.

 

—Te dije que no lo estoy—frunció su entrecejo.

 

Mu lo apretó más contra si y habló a centímetros de su rostro —.No deberías porque Seika no es nadie para mí mientras que tú ...—besó sus labios — lo eres todo. Preocúpate más bien por eso.

 

Shaka sintió la calidez del cuerpo de Mu, y la sonrisa se adueñó de sus labios— Más bien debería ser al revés.

 

—Tú... Eres un posesivo Shaka y te confieso que me gusta mucho — le sonrío pícaro.

 

—¿ Cómo no serlo contigo?— lo miró a los ojos con un brillo especial.

 

Los labios de ambos caballeros se unieron mientras sus pieles se rozaban con ansias. La boca del ariano se abría para recibir la húmeda lengua del virginiano que doblegaba el cuerpo del lemuriano. Las manos del caballero de virgo acariciaban la espalda del peli lila que se encorvaba por el contacto,mientras los besos se apoderaban de ambos cada vez con más fogosidad. La saliva escurría por sus comisuras y las respiraciones se agitaban por aquellas dedicaciones de amor tan excitantes.
—¿Hasta cuándo seguirás besándome de esta manera?—le susurró el hindú mientras volvía a lamer la comisura de los labios que sacaban su parte más obsena.

 

—Hasta que no quieras que lo haga más — le susurró tragando la saliva acumulada en sus propios labios.

 

—Eso no va a pasar, pero es que me estás encendiendo en demasía de lo que te deseo y no quisiera importunarte— le confesó en un acto que jamás se creyó capaz .

 

—Me tienes completamente a tu disposición Shaka de virgo,y puedes hacer lo que desees conmigo. No te contengas — lo miró a los ojos que tanto le gustaban extremadamente sonrojado por la situación y sus propias palabras.

 

—No me digas eso— afirmó más serio de lo que hubiera querido aferrando su cintura a la suya.

 

—¿Por qué ?— sus tikis se unieron y sus mejillas sonrojadas brillaron.

 

Shaka no pensaba ver esa vergüenza en el ariano,al menos no en estos momentos pero sin embargo esa inocente pregunta le encendio más.

 

—Porque lo que ansío es tomarte por completo —se mojó los labios y tomó su barbilla para girar su rostro y besar su cuello —¿Quieres estar conmigo de esa forma ,Mu?.

 

La pregunta no lo tomó por sorpresa,sin embargo, aquellos labios divinos le estaban proponiendo volver reales sus pensamientos más impuros y un éxtasis se apoderó de su cuerpo. A la vez lo hizo jadear a medida que los besos del hindú lo azotaban.

 

—No quiero que te sientas presionado porque no puedo parar de besarte — le sonrió con ternura el ariano— yo te respeto y no quise darte una mala impresión.

 

—Si estás nervioso puedes decirme qué no —movió su rostro a ambos lados haciendo danzar sus cabellos dorados y rozó su nariz con la suya sonriendole sin dientes— tal vez hablé demasiado rápido .

 

—No es eso…— negó con la cabeza, bajando su mirada ya que al parecer la situación no le permitía expresarse como quería —Quiero entregarme a ti Shaka pero es que —se sonrojó más si podía —- .Nunca estuve con nadie así y no sé bien que hacer o decir.

 

—Deja de tratarme cómo algo que va a romperse o irse en cualquier momento por empezar—le sonrió.

 

—¿Lo ves?— se rió por lo bajo el ariano avergonzado y se acercó más al cuerpo del virginiano.

 

— Yo tampoco estuve con nadie así — el hindú pasó sus dedos desde el cuello hasta el centro del pecho del lemuriano con una suavidad que le crispo la piel
—. Pero no te dañaría ni incomodaría bajo ningun punto de vista.

 

Aquellas palabras eran tan obvias que a cualquiera le resultarían innecesarias pero no al virginiano que dejaba siempre en claro lo que el ariano significaba para él. Las caricias y los besos se intensificaron en menos de lo que hubieran esperado.

 

El rubio estaba dominando al otro en este espacio,siempre lo hacia inconscientemente porque cada vez que lo tocaba el ariano no podía evitar entregarse por completo al placer de los roces del mismo ya que confiaba plenamente en cada sensación que le regalaba. El hindú beso sus labios con ternura para terminar en una lasciva lamida que llegó hasta su cuello haciéndole sentir una descarga eléctrica en todo su cuerpo.

 

Las manos pasaban por debajo de sus ropas para tocar aquellas pieles que ya eran una adicción,y al igual que el metal con un imán no podían evitarse más bien intensificarse finalizando en pequeños jadeos que aireaban sus pulmones. Sus pieles quemaban entre sus yemas ,sus cosmos ardían unificandose y sus labios buscaban la cercanía alejándose sólo para tomar el aire suficiente para seguir conscientes.

 

El lemuriano ladeaba su rostro para darle permiso a los labios del hindú que succionaban con cariño y anhelo aquel blanco cuello. Por su parte aprovechaba para enredar sus dedos en los cabellos dorados del virginiano atrayendolo contra él al sentir el cosquilleo inevitable en su cuerpo.

 

Con sólo sentir , el enorme placer que dejaba escapar el cuerpo de Mu en ese momento hacía que el deseo sólo aumentara más en el rubio, tanto que un hilo de saliva escapó de su comisura hasta los cabellos lilas desordenados en el inicio de su pecho, enseguida subió su mirada al rostro del lemuriano que ahora era tan lascivo que le hacía sólo querer más de él.

 

El apetito desbordaba en cada poro del hindú,y aunque intentaba con todas sus fuerzas no incomodar al lemuriano ansiaba ser quién socavara su inocencia cada vez que pudieran. Anhelaba complacerlo, entregarse por completo a aquel ser que estaba entre sus brazos , sacar,arrancar aquellos sonidos descubiertos que tanto le gustaban y caer en la tentación de unir sus pieles.

 

Las suaves manos del lemuriano lo tomaron por sorpresa llevandolo hacia su rostro para besarlo profundamente. El lemuriano encerró sus labios con los suyos e introdujo su lengua con pasión casi sin dejarlo mover la suya apretujandolo habidamente contra la pared,encerrandolo entre sus brazos, de repente aquel beso era lento pero profundo como queriendo meterse más dentro suyo de alguna manera.

 

El hindú se separó levemente con dificultad dejando aquellos labios con un deseo evidente de más,sus zafiros cubrieron las brillosas esmeraldas de Mu haciéndole erizar desde su nuca hasta a punta de sus pies. Sus respiraciones unían sus pechos cubiertos por una línea de sudor que se notaba en sus ropas déjando ver un poco sus musculos pegados a las mismas y en medio, el jadeo inevitable del momento que compartían.

 

El virginiano apartó la camisa del ariano con ternura dejando expuesto aquel torso blanquecino ,observando cada marca de sus músculos como si fuera la primera vez que lo hacía,y sus yemas se movieron lentamente por aquellas pieles que se erizaban con ese simple acto. El lemuriano se encorvaba con el tacto y suspiraba apoyando su frente sobre la de su amante. Enseguida le imitó sacando lentamente la camisa que entorpecia la travesía de sus caricias.

 

El peli lila le sonrió,creando un acto reflejo en el rubio que recibió con soltura aquellos labios que invadian su pecho con ansias y humedad besando cada recoveco. Mu se aventuró y aprisionandolo un poco más se dirigió a sus erizados pezones para dedicarles unas lamidas al inicio vergonzosas más luego pasionales sacando jadeos de la garganta del santo de la virgen. Su lengua ahora conocía aquellas pieles ,sin embargo no podía evitar la vergüenza que le abrumaba demostrada en cada punto rojo en sus mejillas.

 

El virginiano disfrutaba las muestras de afectos dedicadas hacia él,ahora sus torsos desnudos se rozaban por inercia sacándoles jadeos cada vez más sonoros. Los cabellos rubios se entremezclaban con los lilas y las manos se unían en cada parte del cuerpo opuesto. El calor inundaba aquel pasillo,y las mejillas de ambos ahora sentían lo que sus cosmos reververantes anunciaban.

 

Mu descendía por los músculos de Shaka que le marcaban el camino hacia sus abdominales creando un húmedo camino hasta su bajo vientre que tocaba ahora con cierto descaro,el virginiano gemía al roce de aquellos inocentes labios que ahora eran más atrevidos. Sus esmeraldas lo observaban desde abajo haciendo que su mente imaginara lo que harían sus labios en la parte más íntima suya.

 

El ariano volvió a subir para besar los finos labios del hindú,está vez con lentitud para finalizar en un ruido tanto húmedo como excitante notorio en sus ojos y cuerpo. El encuentro profundo de los zafiros con las esmeraldas hacían notar el deseo de tocarse y besarse más allá de sus límites.

 

El hindú apoyó dulcemente su frente en la del lemuriano dejando una leve capa de sudor que apreció en sus pieles gracias a él y deposito un pequeño beso finalizando en una larga mirada,bajo ningún punto quería incomodarlo o apurar alguna situación que el otro no quisiera. Pero a la vez parecía inevitable aquello ahora que estaban unos pasos mas adelante de lo que esperaban.

 

..... Continuará....

Chapter 14: No haré nada que no quieras.

Chapter Text

Capítulo 14:No haré nada que no quieras.

 

Por momentos el arrinconado era Mu y por otros Shaka,marcando el inevitable camino hacia los aposentos de virgo. Aquellos que el caballero de aries deseaba conocer y también le daba unos escalofríos de nervios.

 

Pero el lemuriano sabía lo que quería y era entregarse completamente al hindú. Así que aproximó sus labios a los suyos engullendolos con pasión ,pasando su lengua por toda su extensión haciéndolo jadear entre su saliva.

 

Los labios de Shaka se movieron bruscamente sobre los suyos mientras lo empujaba con delicadeza sobre su cama, las rodillas del lemuriano se clavaron en el colchón para abrir sus piernas elegantemente sobre él y hundió sus brazos en el colchón para sostenerse sobre el hindú.

 

Por unos segundos, vió ese cuerpo divino que se extendía en aquellas sábanas blancas mientras su pecho subía y bajaba.Los cabellos dorados del hindu se esparcían por la almohada ,sus mejillas rosadas y sus ojos azules observandolo lascivamente le parecía sumamente hermoso.

 

El rubio tuvo que contener el aliento y su cordura al tener al lemuriano sobre él de esta manera. Sus corazones palpitaban con ansias,y sus manos se movieron con libertad sobre sus cuerpos.

 

Un beso profundo pero lento se apoderó del momento, la lengua soberbia de Shaka con el resto le propinaba dulces palabras, se mezclaba a la perfección con la suya que era tan apacible y contemplativa mientras con él se sumia al deseo ardiente de aquellas pieles que no podía dejar de tocar. Aquella lengua le estaba haciendo perder el absoluto control que poseía el guardián del primer templo.

 

Los labios de Shaka succionaban con delicadeza los de Mu,un beso suave pero pasional, los labios divinos se movían por los suyos tan suavemente y profundo dentro de su cavidad que le excitaba de sobremanera. Podía sentir el ardor y la contención que tenía hacia él .

 

La respuesta del ariano era mover su lengua en toda la extensión de la de su compañero sin poder evitar que se acumule saliva entre ambos,no llegaba a tragarla sin embargo no importaba dejarla escurrir por entre sus labios. Los jadeos se les escapaban de la garganta, mientras las manos del hindú lo hundían más contra él.

 

El rubio por su parte pasaba su lengua humeda por su cuello de una manera sumamente atrevida. ¡Shaka!, aquel caballero que no salía de su templo, el que meditaba la mayor parte del tiempo tenía escondido dentro suyo esa fogosidad que tomaba la inocencia del ariano para convertirlo en un cúmulo obseno de sensaciones que pasaban a través de cada uno de sus poros en aquella habitación.

 

El ariano le parecía deliciosamente sensual, y cruel cuando lo acariciaba de aquella manera tan obscena esperando que su respuesta fuera respetuosa ante sus suaves gemidos en su oido. Sentía un absoluto placer con cada beso y cuando sus ojos brillaban en fuego al mirarlo. Esas esmeraldas podían ser dulces,crueles y tentarlo a soltar sus más bajos instintos.

 

Las manos de Mu recorrían el pecho del hindú surcando cada recoveco que parecía ser nuevo para él,sus labios cambiaron de dirección hacia donde estaban sus manos , surcando un camino húmedo hasta sus pezones que se erizaban en aquellos calientes labios que le succionaban hasta sus pensamientos menos puros escondiéndolos en jadeos que ocultaba bajo sus apretados labios. Los cabellos lilas cubrían desacomodados su nivea piel y las manos del hindú apretaban las sábanas blancas con cada roce del ariano.

 

Los cubría demasiado placer para un sólo momento.

 

Los gemidos del rubio no se hicieron esperar cuando los labios del peli lila rozaron su bajo vientre, enseguida se sentó. Él estaba seguro de lo que quería y era obtener el placer del lemuriano. Por unos segundos increíblemente eternos las esmeraldas se unieron a los zafiros brillantes, vibrantes que le hicieron colorar las mejillas.

 

Todavía con todo lo que habían compartido le seguía intimidando de una manera imposible de describir, la piel del peli lila se erizó y contuvo un jadeo en su garganta. El hindú se escurrió hasta quedar frente al lemuriano y lo subió desde sus hombros para que quedará recostado a su lado. Las hebras lilas caían sobre las doradas en las sábanas blancas ,algo que simulaba un atardecer, ardiente por el calor de sus cosmos.

 

Shaka tomó su cintura acercándolo y movía su cadera inconscientemente hacia el lemuriano que le sonreía uniendo sus tikis a la vez que acomodaba sus piernas entre las del virginiano abriendolas levemente.

 

El rubio tomó por debajo del pantalón su erección y se mordió los labios. El ariano tuvo que apartar la mirada por un momento para controlarse cuando el virginiano comenzó a mover su mano de arriba hacia abajo sacando gemidos deliciosos de su amante. Enseguida las manos de Mu se aferraron a su espalda clavando sus yemas en sus marcados omóplatos que vibraban en sus falanges.

 

A Shaka le alucinaba como el cuerpo del lemuriano se encorvaba y convulsionaba por él. Su nombre susurrado jadeante en la voz que un poco fallaba de Mu hacia que su masculinidad le apretara el pantalón. Los labios insistentes del rubio succionaban el cuello del ariano dejando pequeñas aureolas rojizas en aquella suave piel blanca que se humedecia con su lengua.

 

Las manos del guardián de la primer casa tomaban su sexo por sobre el pantalón haciéndolo jadear tan fuerte que inundaba el silencio de virgo. Cómo podía hacerle sentir tanto placer con esos sonidos que salían de sus labios?

 

—Shaka...—susurraba ahora hundiéndose en sus cabellos.

 

—No te escondas...—. Dijo serio tomando su barbilla para ver su rostro totalmente colorado y con unas gotas de sudor en medio de sus tikis.

 

Shaka abrió sus ojos y lo penetró con ellos, abrumandolo con todo el deseo y la ternura que le transmitió . Por su parte las esmeraldas de Mu le mostraban aquella inocencia y dulzura que ahora sentía estaba socavando cada vez mas.

 

—Eres tan hermoso Mu…—le susurró con cariño .

 

La dulzura que manejaba con él le hacia dar escalofríos desde su nuca hasta sus pies y sumado a las caricias proporcionadas a su falo ahora palpitante entre las falanges del hindú le hicieron tensar sus abdominales pasando electricidad por dentro de sus entrañas hasta finalizar en el gemido más dulce,placentero y sonoro que llegaba segundos antes de que su semen se escape entre los dedos del hindú.

 

—Perdón — dijo entre cortada mente con el pecho agitado pegando contra el del virginiano.

 

—¿Por qué me pides perdón si era lo que quería?— le dijo a la vez que sus labios besaban con ternura los suyos —si quieres cruzar la línea,lo haremos bien.

 

La mano de Shaka seguía acariciando ahora más despacio aquel miembro cubierto por aquel líquido caliente recién salido,a la vez que besaba el mentón del ariano.

 

—Quiero que disfrutes pero prométeme que si algo no te gusta o no quieres seguir me lo dirás.

 

Sus zafiros se posaron sobre los párpados semi abiertos del guardián de la primera casa que aunque disfrutaba esas caricias aún estaba demasiado sensible por el orgasmo anterior. Aquella cara nueva de placer inundaba la piel con electricidad en el virginiano que jadeaba por lo bajo.

 

—No haré nada que no quieras—. Aseguró con aquel tono tierno que Mu conocía bien.

 

—Sigue—dijo en sus labios—también quiero que disfrutes y entregarme a ti.

 

.... Continuará....

Chapter 15: Amo tenerte así.

Chapter Text

Capítulo 15:Amo tenerte así.

 

Las mejillas de ambos caballeros que habían vuelto a ser blancas comenzaron nuevamente a hervir por lo que había dicho y además porque su sexo reaccionaba nuevamente ante su compañero.

 

Los besos volvieron a iniciar, aunque está vez más suaves investigando cada espacio de las bocas de cada uno. El dedo índice del lemuriano siguió la línea de los músculos del pecho de Shaka hasta el ombligo, donde se hundió con suavidad para dirigirse hacia su bajo vientre, terminando el recorrido en la pequeña mata de vellos dorados que recubría el sexo del hindú.

 

Enredó uno, dos y tres dedos allí en esa suavidad que escondía el objeto de su deseo mientras los jadeos de Shaka se volvían más intensos hasta convertirse en algo salvaje en esos labios divinos que estaban recorriendo los suyos. Descubrió entonces que le gustaba absorber la candidez del virginiano en su propia garganta.

 

La boca del guardián de la primer casa era escurridiza pero hábil en su oído, regalándole sus suspiros más placenteros a la vez que sus dedos marcaban un zig zag en las pieles del hindú que se arqueaba, acariciando la cabellera lila para atraerlo a su cuerpo.

 

—Te voy a besar tanto que no te van a quedar ni fuerzas para meditar, Shaka de virgo.

 

Dijo con esa voz sería que sólo le salía cuando estaba en batalla haciéndolo ver increíblemente sensual ante el hindú. Lo giró con fuerza pero delicadeza a la vez apoyando el peso de su cuerpo sobre el virginiano. Luego pasó su brazo izquierdo por debajo del cuerpo suyo, mientras que con el derecho, acariciaba toda la extensión de su cuerpo haciéndolo encorvar y acelerando su respiración.

 

Tomó la mano de Shaka llevandola a su sexo que volvía a tocar con suma maestría sacándole gemidos profundos,esto le gustaba y a la vez no podía creer como con unas caricias lo tenía de esta forma. Se sentía tan suyo, tan en sus manos y dispuesto que lo hacía perderse aún más en el hindú.

 

Mu aprovecho estando detrás suyo para besar su nuca,y su lengua ahora acariciaba la zona que le hacía erizar pasándola también por su cuello y su oído. Notó que al hacer esto sus labios sagrados realizaban los sonidos más impuros y placenteros que había escuchado jamás. Estaba provocando esas reacciones tan indecorosas en aquel cuerpo que deseaba con desespero.

 

—¿Quieres qué siga Shaka?—jadeó con voz ronca el ariano.

 

Los cabellos se entremezclaban con su saliva pero no importaba ,siguió acariciandolo hasta llegar a aquel volcán donde estaba su falo erecto que envolvió en sus dedos,apretando aquella hinchazón provocada por sus mimos. Apretó suavemente y movío sus falanges profundamente. Con ansias pero con calma erizando la piel del hindú.

 

—Hazlo…—. Le susurró con gravedad cargado de afán estremeciendose en él.

 

La emoción, el deseo y un poco de ansiedad se apoderaron de ambos pero Shaka quería proporcionarle todo el placer que pudiera e incluso él quería llevar la marca de aquel hombre que le arrancaba su parte más humana. Lo quería, lo anhelaba y quería su marca para siempre en él.

 

—Confieso que no era cómo lo esperaba —susurró ansioso el ariano que ahora se fregaba en el cuerpo del rubio sin pudor alguno.

 

El virginiano quitó su mano de su sexo para pasarla por su cuerpo haciendo estremecer al ariano—¿Y cómo lo esperabas Mu?.

 

El guardián de la primer casa sintió su corazón acelerarse por los nervios y se contuvo él mismo.

 

—Al revés — se le coloraron las mejillas y se ocultó de nuevo en los cabellos dorados que olían exquisitamente bien.

 

Shaka no pudo evitar reírse, aquella confesión de esa manera inocente en ese momento le pareció dulce por parte del ariano.

 

— Te dije que quiero que disfrutes — le alcaró con ese tono serio y soberbio que tanto le gustaba al lemuriano.

 

Shaka era un hombre que imponía mucho respeto pero siempre se mostraba de una manera dulce y tierna con Mu. Eso era en parte lo que le gustaba de él.

 

El ariano le dió la vuelta para mirarlo a los ojos—. Pero prefiero verte si vamos a hacerlo así.

 

Sus miradas se unieron a la vez que sus cosmos se abrazaron.

—Ahora qué estamos al revés, espero te sientas más cómodo—se sonrió el virginiano.

 

—Shaka...—.Se quejó el lemuriano entre los besos del rubio— no me refería a eso aunque sí me gusta verte a los ojos.

 

El hindú se coloreó de carmín y aquel acto marcó el momento de la huida de la cordura en ambos caballeros. Sus labios se unieron con desespero, y el cuerpo del virginiano se movió debajo del ariano,se separaron un poco aunque sus labios se unían lentamente haciendo un pequeño ruido en su humedad.

 

—Por ahora —acarició los labios del lemuriano con su dedo pulgar —. Concentrate en este momento, kuego tendremos tiempo para lo que deseemos hacer.

 

El guardián de la primer casa se sonrojó cuando el hindú metió dos dedos del ariano en su boca marcando lo obvio sin necesidad de palabras, sabía perfectamente lo que tenía que hacer.

 

Sus erecciones se rozaban con suavudad,a la vez que aquellos dedos mojados se dirigían al lugar dónde nadie había tocado jamás al virginiano mientras un grito ahogado se escapaba de sus labios, cuando la presión fue ejercida,y le dió un pinchazo de dolor.
Un dedo ya estaba dentro, jugando con la pequeña cavidad, mientras la saliva se juntaba en la garganta del ariano y él hindú se acostumbraba a aquel dedo que al principio le era incómodo más luego se relajaba. Enseguida los astutos labios del lemuriano se tomaron el trabajo de distraer a Shaka, proporcionándole suaves besos, que de vez en cuando succionaban la otra boca.

 

Mientras su otra mano recorría suavemente su piel un segundo dedo invadió el territorio virgen, y respondía sorprendentemente bien dándole la bienvenida dennotando lo obvio: Shaka quería entregarse a Mu y Mu deseaba poseer a Shaka.

 

El guardián de la primer casa era más nervioso y se movía inseguro. Shaka se sonreía en sus labios al notarlo, su Mu era tan dulce que le daba ternura y también más ansiedad.

 

Shaka era más seguro en sus movimientos aunque tampoco lo había hecho jamás confiaba tanto en Mu que tomó la punta del duro miembro del lemuriano, y lo posicionó dónde debía .

 

Se abrazaron para marcar aquel inicio del camino mientras jugaban con sus lenguas en sus bocas dejando escurrir saliva entre sus comisuras, a la vez que el miembro de Mu se abría paso en Shaka. Y, si , aquello le había provocado dolor pero él,era un caballero dorado y podía aguantar cualquier molestia. Más si eso era estar unido al ariano.

 

Cerró sus ojos por un momento, el cuerpo del ariano se frenó para acomodarse en el cálido interior que le ofrecía asilo y cuando sintió que los músculos de Shaka se dejaron de tensar soltó toda la respiración que había guardado al inicio en un jadeo. Los zafiros volvían a unirse con las esmeraldas, ambas miradas brillantes, latentes, las mejillas coloradas y los labios resecos que mojaron con un beso.

 

Ambos comenzaron un suave vaivén en sus cuerpos para irse acostumbrando el uno al otro pero ya sentían aquella perfección de sus cuerpos unidos. Sus labios seguían pegados, sus lenguas mezclandose, sus manos se acariciaban y la profundidad de sus movimientos aumentaba en medio de jadeos de sus gargantas.

 

Pronto el placer reemplazo la molestia y la rapidez la suavidad. Ahora ambos gemían, se besaban y se movían al unísono como si sus cuerpos se conocieran desde siempre.

 

Sus cuerpos se cubrieron de sudor, y está vez los cabellos lilas se enredaban en los dedos del hindú que apretaban la espalda del lemuriano que tenía espasmos preludio del claro clímax.

 

—Shaka... sólo un poco más —le susurró en sus labios un poco jadeando .

 

—Estoy bien —dijo entre cortada mente .

 

Mu beso los labios de Shaka pasando obscenamente su lengua hasta sus comisuras y tomó la virilidad de Shaka masturbándolo con la misma pasión que lo embestía y si antes estaba sintiendo el verdadero placer ahora era el éxtasis que no se esperaba.

 

Los movimientos dieron paso a un gemido que seguramente se hubiera escuchado por todo el santuario cuando el hindú entre espasmos liberó su semen caliente en las falanges del lemuriano llegando hasta sus abdominales, a la vez que las contracciones del cuerpo del rubio le hacían tener un segundo orgasmo al guardián de la primer casa que gimió casi igual que su compañero en sus labios.

 

Mu quedó por unos segundos tendido sobre Shaka,cosa que le pareció sumamente cálida, acompasando su respiración junto a la suya. Sus cuerpos sudados se separaron con un pequeño sonido de sus pieles cuando el hindú lo movió a su lado.

 

Tomó las sábanas blancas y le tapo la mitad del cuerpo para acercarlo a él. Enseguida el ariano se acurrucó en los brazos del hindú y le sonrió.

 

Eran un lío de cabellos desacomodados,cuerpos sudados y colorados por las demostraciones de cariño pero se vieron bien. Un pequeño beso en la labios cerró ese momento como si necesitaran eso para sellar lo que había pasado.

 

—¿Estás bien? ¿Te lastimé?—le dijo el ariano a la vez que besaba sus labios con cierto aire de preocupación.

 

—Estoy perfecto—le sonrió en sus labios dándole otro beso—¿Tú?.

 

—Muy bien. Shaka...—. Lo miró a los ojos que ahora estaban cerrados. Sus tupidas pestañas cubrían aquellos párpados blanquecinos—mírame Shaka.

 

Las pestañas se movieron varias veces en los zafiros y observaron las esmeraldas brillosas.

 

—Te amo, ¿Tú me amas todavía ?.

 

El virginiano le sonrió—¿Podria no hacerlo?. Claro que te amo Mu.

 

...Continuará...

Chapter 16: Nunca es demasiado tarde.

Chapter Text

Capítulo 16: Nunca es demasiado tarde.

 

Las sábanas blancas se mezclaban entre su cuerpo desnudos y sus cabellos estaban revoltosos sobre su rostro. Los corrió e inhaló profundamente sintiendo el aroma de la casa de virgo. Se sonrió aunque su amante no se encontraba allí. Se levantó de la cama y se puso una camisa junto a su ropa interior para ir en su búsqueda. Aún era de madrugada,y podía quedarse un tiempo más ante de regresar a Aries para terminar de arreglar sus cosas para volver a Jamir. Todavía había mucho qué hacer pero no quería pensar en ello.

 

Mientras caminaba por el pasillo pensaba en todo lo que habían hecho unas horas atrás y sus mejillas se coloraron. Vió enseguida a Shaka en el centro de la casa de la virgen en la posición de loto,la cuál le indicaba que estaba meditando así que siguió de largo tratando de hacer el menor ruido posible aunque sabía que este le notaría al menos no le molesta.

 

Una vez en la cocina preparó el agua que puso en la tetera para hacer una infusión. Mientras buscaba una taza en aquel lugar que le era ajeno pero a la vez se sentía cómodo las suaves manos del virginiano pasaron por su cintura y depósito un pequeño beso en su cuello por detrás suyo.

 

—Creí que habías sido un sueño, Shaka de virgo —confesó apoyando sus manos en la mesada.

 

—Lo mismo pensé de ti hasta que te vi en mí cama— ladeó su rostro para besar los labios del lemuriano —. Aunque puedo ser tu pesadilla si así lo quieres— le susurró en su oído.

 

—¿Es una proposición indecorosa a caso? — se sonrojó al sentir las caricias que el hindú le daba a su pecho.

 

—No lo sé ¿Quieres qué lo sea?— el rubio había bajado hasta su bajo vientre y jugaba con sus dedos en el elástico de su ropa interior.

 

—Todavía es de madrugada, y falta para la salida del sol así que...

 

Mu acaricio las manos de Shaka llevándolas hacia su masculinidad que comenzaba a responder a los estímulos recibidos.

 

El hindú lo dio vuelta y beso sus labios con tenura entre mezclando su lengua con la del lemuriano lentamente para luego levantarlo y sostenerlo entre sus brazos. Las piernas de Mu se enredaron en sus caderas sosteniéndose a su cuerpo desde sus manos apoyadas en su espalda a la vez que le daba suaves besos desperdigados por su rostro cosa que le hacía arrugar la nariz al rubio .

 

En lo que parecieron segundos ya lo había llevado a la habitación sosteniendo sus muslos. Lo recostó como pudo en medio de besos ansiosos y húmedos que el lemuriano le propinaba casi sin dejarle tiempo a respirar.

 

Los zafiros azules de Shaka ahora se encontraban sobre las esmeraldas del ariano haciéndolo sonrojar hasta sus orejas. El cuerpo del hindú se sentía tibio a través de la delgada camisa que llevaba puesta, sus pechos estaban acompasados al unirse en el semi abrazo creado por la inercia del cuerpo del virginiano sobre el del lemuriano.

 

Los cabellos rubios caían al rededor del rostro del proveniente de Jamir que esperaba deseoso aquel beso que se acercaba segundo a segundo. El hindú acarició habidamente el cuello que tantas veces había tomado hasta llegar a la nuca del ariano para sostenerse en parte, y lentamente se acercó hasta apoyar sus labios sobre los del pelilila que dejaba escapar un suspiro.

 

Esmeraldas y zafiros conectados en la habitación, ajenos a aquellos deberes que les esperaban en unas horas . Una mirada de profunda entrega entre aries y virgo. Shaka y Mu. En ese encuentro de sus ojos se escondia un deseo palpable. El cuerpo del hindú se tensó por un momento aunque al segundo acortó la distancia estampando un beso en los labios del lemuriano y golpeando su pecho con el suyo .

 

Los labios de ambos caballeros se movían con vehemencia uno sobre el otro para dejar espacio a sus húmedas lenguas que parecían explorar por primera vez aquellas bocas.

 

El cuerpo del proveniente de Jamir se electrizaba en ese contacto tan íntimo que tenían, y aunque varias veces había tocado, besado ese cuerpo no podía evitar volver a sentir lo mismo que la primera vez que lo hizo. Lentamente aquellos besos comenzaron a ser más que sólo besos, y algo se encendía en los cuerpos de los caballeros junto a los roces de sus pieles. Las manos de Shaka se entremezclaban con las del ariano que buscaban ansiosas el contacto de su pareja.

 

El hindú observó por debajo de sus párpados semi cerrados los labios hinchados y rosados,de Mu que se hacia aún mas eróticos de ese modo, sus esmeralda brillando entregado a ese momento tan de ellos, el ligero temblar en su piel,y el sudor que apenas empezaba a salir de sus poros. Un momento erótico pero cargado de amor.

 

Las manos del lemuriano ahora subían con ternura por debajo de la camisa del hindú ,quitandola con delicadeza para admirar el torso desnudo de Shaka que seguía haciéndolo sonrojar . El virginiano ladeó su rostro y se sonrió mostrando esa mirada que le llegaba a lo profundo de sus entrañas. Suspiros y jadeos se juntaron al unirse nuevamente sus labios. Las lenguas danzaban entre si humedeciendose y dejando escapar un poco de su saliva por los labios que era succionada por el otro . Ambos caballeros ahora estaban agitados,el ariano tomaba la espalda del hindú y el virginiano acariciaba el pecho del lemuriano con ansias de más.

 

Rozaban y apretaban sus pieles a la vez que sus caderas se unían para juntar las recientes erecciones que chocaban como el agua en las rocas de los acantilados.

 

—Te amo —le susurró el ariano a la vez que el hindú respondía lo mismo.

 

Una pregunta tácita en los ojos del rubio apareció al sacar los pantalones de su amante, ese ,¿Puedo?, implícito respondido por la afirmación en los ojos del ariano que cerró con un beso más húmedo que los anteriores. Las manos del hindú habían descendido a las piernas para colarse en los glúteos del lemuriano que jadeaba debajo suyo, el rubio pasaba sus labios por el cuello del proveniente de Jamir haciéndolo estremecer con el roce de su aliento, ese sonido de placer que llenaban los oídos del hindú. Ambos miembros se rozaban con fuerza a la vez que el rubio se movía sobre el peli lila y llevaba sus caderas hacia él. Cada movimiento llenaba de cosquillas el cuerpo del lemuriano que gemia con placer haciendo que el deseo del hindú se volvieran incontenbbles.

 

El ariano tomo la muñeca de Shaka llevando sus dedos a sus labios, los cuales ingresó en su boca lamiendolos lascivamente, el hindu se sonrojo porque entendió el mensaje en cada parte de su agitado cuerpo, acercó sus labios y mojo parte de sus dedos y la propia lengua de mu que aun estaba lamiendo cada dedo. Los dos alientos se chocaban mientas que la humedad se encargaba de llenar el espacio con un ruido en medio de los jadeos que aumentaban de ambos caballeros.

 

Mu clavó los ojos en los zafiros brillantes de Shaka pidiéndole casi con su mente el deseo de que lo posea, el hindu se movió con delicadeza escurriendose entre sus muslos para ingresar con sus dedos en su parte más íntima haciéndolo encorvar debajo suyo finalizando con un gemido de goce al sentirlo dentro. Unos movimientos y roces de lenguas jugando en el mojado aire bastaron para la entrega completa del cuerpo del ariano al ahora miembro erecto del hindú.

 

La habitación cubierta por sus cosmos calentaban lugar que los rodeaba. Virgo sobre aries, aries envolviendo a virgo. El choque leve de las caderas de Shaka contra las de Mu haciendo que ambos cuerpos se empapen en sudor.

 

Los labios se hacían uno con ansiedad, desespero, pasión a la vez que los cuerpos de ambos se unían sin querer separarse, leves y rápidos movimientos por momentos le quitaban jadeos y gemidos a las gargantas de ambos santos dorados que bailaban apasionadamente una danza que coloraba sus mejillas de carmín.

 

El cuerpo del ariano se arqueaba para que el virginiano se introdujera más en él a la vez que abrazaba su virilidad en su interior haciendo que el cuerpo de Shaka llegue al momento casi máximo de placer en unas cuantas candentes estocadas , el sudor cubría sus cuerpos por completo, y sus pieles erizadas hacían un ruido que los deleitaba conectandolos con su parte más humana.

 

El hindú comenzó a moverse lenta y profundamente haciendo que el cuerpo del ariano se pegue más a él. Sabía a qué se debía esto, la excitación había llegado al punto algido de su cuerpo,el rubio respiraba con dificultad sobre los labios del lemuriano haciéndolo vibrar con más fuerza debajo suyo enredandoce en las sábanas,jadeando incontable veces .

 

El guerrero de Jamir tomaba las caderas del hindú obligándolo a introducirse más profundo, dejándolo sentir como sus paredes lo apretaban con urgencia. El cuerpo de Shaka respondió al pedido del del Mu abrazándose a ese cuerpo enteramente entregado a él entre gemidos incontenibles de ambas bocas que se unían solo para tomar aquellos jadeos que se entrecortaran con los movimientos de ambos. El falo del lemuriano se extendía caliente y palpitante entre sus vientres frente a los choques de sus caderas ahora un poco más frenéticos entre susurros que se ahogaban con sus lenguas cubiertas de saliva.

 

Ambos caballeros dilataban aquel final que era inminente ,entonces el rubio vio el pedido implícito en las esmeraldas del guerrero de Jamir; tomó su miembro erecto y movió su mano de arriba hacia abajo al igual que lo hacían sus caderas. El lemuriano apretaba la espalda del hindú hincando sus uñas con placer, indicando el goce que sentía,al momento el espeso líquido blanco cubrió la mano del virginiano y parte de sus abdominales a la vez que inundaba con fervor el interior del ariano.

 

Se mantuvieron por un momento en aquella posición acompasando sus respiraciones. Con sus frentes juntas cubiertas de sudor y sus cabellos alborotados.

 

Sus labios se apoyaron creando un beso de amor y dulzura hasta que el hindú se hizo a un lado. El ariano mudó su rostro al pecho ya menos agitado del virginiano observando aquellos zafiros brillosos que amaba tanto,se sonrojó y le sonrió acomodando su flequillo a un lado dejando el bindi expuesto en medio.

 

El hindú acarició la espalda del lemuriano tiernamente—. Eres mí mayor tentación, Mu de aries.

 

Las mejillas niveas del proveniente de Jamir volvieron a teñirse de rosado—. Me gusta serlo...

 

Movió su rostro hacia el del virginiano, pasó la lengua por sus labios para introducirla en su boca y rozar la suya.

 

—No hagas eso— dijo el hindú entre sus labios aunque volvió a besarle acercando su cuerpo al suyo.

 

—¿Por qué?— le sonrió entre los labios enredando sus piernas a las de él.

 

—Porque me dan ganas que no vayas a Jamir y yo no ir a la misión.

 

Mu giró su cuerpo y observo la ventana por dónde se observaba el cielo tornandose amarillento en señal que pronto saldria el sol

 

—¿Te importa mucho el desayuno?.

 

—¿A mí?— se rió ante la pregunta del ariano y lo besó.—. En absoluto, de hecho podría ayunar cualquier día.

 

—Bueno puedo desayunar en Jam....

 

Las palabras fueron interrumpidas por los labios del virginiano y su cuerpo sobre el del ariano.

 

Nunca era demasiado temprano.

 

Nunca era demasiado tarde.

 

... Continuará...

Chapter 17: Reencuentro.

Chapter Text

Capítulo 17: Reencuentro.

 

Mu,además de ser conocido como el santo de Aries ,era el reparador de armaduras y eso le hacía sentir una emoción interna que lo cubría completamente al estar en contacto con cada una de ellas.

Jamir era su lugar, en dónde estaba en conexión con todo su ser. Y aunque extrañaba el santuario, estar en la torre le hacía feliz pese al trabajo extenuante que tenía.

 

Un día muy largo le invadió cada músculo al ver por la ventana como el sol yacia sobre las nubes marcando el atardecer inminente sobre el pueblo. Porque si bien estaba acostumbrado, como todo reparador de

a dar su sangre para curar las armadura, el cansancio por la pérdida de la misma y la falta de comida le hacía efecto mostrando incluso unas leves ojeras bajo sus ojos.

 

Bajó su mirada y observó al pequeño Kiki cargando con piezas de armadura en sus brazos. Ese extrovertido y energético niño, al único que consideraba alguien tan cercano como su familia.

 

—¡Buenos días maestro! —la voz del niño resonó hasta la cima de la torre.

 

—¡Buenos días Kiki! —saludó Mu sonriendo.

El lemuriano bajó las escaleras de caracol, esperando reencontrarse con su alumno que ordenaba todo en la cocina trastabillandose , tirando cacerolas y utensilios en el camino. Normalmente él se encargaba de arreglar todo para las diferentes comidas, y Mu cocinaba solo que esta vez había tardado más de lo normal al traer las armaduras.

 

—Kiki...—. Le tomó las manos deteniendolo—. Yo me encargaré de esto el día de hoy.

 

El pequeño apartó su mano de las tazas y, retrocedió hasta llegar a una silla para apoyarse. Observó a Mu tomar la harina, junto a otros ingredientes para hacer lo que el pensó era un pan para la merienda.

 

—Kiki, quisiera si puedes traer ...

 

—El polvo de estrellas —dijo el pequeño llevando su palma a la frente para golpearla —lo siento maestro, yo...

 

—Debes intentar no distraerte en el medio, cuándo vas a buscar los elementos . Además de alimentarte y cuidar tu bien estar debes fortalecer tu mente para ser un buen caballero—. Recalcó Mu sin perder la serenidad a la vez que sus dedos se ovían sobre la ahora formada masa.

 

Después de esa leve llamada de atención, el pequeño se sintió muy avergonzado. Él quería que su maestro se sintiera orgulloso y está vez le había fallado sin querer. El pelirrojo respiró profundo y tomó un vaso en agua de la mesa para calmar sus nervios.

 

—Si le parece iré ahora, maestro —aseguró bajando el rostro con las mejillas coloreadas de rojo.

 

—No es necesario...

 

El pequeño le interrumpió levantándose y yendo hacia la puerta de la cocina. -Vuelvo enseguida para que merendemos, aún es temprano.

 

El guardián de la primer casa quiso responderle pero Kiki ya no se encontraba en el lugar. Suspiró profundamente y tapó la masa con una bolsa yendo hacia la mesada para lavarse las manos.

 

—¿Por casualidad aquí se encuentra, Mu el gran reparador de armaduras?. Porque necesito imperiosamente verlo.

 

—Puedo sentir tu enojo aún sin mirarte—terminó de lavarse los dedos y se dio la vuelta para encontrarse con el guardián de la casa de la virgen—. Bienvenido, Shaka de virgo.

 

—La misión...no ha estado del todo bien para mí gusto —afirmó acercándose al lemuriano que lo recibía en sus brazos para unir sus labios a los suyos chocando sus pieles con el peto de virgo.

 

—¿Qué pasó? ¿Estás bien?— unió sus tikis con preocupación observandolo.

 

—Si, pero no quiero hablar de eso, solo disfrutar este momento contigo—sus párpados cerrados le observaron cubiertos por sus largas pestañas rubias y acaricio su suave cabellera.—. Te extrañé.

 

El lemuriano le sonrió haciéndolo olvidar hasta de su propia voz, porque eso era lo único que necesitaba para sentirse mejor.

 

—Yo también te extrañé, mucho—besó una y luego otra mejilla para finalizar con un beso en su nariz que le hizo cosquillas.

 

—¿Quieres qué te revise Virgo?— se separó un poco para rozar la armadura extendida en el cuerpo del virginiano como si le estuviera hablando a ella más bien.

 

El hindu se rió por lo bajo.

Al lemuriano de golpe se le coloraron las mejillas—lo siento, es que pareciera que necesita un poco de amor ¿Sabes?.

 

—Yo necesito un poco de eso así que puedes revisarme también a mí cuando vengas a Virgo— le sonrió acercándolo desde sus caderas suavemente.

 

Las mejillas se coloraron aún más y soltó un leve jadeo—. No necesito ir a virgo para eso — le susurró tímidamente.

 

—Necesito cambiarme, y ordenarme un poco antes de eso— le sonrio corriendo un mechón lila de su rostro.

 

—¿Quieres qué lo haga aquí, Shaka?

 

Los nervios invadieron el cuerpo del lemuriano,de repente el cansancio no eran tan grave para imaginarse en las pieles del hindú y eso le hizo sonrojar nuevamente de la vergüenza.

 

Los zafiros de Shaka salieron de entremedio de sus párpados y sus labios se curvaron de manera juguetona —¿Cómo dices?.

 

—Te mostraré , sólo quédate aquí por un momento— las mejillas del lemuriano ardían por el tono que había empleado en la pregunta.

 

Así lo hizo. El hindú se quedó quieto en su lugar esperando algo ansioso,por el lemuriano que se había apartado a un rincón. Al volver extendió ante el virginiano un estuche marrón con unas herramientas dentro.

 

—¡Confias en mí? —le sonrió con ternura tocando sus herramientas.

 

El hindú paseaba sus ojos por los dedos del lemuriano que se movían con tanta delicadeza que le hizo estremecer por algún motivo, y enseguida el cosmo del ariano le invadió por completo. Se quedó mirando como la energía lo cubría tanto a él como a su armadura.

 

—No es necesario que lo preguntes Mu. Claro que confío en ti, y al parecer virgo también lo hace.

 

Sus palabras fueron en un tono serio, casi altanero aunque no era a propósito, para el virginiano no era extraño hablar de ese modo incluso hasta con Mu, a quién amaba tanto.

 

Las manos del lemuriano se movían casi imperceptibles aunque los ojos de Shaka podían verlas como si estuvieran en cámara lenta,colores brillantes se intercalaban en sus falanges junto a sus herramientas, y finalmente hizo presencia un martillo.

 

Un zumbido le invadió los oídos.

 

Seguido por un ruido que fue creciendo y envolviendo su

.

 

Las esmeraldas estaban centradas y sus tikis unidos. Sus pestañas lilas cubiertas por brillos,un brillo único que jamás había visto y su cuerpo se cubrió de un calor que crecía. Las estrellas cubrían sus iris creando una supernova dentro de las esmeraldas, latentes, ybrillantes abiertas ante él.

 

El pecho del guardián de la primer casa subía guardando el aire entre sus labios, resecos que humedeció levemente con la punta de su lengua que le invitaba a tocarla, luego exhaló corriendo un polvo dorado que cayó a sus pies.

 

Su cosmo ardía,le envolvía y le sugeria hacer lo mismo. Le es inevitable, virgo envolvía a aries cuando sus mejillas se cubrieron de puntos rojos haciéndolo sonreir.

 

—Increible— confiesan sus pensamientos en un hilo entre cortado.

 

Su pecho retumbaba ante cada toque de aquellas niveas manos que se mudaban en varios lugares , sintió a virgo vibrar en sus pieles a la vez que él mismo lo hace.Una nueva sensación lo tomó por completo mientras observaba el siguiente movimiento. Sus pestañas rubias temblaban, sus piernas temblaron y su mirada se movió en la galaxia que se extendía ante él.

 

Su sexo vibraba debajo del dorado coloreado por la nova , las vendas cayeron exponiendo cicatrices en los brazos que le envolvían, y entonces un corte tajante dejó caer la sangre escarlata sobre él.

 

El cuerpo del ariano se contrajo y sus ojos se unieron a los del virginiano en una conexión enérgica mientras sus rojos cubren el oro. Sus labios se separaron exhalando el calor acumulado en sus bocas,que chocan en un vapor.

 

Sus pechos se agitaron cuando su armadura respondió a la sangre de Mu y brilló. Una luz incandescente le obligó a achicar sus ojos como si del mismo sol se tratara de colar entre sus pestañas. Un escalofrío lo recorrió desde los pies hasta la cabeza haciéndole erizar los vellos.

 

—Acabé — susurró el lemuriano rozando sus labios.

 

El hindú observó sus botas,relucientes y a medida que subía por el brillo dorado reconoció el renacimiento de virgo por aries. Se mojó los labios y las vendas volvieron a las muñecas del lemuriano coloreando el blanco por el rojo en un jadeo.

 

—Ahora si está bien.

 

—Mu...

 

Los labios de Shaka casi no se movían, sin embargo sus manos fueron hacia la nuca de Mu para acercarlo y apoyar sus labios en los suyos para besarlo dulcemente. Un beso de amor.

 

—Impresionante.

 

—Cállate —se sonrió en sus labios— para mí es un honor hacerlo con virgo.

Shaka se sonrió para separarse— deja de decir eso Mu, me haces pensar en muchas cosas menos lo que acabas de hacer.

 

—Te dije que también podría hacerlo. Deseo en realidad....— susurró arreglando sus herramientas.

 

—Habrá que esperar, por cierto...huele muy rico—soltó sentándose en la silla de la cocina.

 

—Ah, yo...estaba haciendo unas galletas para Kiki —dijo con tranquilidad acordándose que debía ponerlas en el molde y al horno.

 

El virginiano diviso un pequeño lío sobre la mesa; un paquete de harina abierto a la par que se esparcía por el lugar,manteca,aceite,agua....esto le hizo sonreír. Mu era siempre muy ordenado pero parecía que hoy se habia dedicado poco tiempo a ello, claramente no esperaba su visita.

 

—¿Interrumpí?—inquirió seriamente a la vez que terminaba de quitar su armadura—. Puedo irme si quieres.

 

—No—negó con la cabeza apoyando un boul en la mesa—tú nunca interrumpes Shaka—le sonrió a la vez que pasaba su pulgar por la nariz del virginiano dejando un poco de harina en ella.

 

El hindú arrugó su nariz y abrió sus ojos cubriendo las esmeraldas brillantes ante él.

 

—¿Juegas conmigo,Mu?—le sonrió divertido—. No te conviene, estoy cansando pero no tanto.

 

—Igualdad de condiciones —le sonrió traviesamente elevando uno de sus tikis —¿crees poder ganarme?.

 

—No creo. Estoy seguro de ello.

 

Tomó un poco de harína en sus palmas y le tiró en la cara. Su rostro niveo se cubrió de polvo junto a sus pestañas.

 

.... Continuará....

Chapter 18: Tú eres mi avellana.

Chapter Text

Capítulo 17: Tú eres mi avellana.

 

Los caballeros estaban cubiertos de harina y algunas gotas de sudor por lo que venían haciendo. Se sonrieron a punto de rozar sus labios al chocar sus cuerpos en un abrazo que cerraron con sus brazos encerrandose mutuamente entre sus pieles.

 

—Te gané—. Le susurró el virginiano al oido tirando su cuerpo sobre el del ariano que semi reposaba en la mesada haciendo que sus manos se aprieten entre la cintura y la madera.

 

Las manos de Mu se apoyaban en la madera y por sobre ellas se mudaron las de Shaka aprisionandolas con sus dedos sobre los suyos. El virginiano posó sus labios en los de él ariano dándole un pequeño y sonoro beso haciéndole sonrojar.

 

—No creo, más bien se terminó la harina que no deberíamos haber ...— intentó decir el lemuriano que fue acallado por un dedo del hindú sobre sus labios.

 

El rubio lo observó con sus zafiros brillando por sobre las esmeraldas,tomó su mentón entre sus dedos y el contacto de su piel le dio escalofríos.

 

—Dilo Mu...—. Dijo seriamente sonando como una orden que le erizó la piel al ariano.

 

Esa voz. Su voz. La manera dulce, y seria a la vez que le regalaba siempre ocasionaba estás reacciones de su parte.

 

—Las galletas...—. Dijo a la vez qué se escapaba por debajo de sus brazos sorteando los dedos de Shaka y las controlaba en el horno.

 

El hindú se sacudió un poco la ropa haciendo caer el polvo al suelo, y se sonrió.

 

—Te aceptaría un té.

 

—Qué casualidad porque justo el agua está lista— le sonrió poniendo las tazas en la madera.

 

El hindú hizo una mueca de placer al oler la infusión cuando se la dió. —Viene más que bien después del día de hoy y en tu compañía ya es demasiada benevolencia por parte de Buda.

 

El lemuriano se sonrojó bebiendo un sorbo de té delicadamente . —Shaka... Tú eres demasiado.

 

Una curvatura apareció en los labios del virginiano y estiró su mano hasta el lemuriano tomando la suya.

 

—Ven aquí.

 

Lo atrajo hacia él, sentandolo más bien sobre sus piernas. Tomó una de sus manos y le besó el dorso con ternura. Aquel gesto, el roce de sus labios calientes por el té con su piel le hizo sonreír instantáneamente.

 

—Tengo algo aquí, para ti.

 

—¿Para mí?—. Unió sus rubias cejas dejando ver su bindi sobre ellas.

 

El ariano posó su torso por sobre la mesa para tomar un cuenco que había allí, dentro del mismo el hindú observó que habían avellanas y chips de chocolate blanco.

 

—Las compré pensando en hacerte algo con ellas pero, me di cuenta que en realidad no sé si te gustan—, elevó uno de sus tikis y una de sus comisuras. Tanto había aprendido y conocía a Shaka, sin embargo algunas pequeñas cosas se le escapaban—. Así que....

 

El ariano tomó de aquel cuenco una avellana, y la introdujo en los labios del virginiano con suavidad. Metiendo aquel fruto por entre medio de sus labios semi abiertos para introducir la en su totalidad terminando con sus yemas con algo de saliva del hindu. Seguidamente el paladar del virginiano se inundó de un sabor ligeramente amargo, aunque a medida que masticaba sentía un sabor dulce que restaba en su boca, poco a poco para dejarle un sabor tostado al final.

 

Shaka tragó los pedacitos acumulados en su lengua y le sonrió. —. Me gustan, aunque de tus dedos saben mucho mejor, tienen en parte tu sabor que no podría rechazar nunca Mu.

 

El ariano se sonrojó—, y estos los hice para ti.

 

Las falanges del ariano volvieron a sus labios pero está vez acercandole un chocolate,y aunque ya sabía que no le agradaba mucho le dejo hacer. Al introducirlo no sintió lo mismo que con la avellana, para empezar aquella bolita de chocolate al inicio permaneció intacta, sin embargo a los segundos que comenzó a deshacerse en su boca se dió cuenta qué no era un simple chocolate sino que sabía a algo más al terminar de derretirse en su lengua, y, no sólo eso sino al tragar se mezclaba con el sabor anterior del fruto seco dejándole un dulzor en sus labios.

 

—¿Qué es?— preguntó curioso relamiendo su labio levemente.

 

—¿Te sorprendí?— se rió mostrando sus dientes—. Es chocolate pero mezclado con orquídeas y sirve para fortalecer el espíritu. No es qué lo necesites pero... pensé en ti al hacerlo por la meditación además, qué mejor qué un dulce con algo natural para un hombre tan cercano a Buda, ¿No te parece?.

 

—¿Lo hiciste tú?— el virginiano sonó sorprendido— eres un buen cocinero, y que hayas pensado en mí al hacerlo me resulta un honor.

 

—Lejos de sonar un creído, te confieso que puedo hacer más cosas que esas, deberías quedarte a comer un día con Kiki y conmigo— le sonrió.

-¿Me estás pidiendo una cita formalmente, Mu?.

El lemuriano se sonrojó. Dicho así era cierto, jamás habían tenido una cita propiamente dicha. —Claro, bueno me gustaría que aceptaras.

—Me encantaría.

Le respondió sorprendiendolo, ya que si bien Shaka era muy demostrativo con él no era algo que sucediera con el resto, incluso en frente de otras personas tampoco era tan demostrativo como en la soledad de ambos.

Sólo en la privacidad se permitía ser aquel hombre que invadia sus pensamientos y tomaba sus sentimientos más puros y livinidosos.

—Haces un buen trabajo con tu discípulo. —. Observó sacándolo de su ensoñación.

—A veces crecen algunas dudas en mí pero hago todo lo que puedo por él. Después de todo soy lo único que tiene y es un lemuriano como yo así que compartimos más cosas de las que piensas. —. Apartó su mirada la cual posó sobre los frutos secos y el chocolate mezclado cómo si su mente fuera hacía algún lugar más profundo.

—Cuándo vine a Jamir la primera vez, sentí en él un gran cosmo, aún le falta madurar pero lo tiene y habla muy bien de tí que sepas apreciarlo.... qué le enseñes y lo guíes.

—Será un gran caballero, es muy amable y contemplativo. Le gusta aprender y tiene habilidades. De hecho aprende muy rápido, incluso el arte de reparar

, espero en un futuro llegue a superarme y poder tomar mí lugar.

El virginiano le dio vuelta el rostro desde su mejilla para mirarlo a los ojos. —Escucharte hablar así de él me produce un gran orgullo Mu.

—¿Estás orgulloso de mí?. —. Unió sus tikis y volvió a sonrojarse. Las dedicaciones de parte del virginiano le hacían cosquillas en su pecho, en parte él también se sentía orgulloso de Shaka y le admiraba aunque no se lo dijera tan seguido.

—Claro. —. Pasó una de sus manos por su mejilla hasta sus labios y se le curvó un labio hacia arriba. —Practicamente te conozco desde pequeños y siempre supe que serías un excelente caballero, Mu de Aries.

—Shaka...

Sus ojos verdes se cubrieron por una capa de agua que se acumulaban en sus lagrimales, y se unieron a los zafiros por varios segundos,en una mirada de unión y comprensión. Las palabras del hindú habían inundado el corazón del ariano pasándole una sensación de tibieza en su pecho a la vez que lo atraía hacia su cuerpo encerrandolo en sus brazos.

Rozarlo, abrazarlo, escucharlo, sentirlo era lo que el lemuriano más amaba. Fuera el momento que fuera.

De repente el hindú se separó,tomó una avellana y la observó en sus dedos. —¿Sabes el significado de las "Nux abellanas", Mu?.

El guardián de la primer casa elevó uno de sus tikis al escucharlo hablar en latín y lo imitó observando el pequeño óvalo con matices marrones como si ese fruto seco estuviera a punto de revelar un dato de vital importancia.

El marrón resaltaba en los dedos blancos del hindú haciéndolo parecer brilloso, como si alguien lo hubiese lustrado.

—Antiguamente servían para consiliar los malos tiempos y ayudaba a tomar desiciones correctas...—Dijo algo dudoso el peli lila.

—¿Piensas que debo tomar alguna decisión Mu?. — Lo observó de refilón.

—No. — Negó con la cabeza moviendo algunos cabellos lilas en su rostro .

—¿Entonces? ¿Por qué decidiste qué era lo correcto hacer algo para mí con ellas?. — El tono serio de Shaka invadia nuevamente la cocina creando un momento de silencio luego de sus palabras.

Los labios de Mu apenas se abrieron,mientras los dedos del virginiano introducian aquel fruto de una manera que le pareció de repente poco pura en su boca. El lemuriano no podía dejar de mirar sus yemas sobre sus labios y se sonrojó.

—Porque su esencia se parece a ti. Ya que los que pueden establecer un contacto con ella tienen la sabiduria del universo. Tu mirada me hace sentir en medio de todas las galaxias, tú eres mí avellana Shaka.

Los labios del lemuriano temblaron levemente para luego encerrar el fruto entre ellos y meterlo finalmente en su boca sintiendo el sabor invadiendo su paladar. Y si, un poco sabía a Shaka.

—Además el avellano es el árbol de Virgo, por eso compré una valla también para poder tener una parte de ti siempre conmigo.

Las palabras del ariano le sorprendieron,sabía que era dulce con él porque siempre que podía lo demostraba con sus acciones pero escuchar aquellas palabras le hicieron vibrar el alma y su cosmo se enaltecio cómo sus emociones.

—Yo estoy siempre para ti, Mu, aún cuando estamos lejos.

El hindú beso sus labios con suavidad mientras sentía como el lemuriano le correspondía aún con algunos restos de la fruta en su boca aunque no le molestaba. Acarició sus cabellos mientras las manos de Mu subían y bajaban suavemente por su espalda. Un beso suave que subía de intensidad obligandolos a separarse para tomar aire.

... Continuará...

Chapter 19: Una merienda con sabor a ti.

Chapter Text

Capítulo 18: Una merienda con sabor a ti.

 

Sentado sobre las piernas de Shaka, abrazados y besándose con tanto anhelo hizo que el calor se intensifique en sus cuerpos.

 

Los labios de Shaka se apoderaban de los labios de Mu de una manera intensa, su lengua demandante pasaba por la suya, acariciandola, tomándola apasionadamente para encerrarla en su boca y a la vez una de sus manos sujetaba su nuca con sumo cuidado atrayendolo hacia él haciendo crecer el deseo inevitable en el cuerpo del ariano.

La manera en la que simplemente el hindú le hacía olvidar de todo a su alrededor con el simple roce de sus labios era inexplicable. Las manos de Mu se movían por debajo de las suaves telas empolvadas del rubio para acariciar su cintura y luego mudarse a sus abdominales que vibraban bajo sus dedos.

La excitación comenzó a hacerse notar en ambos cuerpos: desde sus mejillas coloradas, a su respiración agitada y sus besos más húmedos hasta juntar sus lenguas en el poco espacio que separaba sus rostros.

 

Los labios de Shaka se movían por las mejillas rosadas del lemuriano hasta su quijada para seguir hacia su cuello que le invitaba a depositar pequeños besos que mezclaba con toques de su lengua dejando humedad en las pieles blanquecinas de su amado aries que jadeaba del placer que le proporcionaba. Mu quería ver el rostro del hindu que seguramente está cubierto por el goce pero sus párpados se cerraban irremediablemente con cada acto que el rubio hacía.

La inocencia había pasado a un lado hace muchos días atrás sin embargo el lemuriano tenía esa ingenuidad en cada caricia proporcionada a Shaka que le hacía encender más.

—Mu…—. Le susurró al oído a la vez que pasaba su lengua delicadamente por su lóbulo haciéndolo encorvar sobre él.

 

—¿Mhm?. —. Un suspiro salió de sus labios mientras ladeaba su rostro mezclando su boca con las hebras doradas del hindú.

—Te deseo.

El lemuriano entendió el mensaje, a medida que el virginiano bajaba la tela que cubría su hombro, para darle besos notablemente suaves.

Yo… También…—. Los jadeos del ariano se intensificaban más, por cada beso que el otro le daba, provocando que su sangre fluya por cada una de sus venas hasta su estómago—Pero estoy todo ...sucio.

—Mu...—. El hindú subió su rostro para enfrentar al ariano y le sonrió —Estás riquísimo.

 

Esas palabras dieron paso a qué el ariano se dejara llevar cómo tantas veces antes solo que en esta ocasión podía notar el cuerpo de Shaka con tanto afán que le sorprendió.

 

El virginiano lo corrió de encima suyo, haciéndolo apoyar sobre la mesada nuevamente como al principio, le sonrió preso del deseo que sentía al verlo tan apetecible frente a él con sus ropas corridas.

Las manos del hindú viajaron a través de la silueta del lemuriano hasta sus caderas y bajo sus pantalones hábilmente dejando su miembro erecto frente a él.

El virginiano observó sus ojos arrodillándose ante él lo que provocó que el rostro del ariano se enrojeciera y sus manos apretaran la madera con ganas. Es que ver Shaka de ese modo le resultaba tan excitante que sentía como su sexo temblaba ante él tanto o más que su piel .

El virginiano acerco su boca al pene del lemuriano, rozando con sus labios la punta, y acariciando un poco la piel alrededor haciendo que un choque eléctrico cubriera las pieles del ariano porque sin importar cuántas veces lo hicieran la agitación lo cubría por completo.

Shaka introdujo el miembro de Mu en su boca, lentamente, para lamerlo con suavidad llenando cada espacio con su saliva que escurria por la comisura de sus labios a medida que movía su cabeza hacia las caderas del lemuriano.

El placer invadió el bajo vientre de Mu que decidió tomar la cabeza del rubio para enredar sus dedos en la cabellera dorada y detener su movimiento al sentir como su erección se hichaba más en la cavidad de su amante.

Pero a Shaka le gustaba tener el control así que por el contrario aumentó sus movimientos sacándole gemidos y jadeos a los labios del guardián del primer templo que apoyaba su cuerpo a la mesada con su cabeza hacia atrás hasta que inevitablemente inundó su boca con el líquido espeso de su livinidad.

Miraba los párpados que ocultaban las esmeraldas que se perdieron por aquel orgasmo que le dejo semen escurriendo en sus labios y se sonrió ante ese hecho.

Subió hasta su rostro con un placer ardiendo en sus zafiros, y lo beso sin pensar. El ariano respondió ante aquel beso, notando como algo de su semilla restaba en la boca del hindú sin embargo no le importó, al contrario aquello pareció encenderlo más marcando que aún no se terminaba allí aquel encuentro.

El rubio le dio la vuelta haciéndole sentir su masculinidad en toda su extensión mientras rozaba sus pezones por detrás a través de sus ropas aún más bajas haciéndolo jadear ante su agarre de caderas, besó su cuello entremezclando su saliva con algunos cabellos lilas hasta que llegó a sus labios mezclando sus lenguas en un juego de saliva.

El lemuriano se giró sobre sí mismo sin dejar de besarlo y lo guió hasta el suelo por la puerta de la encimera. Sus dedos enredados en los cabellos dorados le obligaban a mover su rostro para besarlo más profundamente explorando aquella abertura que tanto deseaba y no se cansaba de besar.

Ambas erecciones chocaban en este momento a medida que el lemuriano se posicionaba sobre la falda del hindú rodeando sus caderas con sus fuertes piernas.

Shaka le quitó la camisa por completo y besó su pecho con hambre mientras el lemuriano quitaba la suya. Los invadieron, muchas, demasiadas ganas de tomarse por completo. Ambos caballeros se encontraban desnudos a esyte punto, uno sobre el otro besándose, mordiéndose con delicadeza y acariciandose.

 

El ariano rozaba la masculinidad del virginiano y viceversa,ahora la erección del lemuriano había vuelto a ponerse dura sobre el estómago del hindú. Es que sentirse en sus pieles les provocaba ese sentimiento de mutua pertenencia.

 

—Soy tuyo. — . Susurraba el ariano moviéndose en las caderas del hindú.

 

Y yo tuyo. —. Jadeaba el virginiano hundiendo sus falanges en la espalda del lemuriano.

 

Las manos de Shaka se movieron hacia la entrada de su amado cubiertas por una capa de saliva que él mismo había proporcionado. El lemuriano gimoteó suavemente,y el hindu fijó su vista en las esmeraldas anhelantes que le observaban con pasión entre hebras lilas desacomodadas sobre su rostro.

 

El deseo cubría las pieles y el pecho del hindu que elevó un poco el cuerpo del ariano penetrandolo suave y profundamente. Las manos del ariano se apretaban en sus hombros, mientras de sus labios salían suaves gemidos provocando jadeos en los suyos propios que acallaban los labios del lemuriano con un nuevo e incendiario beso.

El virginiano se movía lento para que el lemuriano disfrute de cada embestida que le proporcionaba lo cual era confirmado por su rostro,por sus gemidos y respiración agitada que chocaba con sus labios.

Los jadeos de Shaka se volvían más intensos al estar completamente dentro del tembloroso cuerpo de Mu, cubierto de placer a la vez que una de sus manos tomaba su cintura mientras que la otra se sostenía de un cajón de la mesada para acomodar sus movimientos en la estrechez del lemuriano.

Dos dedos del peli lila viajaron a los labios del hindú para meter su yema entre ellos provocando que los muerda levemente ante las embestidas que le proporciona a medida que su respiración aumenta haciéndole sentir su aliento en sus fosas nasales y que su erección se endurezca más dentro suyo.

Con cuidado, fue aumentando las estocadas, solo un poco más rápido, para ver la reacción del lemuriano que respondió encorvando su espalda y tirando su cabeza hacia atrás con gemidos que inundaron la cocina. El rubio tomó las caderas con algo más de fuerza, marcando sus dedos en ellas mientras las atraía hacia sus caderas deleitándose con el sonido lascivo de sus cuerpos húmedos, calientes, chocando, chorreando.

El virginiano soltó sus caderas, y tomó la erección del lemuriano con un movimiento rápido de sus falanges sobre su tronco haciendo que arqueara más su espalda, y apoyara su mano sobre la suya para sostenerse con un poco de fuerza de más pero no importaba porque buscaba que el placer le inundara por completo.

—Sha… Ka… aah.

Los gemidos del ariano junto a su nombre en sus labios le hacía enloquecer y las estocadas se volvían tan profundas, tocando el punto especial del ariano, haciendo temblar sus piernas que no ceden gracias al agarre de sus manos, una sobre la de Shaka y la otra en la encimera.

—¿Te gusta?.— . Le preguntó jadeando el hindú.

 

—Si…—. Le susurró el lemuriano con sus cabellos pegandosele al cuello a su pecho y a su espalda.

—¿Cómo puedes ser tan hermoso Mu?. —. Preguntó retóricamente el hindú admirando la mirada obscena que le dedicaba el guardián de la primer casa.

Duraron así algunos minutos más, en dónde las embestidas se volvieron más rápidas y profundas, para luego volverse lentas y suaves.

—¡Aashghh...Shaka voy...a ..acabar…—. Confesó el ariano con las mejillas ardiendo y su erección palpitando en las falanges del hindú.

—Hazlo… Mu…—. Le ordenó el rubio inundado en el placer .

De repente las vibraciones en sus falanges de aquel miembro duro que observaba con sus zafiros entrecerrados lee sorprenden gratamente.

Sus movimientos se volvieron más rápidos acomodando también sus embestidas que le hicieron tirar el cajón que sostenía cuando tuvo que tomar la cintura del ariano con sus dos manos que lanzando un gemido de sus labios lleno su mano de semen.

Shaka sintió el ardor en sus entrañas y su erección hinchandose en interior del ariano le avisaba que en cualquier momento iba a terminar dentro suyo. El hindú lo pegó más a su cuerpo, para la última estocada, la cual logro hacer que el rubio tenga un orgasmo que lo dejo jadeando, con la respiración muy agitada aunque no soltó por nada sus manos de la cintura del lemuriano que lo sostenían aún pegajosas por sus jugos.

No deseaba salir de Mu, pero necesitaba abrazarlo,besarlo así que salió con cuidado de las pieles sensibles del lemuriano para acomodarlo sobre su cuerpo.

Tomaba con cuidado el cuerpo desnudo y sudoroso del pelilila, observandolo con dedicación. Y le dio un beso, dulce dónde sus labios se encontraron con tranquilidad uno sobre el otro.

—Tengo.....que acomodar esto antes que venga Kiki, ¿te quedas a comer entonces?. —. Le susurró el ariano en su oído aún agitado.

—¿Hoy? Bueno,si. Me quedo. —. Sonrió por encima del hombro del lemuriano mezclandose con sus cabellos lilas.

 

.... Continuará...

Chapter 20: Traición o impulso.

Chapter Text

Capitulo 19:Traición o impulso.

 

Habían pasado una comida amena junto a Kiki y Mu no mentía cuando dijo que era un buen cocinero. A Shaka le parecía agradable la idea de pasar varios días comiendo juntos aunque él no era muy sociable al final pasar esos momentos con alguien externo a ellos dos no había sido un problema mayor.

 

—Entonces viniste porque el patriarca te lo ordenó. —. Le dijo uniendo sus tikis.

 

—Claro que no, Mu.

 

—Shaka... — Le sonrió tomando los platos sucios para ponerlos en la pileta. — acabas de decirme qué tuviste una charla con él en la que incluyó mí nombre.

 

— Sé lo que dije. En realidad sólo fui a dar mí informe sobre la misión. Tu nombre salió junto al de Milo y Camus.

 

—¿Milo y Camus?. — Lo miró extrañado.

 

El hindú afirmo con la cabeza. —Como te dije di el informe de cómo resultó la misión. Y él me dijo que había enviado a Shura a Siberia para vigilar a Camus y Milo.

 

Shaka bebió un sorbo de agua, no le gustaba pelear con el ariano aunque tampoco quería que lo cuestionara porque eso le hacía desconfiar y en el fondo, no podría pensar mal de su amado lemuriano.

 

— Y te pidió que vengas.

 

—No.— Suspiró. — Vine porque....— Las pestañas del rubio encerraban sus zafiros azulados y carraspeó antes de continuar lo que estaba diciendo. —Te digo que hay una energía extraña en el santuario y que deberías pasar por aries. De paso eso ayudaría con las dudas qué el patriarca tiene sobre tu situación.

 

—Gracias pero me basta con que Athena lo sepa. — soltó el ariano mientras sus manos traían unas tazas de té.

 

El virginiano suspiró y movió su cabeza haciendo danzar sus cabellos rubios. — Cómo prefieras.

 

—¿Y tú, Shaka?. — Tomó un sorbo de té—. ¿Desconfias de mí?— preguntó.

 

El virginiano abrió sus ojos exponiendo sus zafiros sobre las esmeraldas haciendolas esconder un poco entre las pestañas lilas.

 

—¿Crees qué estaría contigo si desconfiara de alguna manera?.— Le sonrió sin dientes — pero Mu, si yo siempre voy hacia ti.

 

— ¿Y si el patriarca no tiene razón?.— expuso el ariano.

 

—¿Sobre qué?.

 

—Sobre dudar de nosotros.

 

—No es que dude. Ustedes se comportan extraño según su visión y él sólo hace su trabajo.

 

—¿A caso no lo sabes?.— dijo increudlo el lemuriano.

 

—¿Qué cosa?— unió sus cejas rubias encerando su bindi entre ellas.

 

—No puedo decirtelo. —Le sonrió con tristeza. — perdoname pero tienes que averiguarlo solo, Shaka.

 

El hindú acortó la distancia,y tomó tiernamente una muñeca de Mu—¿No confías en mí?

 

El ariano entrelazo sus dedos en los suyos. — Más bien parece qué tú no confías en mí.

 

Shaka lo miró muy profundamente. —Si eso fuera cierto,me refiero a lo que siente el patriarca de ustedes. — acercó su rostro y miró sus esmeraldas brillantes qué sabía le ocultaban algo— espero qué no....porque yo...

 

Tragó saliva ruidosamente—me matarías, ¿Cierto ?

 

—Si tu fueras.... un traidor. — escupió la última palabra con asco. —No quisiera ni pensarlo Mu.

 

—Si yo fuera un traidor según el patriarca. — le corrigió — no me contestaste, Shaka. ¿Me matarias?

 

El silencio se apoderó por unos segundos aunque a Mu le pareció una eternidad hasta que los labios del hindú se abrieron casi imperceptiblemente.

 

— Sin dudarlo. — contesto frío. El tono serio de Shaka,pero aquel que no le gustaba al lemuriano. Porque cuando hablaba de ese modo sólo podía significar una cosa, qué estaba seguro de lo que decía. — los traidores no merecen perdón.

 

— Pero crees qué lo soy de alguna manera, porqué en vez de estar en Aries estoy haciendo mí trabajo en Jamir reparando armaduras— el tono serio del lemuriano de marcó hasta en sus comisuras endureciendolas.

 

—No — negó con la cabeza para mas énfasis volviendo a encerrar sus zafiros entre sus rubias pestañas.

 

Mu se rió sin ganas—No te creo. — soltó a la par que apartaba su mano del enganche de la de Shaka.

El virginiano unió sus cejas en confusión y abrió sus ojos. Estiró sus manos para encerrar la barbilla de Mu y lo atrajo hacia él haciéndole sentir su fresco aliento.

 

— Escúchame bien Mu, no dudaría de ti, jamás.

 

Los labios del lemuriano se apoyaron en los del hindú al sonreír, y se unieron en un tierno beso. La calidez del cuerpo del hindú le traspasó a su pecho haciéndolo llegar a sus mejillas,se separó levemente para respirar y volver a besarlo,un poco más profundo. El hindú sonrió y pasó su lengua por cada labio del lemuriano dejando humedad sobre ellos para finalizar dándole un beso en su mentón.

—No me hagas esto…— susurró el lemuriano entre ruidos creados por sus fluidos.

 

—No te hago nada, que no desees o deseemos. —. La boca de Shaka se escurrió por su cuello,separando la tela de su ropa para exponer su clavícula y besarla varias veces.

 

—No podemos aquí....—. Las manos de Mu atraparon la cabellera de Shaka, separando cada hebra con sumo cuidado entre sus falanges. — . Espera...—Dijo entre jadeos.

 

—No parece qué quieras que me detenga —le dijo entre algunos cabellos lilas que se colaron entre sus labios — Más bien, yo no quiero detenerme.

 

— No quisiera pero Kiki sigue dando vueltas por aquí y ...Ahg.—. Gimió al sentir un pequeño mordisco en su piel.— Shaka...—Le apretó su rostro contra sí.

El virginiano se separó con dificultad, y acarició su barbilla.

 

—Esta bien.

 

-—No tenías que detenerte tan rápido . —se rió agitadamente.

 

—Siempre te dije qué cuando me dijeras que frenará lo haría y eso es lo que hice. — le sonrió y cerró sus párpados.

 

—Hubiera esperado que seas más insistente Shaka de virgo. — Le espeto acercándose a su cuerpo.

 

El ariano acarició su torso, subiendo y bajando su mano con ternura para meterla dentro de su ropa y sentir su piel caliente debajo. Sintió un jadeó por parte del hindú y se sonrió besando su comisura.

 

—Esto no parece ser muy adecuado para un Santo, ¿no crees, Mu?.— Le dijo divertido.

 

—Santo es una forma de decir querido Shaka. —bajo su mano hasta su bajo vientre por entre su ropa hasta acariciar sus abdominales y luego tomar su masculinidad, apretandola entre sus falanges — ¿Esto es adecuado para ti?. — se sonrojó ante su atrevimiento.

 

El hindú se rió aunque su bajo vientre vibró ante el contacto del lemuriano e hizo un mohin— No quisiera socavar tu inocencia.

 

El lemuriano elevó uno de sus tikis y se mordió el labio para luego lamer los labios del hindú. — No soy inocente— dijo a la vez que atrapaba un labio y otro entre los suyos recibiendo una respuesta igual de ansiosa que la suya.

 

—A mí me pareces muy inocente. — el hindú tomó su barbilla entre sus manos para tirar su cabeza hacia atrás y besar su niveo cuello que palpitaba bajo el camino que su lengua creaba por toda esa suave zona.

 

Mu suspiró, jadeo y se arqueó ante sus besos. Estiró más su mano y la metió entre la ropa interior del hindú sintiedo cada uno de sus rubios vellos entre sus falanges hasta llegar a su falo que comenzaba a ponerse duro ..

 

—¿Te parece que soy inocente?— bajó su rostro y se dirigió a sus labios mordiendo el inferior y luego el superior atrevidamente.

 

—Si, h esa es una de las cosas que más me gustan de ti. —. Lo miró a los ojos que estaban cubiertos por una capa húmeda.— pero si continúa no voy a poder detenerme jóven caballero y sería un problema si llegase a aparecer su alumno y nos viera aquí desnudos uno sobre el otro.

 

—¡Oh!— la piel de Mu se estremeció porque en su mente le invadió la imagen de su piel sobre la suya,tomándolo nuevamente sobre la mesada y en el suelo y dónde él quisiera— no me digas jóven caballero. —Le imitó el tono .

—¿Por qué? Si eso es lo que eres.

 

—Porque me hace estremecer dicho por ti.—. Le susurró .

 

—Entonces no dejaré ser decirte jóven caballero, me gusta tu piel erizada. —Le dijo mientras sus manos cubrían sus brazos, su silueta por debajo de su ropa hasta llegar a sus caderas apretandolas con sus yemas.

 

Mu lo atrapó con sus brazos y lo besó. —Vamos a otro lado mejor.

 

La saliva bajo de manera forzosa por la garganta de Shaka y asintió con la cabeza dejándose llevar.

Shaka se contuvo muy a su pesar de llena aquel cuerpo de besos en ese pasillo por dónde lo llevaba hasta que cruzaron una puerta que reconoció por haber ido antes: el baño.

 

Entraron y comenzaron a quitarse la ropa muy lentamente. Lo primero que se quitaron fueron las camisas,las manos del lemuriano se chocaban con las del hindú y se sonrían entre pequeños besos en sus labios.

De repente los labios de Shaka aprisionaron el cuello del ariano con un pequeño ruido de los mismos y su saliva. El ariano jadeó a la vez que sus manos se enredaban en los rubios cabellos del hindú . El virginiano se mudó por las niveas pieles que tanto le gustaban,pasando por el recoveco de su garganta hasta su pecho marcado ,dirigiendose a uno de los lugares que más le gustaban del ariano. Sus pezones, qué : besó, chupeteo y mordisqueó dejándo una aureola rosada al rededor de ellos.

 

El lemuriano se estremecia,encerrando al cuerpo del hindú entre sus brazos, apretandolo hacia su pecho que se encorvaba para acercarse más a él, sus dedos se movían por la espina dorsal del rubio que jadeaba en las pieles de Mu.

 

...... Continuará....

Chapter 21: Inesperado.

Chapter Text

Capítulo 20: Inesperado.

 

El ariano se separó un poco del hindú. — Permíteme un momento. — suspiró al darse la vuelta.

 

Abrió la canilla y las manos del virginiano le rodearon por detrás dejándole sentir la extensión de su cuerpo sobre el suyo, tomó sus manos con sus palmas, acariciandolas y apretandolas con dulzura. Giró su rostro e introdujo su lengua en la boca del virginiano qué la recibió con gusto, con deseo creando un hilo de saliva que cayó hacia el mentón del lemuriano mientras jadeaba más sonoro en la cavidad del hindú.

Las manos de los caballeros volvieron a mezclarse para quitarse los pantalones mutuamente de manera algo torpe,medio enredandose por la ansiedad qué les cubría.

 

—Nunca me habia costado tanto desvestirme. — confesó el hindú algo molesto.

 

El lemuriano se rió— ¿Será qué te hago sentir nervios?.

 

— Tú...— tomó su cuello con una mano para acercarlo a sus labios— me haces sentir muchas cosas menos nervios Mu de aries.

 

El ariano se sonrojó mientras unas gotas de sudor caían por su nuca y frente. — yo me sigo poniendo nervioso contigo sin ropa aunque ya te conozca.

 

Shaka se sonrió y le observó con sus celestes ojos entre sus rubias pestañas. — haces muy bien porque despiertas tantas sensaciones nuevas en mí que la verdad no sé bien cómo reaccione ante eso, y lo único qué sé con seguridad es qué jamás te lastimaría.

— Shaka...— le susurró dulcemente para besar el dorso de su mano. — siempre confío en ti.

El guardián de la primer casa inició un camino de pequeños besos desde su muñeca, hasta cada una de sus falanges para luego morder con ternura su palma y lamer su dedo pulgar con deseo. Los ojos del virginiano estaban puestos con atención sobre esa boca que anhelaba besar, varias veces si era posible y jadeó levemente al sentir la humedad de la lengua del lemuriano en su piel. Sus miradas se posaron una sobre otra a la vez que las manos del hindú tocaban la figura del hombre que le despertaba sus más profundas fantasías,su cuerpo se agachó lentamente para exhalar el aire de sus pulmones por entre sus labios sobre las pieles erizadas del ariano qué se coloraba al ver cómo quitaba lo último qué restaba de su ropa y su tranquilidad haciendo que su corazón se desbocara.

El virginiano le sonrió lascivamente al subir y lo corrió hacia un costado para meterse en la ducha y tomar un cuenco que llenó con agua tibia. Estiró su mano y le ayudó a entrar para mojar la cabellera lila del ariano, empapando cada hebra lila que se pegaba a su blanquecina piel.

Viéndolo totalmente desnudo y con gotas cayendo por su piel crispada notó cuánto lo deseaba. Iba tirando agua sobre su cuerpo para enjabonar cada músculo qué se tensaba en sus manos mientras su entrepierna se endurecia al sentirlo, y siguió mojandolo para quitar la espuma creada por el jabón entre sus dedos.

El agua caia desde su cabeza hasta sus hombros para terminar en sus marcados brazos que temblaron ante el toque del agua regalandole una exhalacion de los labios rosados e hinchados que había besado segundos atrás .

Shaka repiró por la boca mientras tiraba agua en sus cabellos para lavarlos con shampoo muy delicadamente, cuidando de no hacerle mal, y otro poco más de agua para quitar el jabón del cuerpo de Mu ,las gotas estaban resbalándose por sus abdominales para mojar su bajo vientre, y su pubis cubierto por vellos menos lilas que los de su cabeza y no pudo evitar mojar sus labios para no ir a besar cada parte de aquel mojado cuerpo que le llamaba.

De repente el virginiano pareció sentir una ligera energía pero sus pensamientos fueron detenidos cuando el ariano comenzó a hacer lo mismo que él había hecho minutos atrás,lo miró con sus rubias cejas unidas y luego las relajó al sentir el agua sobre sus cabellos que quedaron hacía atrás dejando expuesto su rojo bindi. Jamás en su vida alguien le había bañado pero las manos suaves del ariano limpiand cada parte suya le provocaba entre ansias y ternura ya qué lo hacía con tanto cariño y dedicación cómo cuándo le besaba en otros momentos menos inocentes.

Otra vez sintió una pequeña energía y giró levemente su rostro hasta que Mu apoyó sus manos en sus caderas y se inclinó ante él.

Los cabellos mojados creaban varias gotas que chocaban con el agua acumulada en la pequeña "bañera" que se creaba por la parecita alrededor de sus pies. Las esmeraldas le obsevaron, ardientes, brillantes y algo coloradas al rededor del iris y las mejillas se volvieron rojizas tanto por el calor como por la excitación de las caricias proporcionadas anteriormente por el hindú, de repente sus labios besaron sus ingles y su lengua subió por su sexo haciéndolo jadear

—Mu...—le sonrió y se agachó para arrodillarse quedándose a su misma altura.

El agua cubría sus pantorrillas y pies hasta su rodilla. Los cabellos dorados caían en forma de lluvia por el agua y su flequillo estaba acomodado hacia atrás dejando a la vista esos zafiros que hacían que las esmeraldas se escondieron tras las pestañas lilas por unos momentos. Atrajo al lemuriano desde su nuca para besar esos labios qué le enloquecían, y le dió la vuelta apoyándolo sobre sus piernas. Unos gemiditos salieron de la boca del ariano al sentir el ruido de sus mojadas pieles bajo el agua y acarició la silueta del hindú atrayendolo hacia él permitiendo que su hombría chocará con sus glúteos.

El rubio acarició los abdominales del ariano y subió hasta su pecho para atrapar sus pezones con sus dedos apretandolos.

 

— Sh...ahg...kaah— Gimió el ariano al sentir la lengua en medio del agua que caía en su cuello.

En un acto de osadía y excitación, Shaka introdujo su falo erecto dentro suyo al sentir su entrada sobre su erección teniendo como respuesta su estrechez recibiendole poco a poco hasta acomodarse a él en un jadeo que salió de la garganta del ariano. Un poco le dolió e incluso soltó un pequeño quejido seguido por un gemido qué el virginiano tapó con sus labios.

—¿Te gusta así ,Mu?— le susurro haciéndole estremecer cuando una de sus manos se escurrió hasta su falo erecto frotandolo con ansias a la vez que sus piernas movían el cuerpo del lemuriano.

—Ahhh ahhh aghs agh Shaka privame. ... de ...los...aghs— gemia mientras los dedos del hindú se movían de arriba hacia abajo masturbandolo entre el agua tibia.

—Mu...— el hindu se rió al escucharlo decir aquello.

El ariano se avergonzó y llevo sus mano a su rostro totalmente colorado de la vergüenza — lo siento.

—Oye no —lo regañó con dulzura — déjame verte y oírte ,solo me sorprendió escucharte decir eso.

El lemuriano bajo sus manos muy lentamente a través de la silueta del hindú y apretó su piel al sentir las leves enbestidas que le propinaba. Los jadeos salían levemente de esos labios divinos que el ariano deseaba besar, y entonces la otra mano del rubio giró el rostro del ariano para introducir su lengua dentro y rozar la suya.

El cuerpo del ariano se encorvó introduciendose más en el virginiano que le daba tanto placer en esos momentos. Sus cuerpos se acomodaron y se movieron a la par ,bastaron unos pocos movimientos para que el semen del ariano cayera por las falanges del hindú mezclandose con el agua que caía y un fuerte gemido ahogado en la boca del lemuriano para que el virginiano se viniera dentro suyo. Sus pechos estaban agitados y sus cuerpos aún calientes por ese breve pero intenso momento. El rubio mordió levemente un labio del lemuriano cuándo se separaron y enseguida se dio la vuelta para darle un pequeño beso.

—¿Te gustó así?— pregunto curioso al ver las esmeraldas brillando ante sus zafiros.

—Me gusta más verte, pero estuvo muy bien— le sonrió aún agitado y levantándose para ofrecerle su mano.— siempre me gusta estar contigo Shaka.

El virginiano iba a responder pero notó otra vez aquella presencia y está vez volteó su vista hacia la puerta que estaba entre abierta . Unió sus cejas rubias extrañado,y frente a esa expresión Mu le imitó.

Miró justo cuando un mechón rojo se asomó por el borde de la puerta.

El ariano se sonrojó y se puso casi bordó cuando de golpe abrió la puerta con su telequinesia.

— ¡¿Qué haces ahí, Kiki?! — Le gritó.

El niño tenía una cara de susto horrible cuando terminó de asomarse.

— Yo... no... que...ría... — Balbuceó el niño con una voz totalmente apenada.

—¡KIKKI! — le regaño—¿qué estabas haciendo espiando?

 

El niño salió corriendo y se fue hacia otro lugar. Mientras que Mu abría y cerraba sus labios.

 

— Shaka, lo siento. Te juro que no sé qué es lo que le pasa ,no suele ser así — dijo viéndolo totalmente apenado.

La expresión del rostro de Shaka era dura —Imagino que no.

Luego de un silencio el virginiano se relajó y se empezó a reír con ganas.

—Ah, ¿te resulta gracioso?— Mu le imitó y le salpicó con agua.— y yo preocupado por pensar qué tendría que encerrarte en mí cristal wall.

—¡Por Buda!, sentí algo de vergüenza y, no recordaba haberla sentido hace mucho Mu— le confesó sonrojado limpiando sus ojos.

—Creeme qué yo también y un poco de miedo — se rió.

El hindú unió sus cejas — miedo tiene que tener Kiki cuando lo vuelva a cruzar.

El ariano lo tomó en sus brazos —No, si yo lo voy a castigar y no sé si vas a poder llegar a hacer algo con él.

—Mmmmm— rozó sus labios con los suyos y sonrió — entonces voy a tener que castigarte a ti, después de todo es tu alumno.

El lemuriano se mordió un labio y se sonrojó,sabía que significaba esa mirada de Shaka.

 

.... Continuará....

Chapter 22: Una charla impostergable.

Chapter Text

Capítulo 21: Una charla impostergable.

Shaka de Virgo.

 

Una luz dorada se intensificaba en la casa de Virgo creando un ambiente solemne y sagrado mientras el Patriarca avanzaba con paso firme por ella. Shaka, estaba en su posición de meditación, sentado en la flor de loto, con los ojos cerrados y la mente enfocada en su interior cuando Patriarca se detuvo frente al virginiano y esperó un momento.

Enseguida el hindú abandonó su posición de meditación y se puso de pie para hacer una respetuosa reverencia. Sus ojos no se encontraron con los del otro, y sin embargo, se estableció una conexión silenciosa entre ambos.

—Shaka de Virgo—dijo el Patriarca con voz serena— Necesito hablar contigo.

Shaka asintió y se inclinó ligeramente en señal de respeto— Lo que necesite su santidad.

—Los rumores y especulaciones siguen sobre algunos caballeros dorados, en especial Mu de Aries. ¿Qué averiguaste al respecto?.

Shaka se tensionó al escuchar de nuevo esa hipótesis —Mu es mi compañero. No percibí que sea un traidor.

El Patriarca pareció sonreir— Eres leal y perceptivo, Shaka. Por eso confío en ti— se aclaró la garganta mientras apoyaba su peso de un pie a otro—¿Sabías que Camus fue a Siberia?— preguntó restándole importancia a lo que decía.

El virginiano asintió con la cabeza—Estaba al tanto, y Milo lo acompañó también.

—Mandé a Shura para vigilarlos para acallar a aquellos creen que podrían ser traidores— continuó con tranquilidad — no es que yo lo pensara pero hay cosas que de deben hacer.

Shaka frunció el ceño. No podía creer que sus compañeros dudaran entre si pero el Patriarca tenía razón: debían despejar cualquier duda que surgiera.

—¿Tú qué opinas de Mu?— preguntó de repente sorprendiendo a Virgo que le pareció vivir un DejaVu.

—Cómo dije hace un excelente trabajo como reparador de armaduras— respondió con rapidez.

El Patriarca se acercó al hindú y con habilidad tomó su barbilla. Nadie, salvo el ariano había llegado a esa confianza con él sin embargo permitió aquel contacto sin estrellarlo contra una columna por ser quién era aunque sus cejas se fruncieron haciendo notorio su bindi.

—Sé que tienen una relación especial con Aries—susurró con doble intención aunque a la vez amablemente — Por eso te confié el trabajo de vigilarlo.

Shaka se apartó bruscamente con el semblante serio más luego se relajó —Disculpe, pero no veo necesario que se preocupe de más— soltó con seriedad evitando su comentario adrede.

El Patriarca torció su rostro — me pregunto si tus sentimientos se interpondrán en el bien estar de Athena, Shaka de Virgo.

—No tengo tales pensamientos—afirmó aunque si los tenia y todos intensificados justamente con el lemuriano— De todos modos, insisto, no considero a Mu un traidor.

El Patriarca se rió—Entonces tráelo aquí. Si es un fiel caballero, que lo demuestre. Pero si descubres que es un traidor... debes estar preparado para hacer lo necesario. El Santuario y Athena están por encima de todo.

— Si es necesario, haré lo que deba hacerse pero no actuaré sin evidencia— dijo con determinación.

El Patriarca se rió por lo bajo—También eres muy cercano a Saori. ¿Qué piensas de ella y su relación con el caballero de Pegaso?.

—Creo que su parte humana está siendo justamente humana pero no será un problema cuando sea completamente Athena— dijo reflexionando un poco para sí mismo— Veo la justicia en su interior y le soy leal, tanto como a usted

—Perfecto —concluyó girandose sobre si mismo— confío en que cumplirás con tu deber de proteger el templo de Virgo y traer la armadura de Sagitario al santuario, ya que es un tesoro que sólo les pertenece a los Caballeros Dorados.

—Delo por hecho —concluyó mientras lo sentía alejarse.

Shaka había asumido la mision de proteger su templo porque era el caballero dorado de Virgo. También recuperar a Sagitario porque la lealtad al Santuario era su deber, y no dudaría en cumplirlo. Pero su mente estaba en Mu.

 

Y al momento se estaba dirigiendo hacia la mansion para la fiesta de esa noche. La conversación había sido extraña, como todas las que tenían últimamente con el patriarca cada vez que le informaba alguna situación pero tenía una misión e iba a cumplirla, no dudaba de Mu pero en su interior, la lealtad y la verdad se entrelazaban como hilos dorados.

 

— Eres de confiar, Shaka de Virgo — se repitió — Tú percibes aquello que otros no ven.

............

 

Mu de Aries.

El aire en el Santuario de Atena estaba cargado de misterio y desconfianza. Mu, el Caballero de Aries, descendía las escaleras de su templo, un lugar que no había visitado en mucho tiempo. La sensación de inquietud se apoderaba de él mientras sus poros se erizaban al sentir la energía del lugar.

《—No puedo evitar sentir desconfianza hacia el Patriarca. Su aura... es inquietante— reflexionó al volver a erizarse sus poros por el aire del Santuario》

 

¿Qué secretos ocultaba el líder del Santuario? ¿Por qué tenía esa sensación de malestar?. Una mano tocó su hombro por detrás, interrumpiendo sus pensamientos. Era Aioria de Leo, sin su armadura y vestido de etiqueta para la fiesta que reuniría a los Caballeros de Oro y otros invitados. La premisa era hablar de Pegaso, Sagitario y otros temas, pero Mu sabía que debía abordar algo más urgente con Shaka de Virgo aunque por ahora prefería evitarlo.

— Mu, el Patriarca desconfía de ti —dijo Aioria, con sus esmeraldas serias—Dice que pasas demasiado tiempo en Jamir y descuidas Aries. ¿Qué sucede?—inquirió.

El ariano frunció sus tikis—¿De mí? ¿Por qué?— inquirió.

—Cree que abandonas tus deberes como caballero de Aries y te escudas en ser el reparador de armaduras apropósito. Incluso tiene sus resquemores con Milo, Camus y Shura después de la misión en Siberia. —continuó— Sabes que te apoyé con Seika e incluso a Marín pero te pido no les des razones al resto para que duden de ti.

—Pero mi responsabilidad en Jamir es crucial. No puedo abandonarla, despues de todo Athena me encomendó ese trabajo— suspiró.

—Athena no tiene la armadura de Sagitario, ¿Recuerdas? Y el problema es que ha desaparecido. El Patriarca cree que los Caballeros de Bronce son responsables por ende dedujo que uno de nosotros les ayudó.

— Pero Athena está con Seiya. ¿Cómo puede ser que aún así desconfíe?

—No lo sé, pero debes volver a Aries. Eso es seguro.

Después de eso se despidieron brevemente ya que Aioria debia atender un asunto antes de llegar a la mansión, pero Mu quedó reflexionando a medida que subia por las escaleras del lugar. Algo no cuadraba de toda esta historia..

—Mu, es hora de hablar. De Sagitario y de los Caballeros de Bronce— sonó en su mente la voz de Shaka.

..............

 

Shaka de Viego y Mu de Aries.

 

El virginiano se encontraban en la fiesta, sólo porque la presencia de todos era requerida pero hubiera podido faltar si queria, a él le permitian ciertas cosas que a otros no, tal vez en parte era por ser llamado "casi un dios" pero quería, y necesitaba estar ahí. Ya hacia un tiempo que no veia a Mu y aquella conversaciónque habia evitado debia ser ahora. La luz tenue del lugar iluminaba su rostro mientras del otro lado dónde Saori y Pegaso se encontraban bailando, apareció el pelilila, de repente todo desaparecio y se miraban fijamente. Shaka sonrió, y se comunicó de la manera que mejor lo hacian: telepáticamente.

—¿En qué piensas, Mu?—susurró Shaka, su voz resonando en la mente del ariano.

Mu abrió los ojos y miró a Shaka con intensidad— Sé que nos debemos una charla, pero hoy no.

El virginiano frunció el ceño con sus okos cerrados —¿Por qué no respondes lo que te pregunto, Mu? ¿Me ocultas algo? — indagó con sus penetrante voz.

Mu suspiró— No puedo decírtelo. Hay secretos que deben permanecer ocultos.

Shaka elevó sus pensamientos y cosmo, su energía aumentaba pero no al punto que el resto lo notara. —. ¡Otra vez con eso!—exclamó, visiblemente enojado —Mu, te juro que si no me dices qué es lo que ocultas de una buena vez...

Mu se tensó con su cosmo aumentando— Shaka, no puedo decirte. Hay cosas que están más allá de nuestra comprensión. Si lo supieras, estarías en peligro.

El hindú apretó los puños—No me hagas esto, Mu. Si no me dices la verdad, te juro que pelearemos y tu 《Cristal Wall 》no te salvará esta vez. Por más que el patriarca quiera que te haga volver a Aries .

— ¿Otra vez me nombró? Empezaré a creer que está enamorado de mí— soltó con ironía.

El hindú se rió —No digas eso. Si así fuera, lo mataría.

— Shaka, no digas eso— dijo en su mente y sus mejillas se coloraron.

—Nadie se interpondrá entre nosotros—aseguró.

— Salvo que sea un traidor— dijo seriamente el lemuriano.

—¿Lo eres?— preguntó tajante.

— No, pero no creo que los Caballeros de Bronce hayan tomado a Sagitario y si eso me convierte en uno para el Patriarca entonces lo soy— aseguró.

— Eso lo veremos cuando hablen con claridad— su tono serio aún en la telepatía.

— Seiya está con Athena. ¿Qué mejor prueba que esa, Shaka? No entiendes... Hay algo extraño en el Patriarca.

El virginiano se sorprendió —¿Extraño, dices?.

— Eres el más cercano a un dios y no puedes ver algo tan simple.

—Hazme entender entonces, Mu.

El aire se volvió tenso mientras los dos caballeros se enfrentaban en sus mentes para llegar a la conclusión que debían salir de allí antes que todos vieran su bendita pelea.

 

...Continuará...

Chapter 23: El tiempo de detiene.

Chapter Text

Capítulo 22: El tiempo se detiene.

 

Al final no había sucedido ni en el santuario, ni en Jamir. En realidad ambos habían evitado ir a algún lugar que conocieran, después de todo sabían que este encuentro sería diferente a los de siempre porque está vez sus cosmos ardían intensamente por un motivo que los unía pero a la vez era muy ajeno a sus días de amantes.

La tensión entre ambos era palpable para cuándo las esmeraldas se posaron sobre los párpados del virginiano qué se encontraba frente suyo. Ese qué tanto amaba. De repente apareció una sonrisa en los labios de Shaka mientras el corazón del ariano se aceleraba a medida que se acercaba un poco más a él, midiendo sus pasos que se hundían en la hierva mojada, casi que le recordó a la primera vez en la que se había dado cuenta lo que realmente significaba Shaka para él y eso lo hizo sentir ansioso.

—Supongo que....no me has llamado a parte para aprender a restaurar una 《Cloth》— soltó el lemuriano posicionado ya delante suyo.

—No precisamente sino hubiera ido a Jamir— respondió nuevamente serio el hindú.

El viento acarició los dorados cabellos haciéndolos danzar y permitiéndole a Mu sentir el aroma a sándalo proveniente de ellos. Se lamió los labios para luego cerrar sus ojos disfrutando de aquel perfume que recubria al santo dorado y le penetraba. Suspiró y abrió las esmeraldas muy lentamente. Manteniendo sus tikis unidos, iba a hacer una pregunta que en el fondo sabía la respuesta aunque quería escucharla de esos finos labios que deseó besar pero se contuvo.

—Entonces....¿Para qué, Shaka de Virgo?— cuestionó.

 

Mu se sentía tan agradecido de que Shaka le hubiera permitido conocerlo tan profundamente, que se abriera de esa manera con él no era para menos, sobre todo estos días en que el Santuario tenía este extraño y siniestro aura. Incluso estaba seguro que había sido la prudencia de Virgo la que había evitado que lo catalogaran de traidor, porque él tenía el privilegio de conocer la faceta más dulce del hindú, esa que parecía se permitía experimentar solo con él.

En la que se mostraba cariñoso, siempre velando por su bienestar, tratando que nada le falte, buscando complacerlo en todo. Aunque Mu en medio de su inocencia y falta de experiencia, trataba de estar muy pendiente de cada detalle también, ya que quería que esos momentos juntos a el virginiano fueran únicos.

Aquel Santo de Virgo era sin duda lo que necesitaba como compañero de armas, como amigo y como amante. Esa última palabra en su mente le hizo sonrojar, pues aunque a Virgo lo representara la virgen, eso no significaba que su santo guardián lo fuera, al igual que a pesar de haber pasado su adolescencia junto a los demás caballeros dorados no los convertía en amigos. Es decir se conocian pero de ahí a compartir algo realmente intimo a lo que pudiera llamarse amistad solo le habia sucedido con Aldebarán, Aioria y Shaka.

El resto eran sus compañeros, y tampoco se molestaban demasiado en entender al lemuriano pero eso era debido a que ninguno se había atrevido a hablar con él, a conocerlo así que les era imposible saber qué pensaba respecto a toda la situación que se estaba viviendo en el Santuario.

De todos modos todos eran amables y, se podía decir que se llevaba bien con los demás caballeros dorados, más este último tiempo que tenían un gran trabajo por delante y que según Athena, las armaduras necesitaban de su dedicación.

Lo observó al abrir sus ojos, el hindú era realmente bello, no podia evitar tener esas sensaciones entre impuras y tiernas son él pese a la alarma en sus entrañas, pero finalmente no pudo evitar sonreír aunque la situación no lo ameritaba así que volvió a poner su semblante serio.

—¿Hasta cuándo vas a seguir asi? — le increpó Shaka de repente.

—¿Así, cómo ? —preguntó sorprendido mientras el virginiano lo tomaba con cuidado de la mano.

—Esquivo... —dijo colocando una mano en la mejilla de ariano y la otra, en su cintura atrayéndolo más él para pegarlo a su cuerpo.

—¿Es que la situación no lo amerita a caso, Shaka? —soltó fijando sus ojos en los de él, que ahora estaban abiertos.

El hindú se semi rió —Mu...¿De verdad tú ...? — susurró sin terminar la pregunta que no quiso salir.

—No, o si ...todo depende de cómo lo veas ¿Puedes con eso?— soltó algo dolido y separándose abruptamente de entre sus brazos — Y su fuera así, ¿Quién mejor que tú para enfrentarme?.

—Haré lo que deba pero desearía que no fueras tú. ...—su semblante se endureció y su voz sonó sepulcral.

—Pues si debo morir prefiero sea en tus manos— las esmeraldas brillaron ante las estrellas que los recubrian y su cosmo se elevó en magenta.

—¿Aún crees qué podría matarte?— repregunto con un deje de entre dolor e incredulidad, una que normalmente Shaka carecía.

—Yo a ti estoy seguro que no pero no pienso que seas un traídor y aún si lo fueras...— murmuró dejando la última palabra en el aire.

— Te dije que no creía eso de ti Mu ni te lastimarla, ¿Por qué tú si dudas de mi?— suspiró encerrando sus zafiros en las pestañas rubias.

—Porque estás demasiado ciego Shaka y eso...es malo—se aclaró la garganta—Muy malo.

 

El virginiano quiso contestar pero lo único que recibió fue una revolución de polvo estelar, no mortal pero lo suficiente fuerte para hacerlo flaquear y casi caer al suelo.

—¡Haz lo que necesites, no pelearé contigo Mu!— Exclamó expandiendo una mínima coraza de su Khaan.

—Tendrás qué, porqué jamás me mentiste— suspiró con la voz casi a punto de temblarle— hasta hoy y no me gusta a dónde apunta esto.

—Yo no te miento— la voz de los finos labios salió más gruesa de lo habitual.

Shaka, el Caballero de Virgo, desplegó su energía con elegancia. Su mente analítica calculaba cada movimiento que Mu podría hacer, y su puño se iluminó con la fuerza de las estrellas.

—Mu, no puedo permitir que ocultes más secretos. Tu silencio es el me desafía, no lo que yo piense o deje de pensar — concluyó.

Mu, el Caballero de Aries, sonrió con serenidad. Su cosmos ardía como una llama repentina — Shaka, hay verdades que no pueden ser reveladas. Mi deber es protegerlas y a ti.

El primer golpe que Mu recibió resonó en su palma en el silencio, obligando a Shaka a lanzar una ráfaga de energía, que Mu desvió con su 《Cristal Wall》. La tierra tembló bajo la presión de su choque y sus piernas también.

—¡No me subestimes, Mu!—exclamó Shaka, con su voz llena de determinación.

Mu esquivó ágilmente un ataque giratorio y contraatacó con una serie de puñetazos.

—Shaka, no entiendes. Hay fuerzas más allá de nuestra comprensión. Protejo lo que debe permanecer oculto.

Los dos caballeros se movían con gracia y ferocidad. El suelo sonó cuando sus cosmos chocaron nuevamente en un golpe que está vez detuvo el virginiano.

—Mu, ¿Qué es lo que proteges?— volvió a preguntar como si esa fuera la última oportunidad de responder.

—El equilibrio entre el bien y el mal. La verdad que podría desgarrar todo. No puedo decir más.

Shaka no podía creer que Mu lo desafiara de esa manera. El corazón le latía con fuerza, y aunque sabía que no podía lastimar al Santo de Aries, no podía evitar sentirse emocionado. Mu era un caballero muy fuerte y siempre lo supo. El aire estaba cargado de energía cósmica, y ambos sabían que esta pelea no sería una cualquiera porque no se trataba de demostrar habilidades, sino de enfrentar sus sentimientos más profundos.

Cada movimiento era preciso, como si estuvieran bailando al ritmo del universo. Mu admiraba la destreza de Shaka, pero también sentía una punzada de celos. ¿Cómo podía luchar contra alguien a quién decía amar tan a la ligera?. A él le estaba costando.

—¿Crees qué puedes vencerme, Mu? —preguntó el hindú, su voz tranquila pero llena de seguridad.

El lemuriano sonrió. No quería lastimar a Shaka, pero tampoco podía rendirse. Se concentró en su cosmo y lanzó un ataque hacia él. El virginiano lo esquivó con facilidad, pero el ariano no se detuvo siguió buscando una oportunidad para ganar. Enseguida Mu recordó las palabras de Athena:

《“El amor es la fuerza más poderosa del universo”.》. La voz de la Diosa como si estuviera a su lado le hizo parpadear.

Él amaba a Shaka con todo su ser. No podía perder.

De repente, el hindú detuvo su movimiento sorprendiendolo y deteniendolo también. Resulta que los ojos de Shaka estaban fijos en él, y Mu sintió que el tiempo se detuvo. ¿Qué estaba pasando?.

—Mu, no puedo luchar contra ti —dijo el virginiano con sinceridad— No quiero lastimarte.

Shaka lo miró fijamente, hundiendo esos celestes zafiros en sus esmeraldas y Mu supo que no estaba solo en sus sentimientos. Ese algo entre ellos, permanecía, y ese sentir trascendía el tiempo y el espacio. Dicen que los ojos son las ventanas del alma, pero en el caso del virginiano, sus ojos eran mucho más que eso para el ariano. Eran el reflejo de su corazón, de sus sentimientos más profundos.

La primera vez que había visto a Shaka en el santuario le pareció que era un hombre de sabiduría y poder, pese a ser tan pequeño pero también de una belleza inigualable. Mu no podía apartar la vista de él en los entrenamientos ni en las misiones venideras e incluso en el día de hoy no podía dejar de mirarlo y aunque intentaba disimularlo, sus ojos siempre encontraban el camino hacia Shaka. Porque el hindú siempre había sido su lugar.

El serio rostro del virginiano cambió a una pequeña sonrisa mientras se acercó al lemuriano.

— Ven aquí — susurró con una voz suave mientras encerraba al ariano entre sus brazos.

 

Con delicadeza, sostuvo el rostro de Mu entre sus manos, acariciando su piel suavemente y luego, con ternura, depositó un pequeño beso en su nariz, creando una atmósfera íntima y dulce. El ariano se dejó llevar hacia su cálido pecho. El hindú tomó la barbilla del lemuriano entre sus dedos para levantarla y apoyó sus labios en los suyos creando un dulce beso que sirvió para sellar esa conexión profunda que tenían.

Los labios de Mu se abrieron para dejar ingresar la lengua del virginiano en su boca dejándolo explorarla como quisiera para seguirlo con la suya mezclando sus salivas, acariciando sus órganos que les erizó la piel insufacto. Sus corazones se agitaron y sus respiraciones aumentaron, porque era más que un intercambio de saliva o caricias de sus labios, era más bien la demostración del respeto mutuo y el amor que sentían capturado en ese simple beso la esencia de su vínculo especial.

El virginiano se separó un poco pero sin dejar de retenerlo entre sus brazos—Tendrías que haber empezado besándome desde el principio.

Las mejillas lemurianas se sonrojaron— Lo siento —le susurró antes de darle otro pequeño beso.

 

El hindú depósito sus labios sobre los del otro para mudarse hasta sus comisuras, su mentón y terminar por llenar el cuello niveo de pequeños besos. — Yo lo siento más — susurró entre medio del cuello haciendo que Mu se estremezca.

—Shaka....—susurró ahogando un gemido en su garganta.

Los suaves labios del virginiano sobre su piel le hacían cosquillas y su perfume ingresando en sus pulmones lo hacían desear que la ropa no se interpusiera entre sus cuerpos. Se estremeció mientras las manos del hindú quitaban partes de sus ropas tan rápidos que ni lo vió y lo acercó más a su cuerpo. Rozándose contra él con ternura, su calor directamente a su piel a través de las finas ropas lo hizo estremecer entre sus besos que volvían a repartirse por su cuello hasta su clavícula haciendo que su erección reaccionara ante los toques del hindú, el otro lo noto y acarició su entre pierna casi como pidiendo permiso aunque Shaka jamás lo hacía. Las niveas mejillas de ambos se coloraron y de repente el ariano se apartó un poco.

—Lo siento —soltó avergonzado pata hundirse en el hueco del cuello del hindú.

Shaka se rio por lo bajo—Mu...—abrió sus párpados para mirarlo profundamente a los ojos—No hay de que avergonzarse— susurró mientras llevaba la mano del ariano hacia el sur de sus abdominales demostrando la misma reacción en su cuerpo.

— Me me pasa lo mismo y no estoy avergonzado— pese a decir aquello se sonrojó.

Ambos labios se unieron para besarse profundamente por unos segundos y luego separarse unos centímetros.

—No esperaba qué sucediera en público—soltó el ariano mientras se mordía el labio para no besarlo de nuevo.

—Yo tampoco aunque...confieso qué por más que sea al aire libre me gusta — susurró atrevidamente mientras corria un mechón lila del rostro del otro.

 

....Continuará...